Por Nicolás Álvarez Arrau

El último informe del Ministerio de Economía, Fomento y Turismo sobre constitución de empresas y sociedades indica que a nivel país hubo 12.568 constituciones en enero pasado, según el Registro de Empresas y Sociedades (RES). La cifra es 18,6% mayor a la obtenida el mes anterior y 2,5% más alta que la de enero de 2022.

En la comparación de los últimos doce meses, y a diferencia de la realidad nacional, se observa que sólo hay cuatro regiones que presentaron caídas: Atacama (-5,8%), Valparaíso (-0,9%), Aysén (-5,9%) y Biobío (-4,7%). El territorio local contabilizó a inicios de año 903 constituciones, es decir, el 7,2% del total país. Respecto a diciembre, el número creció 19,9%.

Durante enero de 2023 una proporción importante de los giros que fueron declarados al momento de realizar la constitución correspondió a las áreas de comercio (compra y venta), asesorías, construcción, transporte y arriendos. De esta forma, el sector servicios es el que nuevamente presenta el mayor dinamismo en la creación de empresas a través del RES.

Factores detrás de las cifras

Desde la cartera económica destacan el alza mensual evidenciada en la Región, pues eso representaría un mayor dinamismo y un avance hacia la formalización laboral, "una oportunidad para seguir creciendo desde el punto de vista empresarial", de acuerdo al seremi Javier Sepúlveda. El representante local de Economía plantea también que dentro de las 903 constituciones regionales pueden haber personas que ya tenían empresas y que hoy están cambiando de rubro o buscando nuevas perspectivas en otros sectores económicos.

"Lo positivo es que se están creando empresas, ya que eso habla de que el mercado va recibiendo las señales y se va ajustando a la realidad (...) Vamos generando un mayor nivel de bienestar en la economía en su conjunto", puntualiza Sepúlveda.

En cuanto a la caída de doce meses, el seremi dice que hay que tener en cuenta un contexto muy puntual y que tiene que ver con que en esa fecha aún había un nivel de actividad económica sobre lo inusual, como respuesta a la inyección de montos por los estragos de la emergencia sanitaria por covid-19 mediante los IFE o los retiros previsionales. "Partimos 2022 con una racha económica, lo que estimula la mayor creación de empresas, y esa situación no la tuvimos en enero de este año, sino que lo inverso en un contexto de alta inflación", explica la autoridad.

Carlos Smith, académico de la de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo (UDD), sostiene que en momentos económicos como el que vive hoy el país y la Región es urgente tener un número mucho más grande de empresas y sociedades, "porque la única forma de crecer es teniendo puestos de trabajo, lo que significa impulsar el emprendimiento y tener más empresas".

Si bien reconoce que es complicado identificar un factor responsable en la caída regional anual, el profesor plantea que es posible que tenga mucho que ver el hecho de que varias personas del Biobío tienen trabajos en el norte del país, invitando con ello a constituir empresas y sociedades allá.

A eso suma el tema de la informalidad, escenario que recrudeció con fuerza tras la llegada de la pandemia. "La constitución de empresas implica formalizarse y pagar impuestos, pero hemos tenido un alza importante en lo informal (...) Con herramientas como Uber, por ejemplo, se recibe una cantidad de dinero, pero también ayudas del Estado, porque para el Estado esos primeros dineros no existen", advierte, a la vez que llama a generar los incentivos adecuados para lograr la formalización laboral.

El informe muestra que en el proceso de constitución a nivel nacional hay una participación marcada de hombres (53,9%). Sólo 27,8% son mujeres y en el 18,1% de los casos están presentes de forma conjunta ambos sexos. El 0,2% no reporta sexo.

Un nuevo hito en su trabajo de impulso a la equidad de género sumó Landes, con la presentación pública de un manual que promueve buenas prácticas y estimula cambios culturales en la relación entre hombres y mujeres, tanto en espacios laborales como en el hogar.

El inédito documento deriva de una política corporativa que aborda áreas como equidad de género, inclusión, no discriminación y conciliación de vida laboral, familiar y personal, entre otros. La compañía pesquera inició este camino en agosto de 2020 con la adhesión a los principios de empoderamiento femenino que promueve la ONU, perspectiva que se fortaleció con los 13 Principios de Equidad de Género que impulsa el gremio a través de Pescadores Industriales del Biobío.

Carla Sánchez, gerenta de Asuntos Corporativos y Personas de Landes, explicó que "esta manual es una de las tantas actividades que hemos hecho para impulsar la equidad de género, que para nosotros es lograr que hombres y mujeres tengamos las mismas posibilidades de surgir, deberes y derechos, y haya corresponsabilidad en el cuidado de los hijos, por ejemplo. Sabemos que este cambio no será muy rápido, pero sentimos que estamos contribuyendo a generar una sociedad un poco más equitativa".

El esfuerzo fue reconocido por el Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género (Sernameg), cuya directora regional, Lissette Wackerling, aseguró que "valoramos estas iniciativas, particularmente en rubros masculinizados, porque permiten implementar, al interior de las organizaciones, medidas que van sumando para poder lograr equidad y comunicarnos de forma inclusiva. Hemos apoyado a Landes en el último tiempo en estos temas y en su camino a la certificación de la Norma Chilena 3262".

Con la firma de un convenio entre cinco sindicatos de pesca artesanal de la Región y Refinería Bío Bío, el pasado 24 de marzo se dio inicio al proceso para el desarrollo y ejecución de los proyectos de Fomento Productivo que beneficiarán a cerca de 300 pescadores artesanales de caleta Lenga y la bahía de San Vicente.

La iniciativa, que contempla una inversión total máxima de US$ 55 mil, con hasta US$ 11 mil por agrupación, forma parte del plan de relacionamiento con las caletas aledañas a la empresa y tiene como finalidad resolver las necesidades levantadas por los propios trabajadores de la pesca del sector.

Así, dentro de los proyectos a desarrollar figura una serie de mejoras en infraestructura de las caletas, como mejoramiento y habilitación de sedes, además de la entrega de implementos para el trabajo diario, como motores, ropa de agua, redes, GPS, radios de comunicación y materiales de construcción.

En la oportunidad, César Jorquera, presidente de la Asociación Gremial de pescadores de San Vicente, destacó el lazo de confianza que se ha construido con la larga data de relaciones entre Enap Refinería Bío Bío y los pescadores artesanales de San Vicente, donde la empresa tiene parte importante de sus instalaciones. "Todos mostramos nuestras problemáticas, respecto a lo que sucede en la bahía y en qué nos puede aportar Enap", sostuvo.