Necesaria mirada local para el plan Buen Vivir
El 17 de mayo pasado el Gobierno del Presidente Gabriel Boric anunció, a través de la vocería de la ministra del Interior, Izkia Siches, el plan Buen Vivir, iniciativa que fue presentada por las autoridades como una forma de hacerse cargo y reconocer la deuda centenaria entre el Estado de Chile y el pueblo mapuche. El anuncio se realizó en el marco de una serie de medidas para la Región de La Araucanía y las provincias de Biobío y Arauco en la Región del Biobío, entre las que contaba también el inicio del estado de excepción por 15 días, el que actualmente está pronto a cumplir 45 días y cuya solicitud de extensión será enviada al Congreso mañana lunes, por 15 días más.
En el plan gubernamental se anunciaron dos grandes ejes. Uno relacionado directamente con el reconocimiento de los pueblos originarios, lo que por un proceso de restitución de tierras más ágil en sus mecanismos e impulsado por un presupuesto que se duplicó para la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi), y el compromiso de reactivar la tramitación del proyecto de ley que crea el Ministerio de Pueblos Indígenas, con el fin de dar mayor peso y eficiencia a los organismos que se ocupan de esta temática en específico.
Además, en otra línea, se planteó la creación de parlamentos territoriales, instancias de diálogo que deberían comenzar en julio próximo y donde se reconocerá a las autoridades indígenas y a los actores de cada territorio para lograr acuerdos y responder a las demandas que se han planteado. En este punto también se agregó un ítem destinado a la inversión pública, con alrededor de $400 mil millones de pesos destinados a mejorar la calidad de vida de las comunidades y habitantes de las zonas definidas, a través de iniciativas de obras públicas, agua potable rural y salud, entre otros.
Esta semana, la ministra de Desarrollo Social y Familia, Jeanette Vega, visitó la Región para presentar a diversos actores locales los principales elementos y la aplicación que considera el plan Buen Vivir a nivel regional. En una reunión a puertas cerradas, confirmó que la iniciativa considera tanto la restitución de tierras como la inversión en infraestructura que ya se había anunciado y un plan de diálogos con las comunidades indígenas.
Solo por restitución de tierras este año 19 comunidades de las regiones de Biobío y La Araucanía deberían ser beneficiadas y las inversiones para las provincias de Arauco y Biobío superarían los $64 mil millones. El detalle se entregó a los alcaldes de las comunas correspondientes, además de parlamentarios, el gabinete regional y el gobernador regional. La ministra comprometió que se realizará al menos una vez más una visita desde el nivel central de la cartera, con el fin de ir monitoreando e informando los avances.
En el caso específico de las instancias de diálogo propuestas en el plan gubernamental, la Región tiene una particularidad, ya que previamente el Gobierno Regional ya había anunciado el inicio de una labor similar, que también tiene por objetivo generar un acercamiento con las comunidades. Demostrando la altura de miras necesaria para quienes ejercen la autoridad, tanto la ministra de Desarrollo Social como el gobernador regional expresaron que están disponibles para que los diálogos con las comunidades se realicen de forma complementaria, ya que el Gore los que realizará a partir de agosto próximo.
El gobernador Rodrigo Díaz sostuvo que más allá del origen de las agencias del Estado, "todas somos el mismo Estado y en su conjunto debe construir bien común". Especialmente importante fue su declaración en torno a sumarse a cualquier iniciativa que pueda existir para contribuir en aquello que haya coincidencia o entregar sugerencias cuando se pueda mejorar.
Pese a que esta bienvenida expresión de colaboración, el breve encuentro local mantiene un flanco abierto en relación a la participación de los alcaldes de la distintas comunas involucradas. Algunos de ellos cuentan con varios periodos a cargo de sus comunas y han sido testigos de la implementación de diversos programas gubernamentales para la zona, por lo que era evidente que expresarían la necesidad de ser considerados en los procesos de decisión de algunas de las medidas, como es el caso de la inversión pública.
El alcalde de Lebu y presidente de la asociación de municipios Arauco 7, Cristian Peña, fue claro al señalar que pese a los planteada, todavía falta en materia de información, esencial en el desarrollo de este tipo de iniciativas, donde la mirada local entrega elementos claves que no siempre es posible visualizar desde el nivel central.
Una buena vinculación con las autoridades comunales es parte del mínimo necesario para avanzar en los grandes temas de ambas provincias, donde los diagnósticos se han realizado por años, pero las prioridades no siempre han sido acordes a los mismos, lo que en este oportunidad podría ser corregido para alcanzar los objetivos trazados.
Demostrando la altura de miras necesaria para quienes ejercen la autoridad, tanto la ministra de Desarrollo Social como el gobernador regional expresaron que están disponibles para que los diálogos con las comunidades se realicen de forma complementaria.