Directivo de Aes Andes y energías renovables: "Es fundamental que exista transmisión suficiente"
Jorge Lagos, vicepresidente de Asuntos Corporativos, destacó la calidad de los vientos de la provincia de Biobío. Planteó también que es necesario adecuar la institucionalidad para mejorar la certeza jurídica.
"Biobío es uno de nuestros focos importantes. Es una zona estratégica para nosotros. Estamos generando proyectos por más de 800 MW en la cartera, entre construcción y desarrollo. Tenemos una inversión mayor a 800 millones de dólares en un momento donde muchos pensaban que no había fe de las empresas extranjeras en Chile".
Con ese frase Jorge Lagos, vicepresidente de Asuntos Corporativos de AES Andes, dio a conocer el lugar que ocupa para la compañía el desarrollo de parques eólicos en la zona.
Esto se expresa en los tres proyectos que tienen en construcción, más otros tres presentados ante la institucionalidad ambiental para su aprobación. Esperan tener dos de sus centrales funcionando antes que termine el año.
"Los proyectos de energía eólica se construyen bastante rápido. No tienen emisiones atmosféricas, tienen muy bajo impacto en operación. La molestia es la construcción por el transporte de sobredimensionados, pero son proyectos de muy bajo impacto en la operación", destacó el vicepresidente de Asuntos Corporativos.
Agregó que otra ventaja es que la superficie a ocupar es muy baja. "Puedes seguir haciendo uso agrícola en los sectores aledaños al parque y entre medio también. Es compatible con la agricultura y varias otras actividades", sumó.
Reconoció que las iniciativas de energía generan preocupación en la comunidad, pero cree que con información se pueden minimizar la desconfianza.
Comunidad e instituciones
-Cómo surge este nexo con la Región? Por qué instalar centrales acá?
-Como compañía estamos haciendo una transición energética muy grande, basada en tres pilares: acelerar la descarbonización, generar inversión y empleo, y valor y desarrollo en la zona donde operamos. En Los Ángeles hay un sector de mucho viento, de buenos vientos. Así empezamos a ver las oportunidades que había en la zona y empezamos a construir Los Olmos, que es nuestro primer proyecto.
-¿Qué percepción tienen sobre la comunidad respecto a los proyectos energéticos? En Biobío hay de todo y da la impresión que cada vez que hay un proyecto siempre hay un sector en desacuerdo. ¿Les ha pasado?
-Es entendible. Nadie quiere los proyectos cerca de sus casas, eso se repite en todas partes del mundo. El cambio de la matriz requiere mayor generación renovable y uno está donde está el recurso. No puedo poner un parque eólico donde no hay viento porque no hay gente. Lo importante es hacer las evaluaciones adecuadas y que se conozca más acerca de los parque eólicos. A veces hay muchas dudas que son temas que pueden resolverse explicándolos bien. La invitación a la comunidad es a que participen de los procesos, pero que se informen. También hay que robustecer la institucionalidad.
-¿Cómo ven los incentivos del gobierno para hacer este tipo de proyectos? Una cosa es que digan que quieren descarbonizar, pero eso no necesariamente va de la mano con incentivos para ello.
-Más que incentivos del gobierno, hacemos los proyectos porque hay un buen recurso y un proyecto rentable que va a contribuir a la descarbonización de la matriz. Lo que es fundamental es la planificación en la transmisión, es el mayor cuello de botella que existe para que los proyectos renovables puedan inyectar al sistema. Ahí es donde existen muchas restricciones. El Estado tiene que hacer un proceso más ágil. Ahí es donde tienen que jugarse el partido los próximos años. Es fundamental que exista transmisión suficiente para seguir generando proyectos de energías renovables.
-¿Hay algo más?
-La certeza jurídica de las resoluciones o permisos que te otorgan. La judicialización de proyectos va botando ciertas institucionalidades y procesos. En eso creo que se puede trabajar un poco más. Que se respete la obtención de los permisos. Eso es fundamental como inversionistas.
-¿Les ha pasado?
-Siempre hay judicialización de proyectos. De unos 15 años atrás a la fecha le ha pasado a distintos sectores. Si es que hay un problema con el sistema de evaluación de impacto ambiental donde el tribunal está dictando otra cosa, habrá que hacer las reformas para tener un sistema que dé cumplimiento a los nuevos estándares que aspira la sociedad en Chile y que dé confianza para todos. Eso es lo que los inversionistas quisiéramos. La judicialización es parte de los derechos que tiene la gente de poder recurrir ante una iniciativa que no le gusta y eso es válido, pero cuando hay temas administrativos, del sistema, hay que ir adaptando las institucionalidades a las nuevos realidades.
LA CARTERA DE PROYECTOS
Aes Gener tiene 250 MW en construcción: Los Olmos aportará 110, Mesamávida 68 y Campo Lindo 73. La inversión involucrada en estos tres parques es de 373 millones de dólares. La más alta es la de Campo Lindo.
Las tres iniciativas que están en desarrollo aportarán casi 480 MW en desarrollo. San Matías tendrá 108 MW de potencia, Don Álvaro 114 y Rinconada 258 MW. Esta central es la más grande que tendrán en la región y estará ubicada en Laja y Los Ángeles.
La más avanzada es San Matías, donde ya se presentó la adenda. Don Álvaro están en la fase de respuesta a las observaciones de los distintos servicios públicos. Rinconada fue ingresada en agosto y se proyecta que en las próximas semanas se inicie la fase de participación ciudadana.
En San Matías son 224 millones, el más grande, Rinconada, es de 365 millones y Don Álvaro es como 150 millones. Los Olmos es de 143 millones, Mesamávida, 93 y Campo Lindo 137 millones.