Por Diana Aros Aros

La noticia de la extensión de obras de reparación del puente Ferroviario generó diversas inquietudes en el sector productivo de la Región del Biobío, escenario que ha levantado las alarmas de los distintos gremios. Y es que el pasado viernes se anunció que por al menos dos meses más se mantendrá suspendido su funcionamiento tras la afectación en la estructura que detuvo la movilización de carga y pasajeros. Sobre esto, la delegada presidencial Daniela Dresdner dijo que el daño responde a uno de los escenarios menos idóneos en el proceso de restauración. Sin embargo, aseguró que están trabajando en una serie de medidas de contingencia para enfrentar el tiempo en el que dicho puente no estará operativo, comprometiendo un plazo de dos semanas para abordarlas.

El seremi de Economía, Javier Sepúlveda, agregó que dicho panorama produce efectos que podrían ser permanentes para el sector productivo alojado en torno a las comunas de San Pedro de la Paz, Coronel y Lota, aunque aclaró que considerando la transferencia de carga, "el puente no representa más del 4% o 5% de la carga que se moviliza mensualmente por la Región del Biobío, por lo tanto, estamos hablando que para la economía regional no es tan significativo como se espera". Puntualizó también que algunos ajustes en el sector logístico podrían llevar a que ciertos contratos comerciales no se cumplan oportunamente.

Planificación local

Luego de conocerse la detención del servicio brindado por la infraestructura el 9 de diciembre, los sectores productivos generaron diversas medidas para paliar las incidencias negativas de la situación. En el caso de Corma, optaron por redestinar sus cargas forestales hacia el puerto DP World de Lirquén y a San Vicente Terminal Internacional (SVTI), además de priorizar otras rutas y el transporte nocturno para evitar la congestión en la zona.

El presidente del Área de Infraestructura de Corma, Gonzalo Pelén, explicó que "hemos colaborado con las autoridades en adaptarnos a este nuevo contexto logístico sin el puente Ferroviario sobre el Biobío, minimizando los impactos, tanto para la comunidad como para la carga. En ese sentido, hemos reubicado cerca del 50% de la carga que pasa por el puente y traspasado a camión cerca de 120 cargas, así como redistribuir cargas a los puertos al norte del Biobío. Creemos que podemos mantener esto durante el tiempo que dure la reparación del puente, es decir, hasta abril de este año".

Desde la cartera regional de Economía explicaron que se trabaja en la construcción de un plan para ir en apoyo concreto a las micro, pequeñas y medianas empresas que podrían verse afectadas por la contingencia. "Hay muchas que le prestan servicios al sistema portuario de Coronel y, por lo tanto, vamos a estar en los próximos días dando a conocer un plan de apoyo directo a las pymes que se están viendo afectadas", señaló el seremi.

Medidas conjuntas

Representantes de la Cámara de la Producción y el Comercio (CPC) Biobío reconocieron que esperaban un tiempo mayor de reparación, lo que se traduce en mayor seguridad para los pasajeros y los trenes de carga. No obstante, manifestaron su preocupación ante cuál será el plan de contingencia planteado por las autoridades y se mostraron dispuestos a generar una mesa de trabajo entre los sector público y productivo, sobre todo por lo que podría ocurrir en el mes de marzo, período caracterizado por el incremento del flujo y movilización en el puente.

"La afectación que ya están tiendo las empresas en la logística y finalmente en sus procesos productivos va a tomar aún un tiempo. Como representantes del sector privado esperamos que las autoridades nos inviten a una reunión o mesa de trabajo para que podamos enfrentar en forma conjunta la contingencia que esto va a tener, especialmente a partir del 1 de marzo en adelante, dado que el sector productivo es producción, logística y son personas que deben desplazarse de lado a lado", precisó Ronald Ruf, gerente general de la multigremial.

2 semanas fue el plazo establecido por las autoridades regionales para activar medidas de contingencia.

El programa de Capacitación en Buenas Prácticas Ambientales para Mejorar la Calidad del Agua busca mejorar la situación de quienes habitan la Provincia de Biobío. La iniciativa fue lanzada en la comuna de Los Ángeles, instancia en la cual se indicó que beneficiará a cerca de seis mil usuarios de las siente Organizaciones de Usuarios de Agua (OUA), las que administran más de cuatro mil kilómetros de canal. También se anunció que el programa estará destinado a dirigentes sociales y comunidades educativas, con un territorio de intervención cercano al 95% de la superficie de riego a nivel provincial.

La ejecución del proyecto, que se extenderá hasta octubre de 2024, responde a los lineamientos estratégicos planteados por la Unidad de Desarrollo de la División de Estudios y Desarrollo de la Comisión Nacional de Riego (CNR) que busca instalar capacidades para el uso eficiente y sustentable del recurso hídrico.

Jorge Muñoz, encargado zonal de la CNR Ñuble-Biobío, enfatizó que este programa es la continuidad de un modelo de intervención alineado con la política de seguridad e inocuidad de los alimentos que comenzó en 2017 con la Asociación de Canalistas Biobío Negrete y continuó con la Asociación de Canalistas del Laja desde el año 2020, "escalando la propuesta de gestión de calidad de aguas a un modelo de gobernanza que considera, además de las Organizaciones de Usuarios de Agua, a los municipios, escuelas y juntas de vecinos, involucrando directamente a cerca de 6 mil personas".

El programa será ejecutado por el Centro Regional de Estudios Ambientales (CREA) de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC) y tendrá su oficina operativa en la ciudad de Los Ángeles.

La seremi de Agricultura, Pamela Yáñez, destacó que "la importancia que tiene para nuestro Ministerio es mejorar las capacidades de gestión de la calidad del agua que se emplean tanto en riego como consumo humano en la Provincia de Biobío, mediante la implementación de buenas prácticas ambientales en un proceso que involucra no solo a regantes, sino que también a comunidades educativas, municipios y vecinos, en general".

Un positivo balance tuvo el programa Turismo Familiar de Sernatur que ha permitido llevar 300 pasajeros a Cañete. En concreto, la iniciativa busca promover el turismo interno, contribuyendo al quiebre de la estacionalidad a través del desarrollo de paquetes de viaje en modalidad todo incluido, como alojamiento por tres días, dos noches, alimentación completa, excursiones, además de juegos, transportes y seguro de asistencia de viaje.

La directora regional (s) de Sernatur, Maritza San Martín, detalló que a la fecha han viajado al destino Cañete pasajeros desde siete comunas de la Región, como Talcahuano, Quilaco, Tucapel, Tomé, Chiguayante, Santa Juana y Negrete. "Estamos muy contentos con el éxito con que se han desarrollado estos viajes subsidiados, porque así los turistas se encantan con Cañete y la Provincia de Arauco, en general, y son pasajeros que recomendarán el destino. Con estos programas se contratan servicios locales que permiten reactivar el destino", precisó.