Solución urgente para evitar la crisis sanitaria
De forma unánime la Comisión de Evaluación Ambiental (CEA) del Biobío rechazó el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto "Continuidad Operativa Relleno Sanitario Hidronor Zona Sur", que tenía por objetivo ampliar la vida útil del recinto por 12 años y que ahora, según las proyecciones realizadas, llegará a su capacidad máxima de uso en marzo próximo.
La determinación termina por cerrar los caminos a la empresa y al uso del relleno sanitario, que es uno de los que recibe los desechos de cuatro comunas del Gran Concepción, pero no es una decisión sorpresiva. En octubre pasado tanto el mismo organismo regional como la Dirección Ejecutiva del Servicio de Evaluación ambiental (SEA) habían rechazado la iniciativa destinada a una ampliación temporal del recinto, que era una etapa intermedia mientras se aprobaba y ejecutaba la extensión definitiva que finalmente fue rechazada esta semana.
Hidronor recepciona los residuos domiciliarios de Talcahuano y Hualpén, luego que Lota y Florida debieron buscar otro punto de acopio, misma situación que enfrentarán las dos primeras comunas a partir de marzo y mantiene la preocupación de las autoridades comunales, ya que el relleno sanitario de Cemarc, en Penco, también tiene una limitada vida útil, estimada en un año y medio de extensión.
La determinación del organismo pone vuelve a intensificar la presión para las distintas autoridades que deben buscar una pronta solución para un tema que se viene abordando desde hace ya varios meses, cuando se encendió la alerta a través de la voz de los alcaldes del área metropolitana. La situación fue tratada a principios de julio durante una reunión del Consejo Consultivo de Alcaldes del Gran Concepción, en la que se planteó ante el Gobierno Regional la preocupación existente por lo que, se estimaba en ese momento, podía transformarse en una crisis sanitaria en el corto plazo.
Los antecedentes dados a conocer en esa instancia indicaban que el relleno sanitario de Hidronor Copiulemu, ubicado en la comuna de Florida, contaba con solo un 3% disponibilidad para seguir recibiendo residuos domiciliarios y otros, por lo que se estimaba una proyección de vida útil de apenas siete meses. No era mejor la situación del relleno sanitario Cemarc, en Penco, que con un 33% de capacidad disponible podía llegar a su máximo límite en dos años y dos meses, según el ritmo de uso que actual. En ese momento estaba claro que ambas plantas tenían proyectos de ampliación en proceso.
A principios de septiembre, los integrantes del mismo comité consultivo de alcaldes, mediante un voto político, volvieron a manifestar su inquietud frente a la crisis sanitaria y ambiental que podría generarse de no mediar una actuación diligente y urgente por parte de los servicios públicos y de las empresas involucradas.
Sin embargo, el proyecto sometido a votación esta semana en la Comisión de Evaluación Ambiental terminó por ser rechazado y las comunas de Hualpén y Talcahuano podrán continuar llevando sus residuos a la planta de Copiulemu solo hasta 31 de marzo de 2023. La decisión se basó en gran parte en el incumplimiento del reglamento de rellenos sanitarios, que establece que estos recintos deben ubicarse a más de 600 metros de toda captación de agua existente, y a más de 60 metros de todo curso o masa de agua superficial, lo que según el Informe Consolidado de Evaluación Ambiental (ICE) no se cumplía.
Según los cálculos que realiza el municipio hualpenino, la situación financiera podría verse muy afectada, ya que acudir a otro relleno aumentaría los costos, ya que actualmente paga anualmente $1.884 y los valores referenciales de llevar a Cemarc (camino a Penco) sería de $3.056 millones, a Ecobio (Chillán) llegaría a $4.220 millones y a Laguna Verde (Los Ángeles) alcanzaría los $4.376 millones.
La delegada presidencial Daniela Dresdner, quien lidera la CEA, asegura que el tema está siendo abordado y que, junto a los municipios y otros organismos, se están trabajando en un plan de contingencia que considera el corto, mediano y largo plazo. "Es algo que nos estamos tomando con absoluta responsabilidad, pero no por esa urgencia vamos a pasar por arriba las necesidades medioambientales y vamos a dejar de cuidar el medio ambiente que es algo que nos preocupa profundamente", dijo la autoridad al término de la votación. Son varios los estudios y posibles planes anunciados para abordar la inminente crisis sanitaria son varios y habrá que confirmar cuáles serán los que lleguen a buen puerto. Por un lado, hace dos meses en el Gobierno Regional se informó que iniciarían un estudio para evaluar cuáles son las zonas de la Región que cumplen con las condiciones necesarias para albergar rellenos sanitarios en un mediano a largo plazo, análisis que debería estar en desarrollo. Al mismo tiempo, desde la Seremi de Medio Ambiente se afirmó que la Secretaría Ejecutiva Regional de Residuos del Biobío estaba evaluando, entre otras acciones, la posibilidad de levantar una estación de transferencia u otro tipo que permita una disminución de los gastos que tienen los municipios en la gestión de los residuos, sin descartar mecanismos a mediano plazo como son la valoración de residuos, reciclaje y compostaje para reducir la carga en los rellenos.
Son varios los estudios y posibles planes anunciados para abordar la inminente crisis sanitaria son varios y habrá que confirmar cuáles serán los que lleguen a buen puerto.