El punto de inflexión del puente ferroviario
Una seria complicación para la conectividad del Gran Concepción representa el desnivel detectado en el puente Ferroviario sobre el río Biobío y que, de acuerdo a las estimaciones dadas a conocer por las autoridades hace dos días, requerirá un plazo de reparación estimado de dos meses.
La anomalía, que responde al impacto de un tronco de gran tamaño en la cepa 11 del viaducto, fue detectada hace una semana y obligó a la suspensión del tránsito de trenes, tanto de pasajeros como de carga, por lo que tuvo un efecto inmediato en la conectividad de San Pedro de la Paz, Coronel y Lota, todas ellas comunas que utilizan el servicio del Biotrén, así como también en el transporte de los distintos productos que circulan hacia los puertos de la Región.
Desde la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) se detalló el informe que corroboró que un tronco de dimensiones cercanas a los 5 metros de largo y un metro de diámetro golpeó el pilote 4 de la Cepa 11, generando una inclinación vertical de la vía, lo que el 9 de diciembre fue detectado por un conductor, levantando las alertas y la cancelación del tráfico por el puente como protocolo de seguridad. Según el informe el tronco de grandes dimensiones se encuentra encajado en la Cepa 11, mientras que a través del trabajo subacuático se detectó otro pilar de la misma cepa con un largo menor al de la información disponible, ya que cada una de las 61 cepas tienen 6 pilares con un largo de 16 metros.
Si bien el proceso de reparación del desnivel se espera concluya alrededor del 30 de enero, personal especializado realizará también un escaneo del resto de las cepas y pilotes del viaducto para descartar otras afectaciones y también en función de las obras del nuevo puente ferroviario y los impactos que este pudiese estar generando el desplazamiento del sedimento transportado por el río, que se encuentra en la base del lecho.
Por ello, la empresa estatal aseguró que los dos trabajos que se realizarán son el refuerzo de la estabilidad del suelo del río en las áreas que se intervendrán y la colocación de tubos que permitan alivianar la presión hidráulica sobre la zona afectada en la punta del espigón o dique del río.
Sin embargo y más allá de las reparaciones, que deben realizarse de manera eficiente y certera, una de las preocupaciones es que el tramo que conecta el Biotrén desde las estaciones Intermodal en Concepción y Juan Pablo II en San Pedro de la Paz está siendo suplido por buses interurbanos de acercamiento, con el fin de que los pasajeros puedan completar el recorrido por la línea 2. El plan de contingencia responde especialmente a la alta preferencia que tiene el servicio de Biotrén para los habitantes de las comunas del sur del Biobío y que, además, son parte de una de las zonas más afectadas por la congestión vehicular.
Según datos de EFE Sur, en cinco días, desde la jornada en que se suspendió el tránsito ferroviario en el puente, cerca de 100 mil pasajeros utilizaron el servicio, lo que hizo necesario que se incoporaran elementos adicionales de apoyo a los usuarios, como puntos de hidratación, vehículos habilitados para personas con movilidad reducida, accesos demarcados, plataformas de madera en las vías para evitar accidentes y monitores para orientar y ayudar en caso de dudas.
Además, el Biotrén comparte las vías férreas con el transporte de carga, que moviliza 5,5 millones de toneladas anuales de productos entre las regiones del Maule y La Araucanía, siendo la celulosa con destino a los puertos de la Región del Biobío y los productos forestales y químicos ligados a la producción a las plantas industriales como Arauco y CMPC. Por ello, autoridades y gremios también trabajaron para mitigar el impacto de la suspensión del uso del puente, llegando a una propuesta mixta, que significará para trasladar la carga a otros puertos de la Región y buscar que el tránsito de camiones que deban circular se realice en horarios en que no se afecte el tránsito vehicular ya colapsado del sector.
En este proceso de búsqueda de soluciones para pasajeros y carga, la sobrecarga de las rutas y el estrés vial de la zona debe ser considerado de manera relevante, así como llevar a una profunda reflexión sobre la necesidad de nueva infraestructura para la conectividad local. Es evidente que el actual escenario sobrepasó los límites del frágil diseño de conexión de las comunas, lo que se hizo presente especialmente en el mes de marzo pasado, pero que con la falla de uno de sus elementos claves, como es el puente Ferroviario, se puede llegar a convertir en una situación insalvable y compleja no solo para la calidad de vida de los habitantes del sector, sino también para la actividad económica local.
En este proceso de búsqueda de soluciones para pasajeros y carga, la sobrecarga de las rutas y el estrés vial de la zona debe ser considerado de manera relevante, así como llevar a una profunda reflexión sobre la necesidad de nueva infraestructura para la conectividad local.