Presupuesto para el próximo Gobierno Regional
Hace una semana, el Presidente Gabriel Boric se dirigió al país para entregar los principales aspectos del proyecto de Ley de Presupuesto de la Nación del año 2025, iniciativa que fue ingresada inmediatamente el pasado lunes 30 al Congreso, con el fin de iniciar tramitación y discusión.
De acuerdo a lo que estipulado en el documento y también informado por el propio Mandatario, el monto del presupuesto para el próximo año crecerá en un 2,7% respecto al de este año, especialmente enfocado en seguridad pública, seguridad económica y seguridad social, áreas para las que se dispondrá de nuevos montos destinados a avanzar en estos objetivos.
Durante el discurso, realizado a través de cadena nacional, el Presidente Boric sostuvo que "el Presupuesto del 2025 sigue la senda abierta en estos años, tiene el sello de nuestro Gobierno que es cumplir con Chile, cumplir con ustedes en seguridad, en crecimiento económico y en una política más solidaria, con más justicia, con más responsabilidad fiscal, con protección social, una nueva energía para que Chile vuelva a crecer con todos y todas".
Es sabido que el erario nacional consta no sólo de distribución de recursos para ministerios y servicios públicos, sino que también incluso fondos específicos para las regiones, a través de montos asignados para diversas inversiones locales. Este año, el aumento del presupuesto para los Gobiernos Regional alcanza en promedio cerca de un 7%, cifra que, según los cálculos del Gore Biobío, incrementa en alrededor de un 11% el ítem de iniciativas de inversión, ya que pasa de los $111 mil millones del año pasado a $123 mil millones para 2025.
La cifra global planteada a la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda por parte del Gobierno Regional fue de $168 mil millones, una cifra que dista de los $133 mil millones que fueron asignados en el proyecto de ley y que considera todos los ítems de la administración. Porque si bien desde el Gore Biobío informaron que la proyección era recibir alrededor de $118 mil millones, una asignación mucho menor a la que finalmente se determinó, de todas formas los fondos que estarán disponibles para el próximo año serán reducidos.
Las razones de esta situación están en la alta ejecución de iniciativas y convenios de programación, que obligarán a destinar los recursos a su cumplimiento en el corto plazo, dejando con pocas opciones a la nueva administración que asuma a partir del 6 de enero, una vez que quedé zanjada la elección de la próxima persona que asuma a cargo de la Gobernación Regional. En el detalle, hay que recordar que existe una cartera de proyectos relacionados, por ejemplo, con iniciativas de inversión que permitan desarrollar el Plan Más Movilidad -por medio de una serie de convenios de programación-, entre ellas obras en calles, conexiones ferroviarias y desarrollo de infraestructura en distintas comunas.
A esto se agregan otros compromisos asumidos con instituciones como Carabineros o Bomberos, entre otros, todos ellos con inversión programada para los próximos años. También se deben considerar las asignaciones para la realización del festival Rock en Conce (REC), el Campeonato Mundial de Rally o el financiamiento de iniciativas como la operación del CityLab Biobío.
Otro punto relevante es lo que ha planteado el propio gobernador saliente, Rodrigo Díaz, quien apuntó a una serie de restricciones en el gasto determinadas en forma posterior a que comenzaran las investigaciones por el caso Convenios, que en la Región están focalizadas en el traspaso irregular de fondos a fundaciones. La indagación de estos casos, que comenzó en junio del año pasado, está en marcha y significó una profunda revisión de la forma en que se adjudicaban los recursos públicos y, por lo mismo, la aplicación de una serie de limitaciones para prevenir nuevas situaciones y hacer buen uso de ellos.
Desde el propio Gore Biobío advirtieron que, si bien el presupuesto crece para el próximo año, es claro entonces que no crece lo suficiente para avanzar como lo plantea la Estrategia Regional de Desarrollo y el monto final obligará a priorizar el gasto en iniciativas de inversión, aunque sean destinadas a resolver las necesidades más urgentes que tiene la Región.
Una vez determinada la cifra presupuestaria en el proyecto de ley del Ejecutivo, es inusual que los montos varíen y si lo hacen es muy poco a partir de la indicación original. Sin embargo, la discusión legislativa está abierta, por lo que diputados y senadores tiene todavía la posibilidad de incidir en la discusión y buscar nuevas opciones de aumento del erario. Es un esfuerzo que podría beneficiar a la Región en un año especialmente difícil como será 2025, que requerirá un mayor empuje tras los acontecimientos que afectan y seguirán afectando la reactivación económica de la zona.
Si bien el presupuesto crece para el próximo año, es claro entonces que no crece lo suficiente para avanzar como lo plantea la Estrategia Regional de Desarrollo y el monto final obligará a priorizar el gasto en iniciativas de inversión.