Escuela de Verano para mujeres cierra con laboratorios de máscaras y danza
Las dos últimas instancias del proyecto producido por Activa tu Presente con Memoria se realizarán entre mañana y el domingo, complementando instancias ya realizadas sobre autocuidado corporal, introspección y planificación.
El último de los tres círculos dispuestos este año, en la tercera Escuela de Verano para Mujeres de Tomé, se realizará desde mañana en formato híbrido, extendiéndose hasta el domingo con dos alternativas de carácter artístico.
El llamado "Círculo del crear" considera los laboratorios de Diseño de Máscaras guiado por Natalia Morales y Butoh, junto a Pamela Gómez. El primero se realizará en forma virtual -desde Santiago- mañana y el viernes, a partir de las 18 horas, mientras que el segundo será en forma presencial en Cocholgüe, los días sábado y domingo, también a las seis.
"El eje de esta edición de la Escuela busca estimular la autobservación respecto al cuerpo, los recursos, talentos, procesos sociales y ancestrales, que permiten a las mujeres sostener el tiempo presente, tanto personal como colectivamente", reseña Alejandra Villarroel, gestora del ciclo autoeducativo y directora del proyecto Activa tu Presente con Memoria, a cargo de la iniciativa, cuyos dos primeros "círculos" fueron "del sentir" y "del pensar".
Sobre la percepción que tienen las mujeres que han participado en la propuesta iniciada el 23 de febrero, apunta en dos ideas basales, según Villarroel.
"La necesidad de vivir experiencias de autocuidado junto a herramientas sociales y creativas, y también expresan mucho agradecimiento", señala la gestora del proyecto iniciado en 2016, a su regreso a la zona desde Santiago.
Interesante considerar, señala, lo que se produce en el encuentro y cruce generacional, pues estas mujeres tienen entre 23 y 70 años, principalmente, habitantes de Tomé y Concepción.
"Acá la educación es una experiencia social no jerárquica, las docentes coinciden no sólo para transmitir un saber, sino para potenciar y complementar sus conocimientos. Ese diálogo permite que exista un ejercicio de cocreación hacia el cierre del ciclo, concebido por las participantes de ambos laboratorios", explica la también periodista, como un aspecto esencial de búsqueda en el desarrollo de los mismos.
Cabe señalar que las jornadas virtuales también se proyectarán en directo en el Centro Cultural de Tomé, admitiendo un aforo seguro de cinco personas presentes simultáneo a los 20 cupos en línea. La actividad presencial se desarrollará en la Ex Escuela de Cocholgüe para un máximo de 10 participantes (inscripciones en https://acortar.link/dxT0j1).
APRENDER ES LA IDEA
En ese contexto social/educativo/creativo, los aprendizajes del Laboratorio de Butoh y de Diseño de Máscara van a confluir en un ritual que se realizará en un espacio público de Tomé (por ver).
Aunque el resultado es imposible de prever, sostiene la productora, hay una estética que se busca alcanzar en el cruce de ambas alternativas.
"Tenemos la imagen de cuerpos butoh portando la máscara de nuca, para encarnar a esta mujer de pie que observa el mundo en todas direcciones", explica Villarroel.
Como recurso expresivo, agrega, la máscara de nuca constituye un artefacto de memoria, que "las participantes portarán para representar la postura de presencia que mira hacia el futuro y el pasado. Esto sin olvidar el camino recorrido antes para llegar al hoy, un rostro en la nuca que mira el origen, para que el pasado nunca se transforme en algo ajeno".
- Eso tiene que ver pienso con los objetivos propuestos en la Escuela este año.
- Así es, reivindicar a la cultura como espacio de aprendizaje reflexivo, apreciación artística y circulación de conocimientos cultivados por y para mujeres, abordando el autocuidado en el sentir, pensar y crear. Y ahora viene este tercer círculo.
- Siento que realmente juegas un rol clave para que esto resulte.
- Como un multirol. Soy la gestora de la propuesta integral, desde curar los contenidos hasta el montaje de la sala, pasando por la difusión, diseño gráfico, audioteca, en fin, las hago todas. Esto es mi militancia. Acá me detengo, para señalar algo sutil, pero muy relevante a mi parecer respecto a lo que se entiende por el rol de gestión cultural y que va más allá de la mera administración de recursos. Para mí la gestión cultural es un proceso creativo. Tanto como lo es una obra visual, teatral, un libro (...) Es plantearse preguntas, redescubrirse y pensarse mucho, indagando en la realidad y reconociendo el afuera desde un enfoque muy personal que deviene en una propuesta concreta de activación social.