Adiestran a brigada canina que detectará enfermos covid-19
Perros policiales distinguen sustancias que expele el cuerpo para combatir al virus. En una hora, un ejemplar puede olfatear a 250 personas.
Gracias a su afinado sentido del olfato, los perros son utilizados en todo el mundo para detectar drogas, dinero o explosivos, capacidades que en Chile intentan aplicar ahora a la detección del coronavirus a través de una brigada canina que pueda distinguir por el olor a enfermos de covid-19 de personas sanas.
La medida fue ideada en Francia y se desarrolla también en Reino Unido, Finlandia y Emiratos Árabes. Ahora, además, se pondrá en práctica con cuatro canes de Carabineros.
Aunque el SARS-CoV-2 en sí no huele a nada, la respuesta inmunológica del cuerpo humano para hacer frente al covid-19 genera componentes a través del sudor que sí pueden ser detectados por los perros, cuya capacidad olfativa es 50 veces superior a la del ser humano.
El coronel Julio Santelices, director de la Escuela de Especialidades de Carabineros, explica que esta "prevención científica" es un hito para las brigadas caninas, que ya han demostrado su efectividad en la detección de otras sustancias que sí tienen un olor específico en sí mismas.
"Estos perros van a poder detectar la enfermedad de forma temprana. Ellos no van a reemplazar al (test) PCR pero son una herramienta fantástica que nos permite detectar de forma temprana este tipo de enfermedad", afirma Santelices.
PERROS ANTICOVID-19
El proyecto desarrollado por Carabineros y la Universidad Católica busca crear una primera brigada canina capacitada para poder detectar en espacios públicos personas enfermas de coronavirus en fases iniciales, con especial atención a los casos asintomáticos.
A pesar de que el entrenamiento de los canes todavía está en una primera fase, la idea es que a finales de agosto puedan estar trabajando en la calle.
"En una hora un perro puede olfatear a 250 personas. Si ingresamos con cuatro perros a un terminal de buses o a un estadio, ellos pueden olfatear en una hora a 1.000 personas. La efectividad es muy importante y establecimos que es superior al 95 %", afirma Santelices.
Los 300 millones de terminaciones nerviosas existentes en el hocico de un perro hacen de este animal un arma perfecta para detectar enfermos por coronavirus, y los cuatro pioneros de Carabineros son de las razas labrador y golden retriever, la élite entre los sabuesos y los perros rastreadores.
"Una vez que estén adiestrados para el olor del covid-19, van a poder detectar en forma temprana ese tipo de enfermedad y eso nos va a permitir a Carabineros aislar a esta persona, coordinar con el Ministerio de Salud, trasladarla a un hospital y hacerle la prueba PCR y derivarlo a un centro asistencial o a una casa de reposo", añade el uniformado.
Mientras los cuatro agentes caninos y sus guías continúan con su preparación, en la UC afinan las bases científicas de la iniciativa. Fernando Mardones es profesor de epidemiología veterinaria de esta casa de estudios y está a cargo del proyecto de los perros biodetectores.
"El patógeno no huele, lo que huele es el proceso que se genera en un individuo y que se emana a través de secreciones o excreciones. El olor particular que estamos obteniendo es del sudor de la axila, que el perro puede detectar por los compuesto químicos gatillados en la infección y que acompañan el sudor y son detectables", dice.
Mardones explica que todavía no se tiene claridad de cuál es el elemento exacto que puede detectar el olfato canino. Si la investigación avanza de forma favorable, el próximo paso es recolectar muestras de sudor de las axilas de enfermos de covid-19, tratarlas para hacerlas duraderas y entrenar a los perros para detectar ese olor, o incluso para otras patologías difíciles de detectar en etapas iniciales, como el cáncer o la tuberculosis.