Medio Ambiente fija marzo como plazo para establecer los planes de restauración ecológica
El 75% de la superficie rural de la comuna fue alcanzada por las llamas, lo que ha afectado también a la flora y fauna. Secretaría de Estado ha dispuesto recursos para monitoreo de situación del aire y agua en la comuna.
Pese a que aún no se da por finalizada la emergencia producto de los incendios forestales que desde inicios de febrero afectan a la Región del Biobío, el Gobierno planifica el trabajo de los distintos planes de recuperación de todo lo perdido ante el avance de las llamas.
En ese escenario, uno de los focos de preocupación en las zonas afectadas -junto con la ayuda temprana y entrega de servicios básicos- tiene relación con la restauración ecológica y recuperación de ecosistemas completos que el fuego alcanzó.
El ministro (s) de Medio Ambiente Maximiliano Proaño visitó Santa Juana -comuna que tiene el 75% de su superficie rural destruida- y comprometió que para fines de marzo estarán listos todos los análisis y evaluaciones, con el fin de iniciar la construcción de los planes que buscan recuperar la flora y fauna perdidas por los incendios.
"Hasta ahora tenemos reportes y el proceso que viene ahora es el de cuantificación del impacto, el que hace Conaf -que hoy están abocados al combate de los incendios-, por lo que nos tomará un tiempo contar con los datos, pero para nosotros la fase de dimensionar y analizar el impacto concluye en marzo, ya que necesitamos la información para planificar los procesos de restauración que se viene", explicó.
"Todas las zonas afectadas tendrán planes de restauración. Tenemos el compromiso como Gobierno para abordar esto, ya que la reconstrucción debe ser integral", comprometió el ministro (s) en su paso por la zona para luego trasladarse a la Región de Ñuble.
Situación comunal
Según las primeras estimaciones realizadas por los equipos a nivel municipal, cerca de 50 mil hectáreas de las 71 mil de superficie que tiene la comuna han sido alcanzadas por las llamas, afectando entre otros puntos las seis subcuencas presentes en la comuna y las especies nativas, entre ellas el queule y zonas de bosque nativo, además de fauna silvestre como zorritos darwin, pudúes, pumas y otros.
El ministro (s) Proaño -que se desempeña como subsecretario de Medio Ambiente-explicó que "estuvimos conversando con la alcaldesa, porque sin duda ella es quien tiene un vasto conocimiento de las necesidades del territorio ante el impacto de los incendios. Para nosotros es super importante en esta fase de emergencia ir evaluando el impacto de los incendios y los riesgos que se abren".
Respecto a la situación de la zona, la autoridad añadió que "el proceso de reconstrucción debe considerarlo a nivel territorial, mirándolo integralmente y pensando el territorio como un todo, planificando de mejor manera para eventos futuros que pueden seguir sucediendo en un contexto de crisis climática".
La alcaldesa Ana Albornoz detalló que "hemos tenido una comunicación permanente, y pudimos informar que teníamos una mala calidad del aire, además del problema de las cuencas. Vinieron a revisar la situación de los animales muertos, del agua potable que no llega al sector rural".
Además, expuso la necesidad de establecer nuevas políticas ambientales en las zonas donde convive la actividad forestal o industrial y los asentamientos urbanos, a fin de generar las medidas que proporcionen espacios seguros para estas dos actividades, y recordó que "nosotros hemos planteado estas situaciones, el subsecretario vino a inicios del gobierno y teníamos avanzada una conversación con las forestales para abordar los desafíos que tenemos. Lo importante es que no se vuelva a plantar en las cuencas y nosotros estamos disponibles siempre para ese diálogo, y necesitamos el apoyo del Gobierno".
"Nuestro bosque nativo está destruido completamente, y tenemos un dolor total de que se vea consumido con las llamas", sumó la jefa comunal.
Primeras medidas
Entre las medidas que se han enfocado puntualmente a la compleja situación que vive Santa Juana, Proaño detalla que "establecimos una estación móvil que mida la calidad del aire y algo que nos planteó la alcaldesa fue el monitoreo de calidad del agua, lo que coordinamos con el Minsal ya que hay preocupación en las zonas rurales, por la mortandad animal en los ríos. Además, sumamos un dron para monitorear también las zonas donde hay animales fallecidos y hacer las remociones respectivas".