ProChile Biobío proyecta mayor trabajo con empresas exportadoras de servicios
Este año se pretende tener incorporada a una treintena de firmas de este tipo dentro del sistema. El desarrollo de nuevos mercados también asoma como un desafío relevante.
A nivel regional existen 230 empresas dedicadas a la actividad exportadora. De ese número, solo 24 forman parte del área de servicios, es decir, 10,4% del total. Incrementar este número es uno de los objetivos que trazan desde ProChile Biobío de cara a este año, junto con profundizar el impacto de algunas firmas en mercados internacionales ya conocidos, pero también anexar nuevos destinos.
Lo anterior forma parte de un autodiagnóstico y estrategia del organismo del Ministerio de Relaciones Exteriores que fue presentado al Consejo Regional en diciembre pasado. En aquel momento, el director regional Osvaldo Marinao informó a los consejeros que para este 2023 se trabajará en la promoción de la oferta exportable de bienes y servicios con el objeto de contribuir al desarrollo del país, su imagen, a la inversión extranjera y del turismo mediante mecanismos de internacionalización empujados desde Biobío.
"Para 2023 continuará el foco en la agregación de valor, es decir, continuaremos apoyando a las empresas forestales o de pesca, pero la idea es que se incorporen más empresas de servicios al trabajo con ProChile, como de consultoría e ingeniería", sostiene Marinao, quien insiste en que este número es muy bajo dado el potencial del territorio y que la meta es incrementarlo. Se pretende que para este año se pase de 24 a unas 30 compañías de servicios exportadoras.
Para lograr este camino se profundizarán acciones como las herramientas de diagnóstico y la capacitación exportadora, los estudios de mercado e información comercial, los talleres de formación y nivelación, los fondos concursables y las ferias internacionales, ya sea presenciales o virtuales. Por medio de esta última acción se busca establecer espacios de vitrina, generar citas de negocios o concretar relaciones comerciales de alto impacto y larga data, entre otras.
Este tipo de acciones, precisa Marinao, vienen a suplir un déficit, en el entendido de que muchas de las entidades locales tienen el potencial para unirse a la cadena internacional, "pero no tienen mayor conocimiento sobre cómo se exportar un servicio, o cómo llegar a un cliente". Así, por ejemplo, será posible conectar a una empresa minera de Perú que requiera de servicios geológicos, asesorías o análisis liderados desde la Región.
Variaciones
A nivel institucional, las variaciones que habrá esta temporada dicen relación con tres ámbitos: diversificar a empresas que ya están exportando, diversificar bienes y productos de aquellas firmas insertas al trabajo previo de ProChile e incorporar a la actividad internacional a empresas que en estos momentos no realizan ningún tipo de envíos al exterior.
"Para eso estamos desarrollando nuevas herramientas y un programa que se orientará a los no exportadores. El Ministerio de Agricultura, por ejemplo, nos encargó trabajar con la agricultura familiar campesina para prepararlos como exportadores directos o indirectos. Los ejes transversales siguen siendo los mimos, y aquí es importante la sustentabilidad, el rol de la mujer y la vinculación de pueblos originarios", plantea el directivo local.
Nuevos destinos
Estados Unidos y China son los dos principales mercados del Biobío, especialmente por los sectores forestal y pesquero. Eso sí, desde ProChile dicen mantener una búsqueda constante de nuevos mercados para los productos y servicios locales y que Perú y Colombia son parte de las naciones más consolidadas en este ámbito.
Marinao explica que en el caso de los servicios Latinoamérica se perfila como una zona estratégica, lo mismo que Estados Unidos. "Respecto a la pesca y acuicultura, uno de los focos importantes, estamos buscando nuevos mercados, y ahí está Brasil, un mercado que hemos comenzado a trabajar desde el año pasado, sumándose a los mercados más tradicionales para nuestro sector de la pesca", ejemplifica.