Los independientes que irrumpieron en estas elecciones
"Los independientes sorprendieron a todo el mundo, incluso a los mismos independientes", dice Jeanne Simon sobre los resultados que obtuvieron aquellos que no militan en partidos. La doctora en Ciencia Política agrega que "uno sabía que hay un rechazo generalizado -mostrado por las encuestas- hacia los partidos políticos, pero son ellos quienes tienen mayor territorialidad, especialmente dado que la cuarentena hizo mucho más difícil la movilidad por la Región".
En la Convención Constitucional se permitió, por única vez, que los independientes pudieran formar listas y así surgió en el distrito 20 Independientes por una Nueva Constitución, Asamblea Popular y la Lista del Pueblo; cada una logró un escaño, algo que no estaba dentro de las proyecciones, especialmente luego de que la derecha se unificara en una sola lista y se criticara que ellos no pudieran hacer lo mismo, favoreciendo a la dispersión de votos.
Otro caso que se destacó en apoyos fue Municipio Ciudadano, instancia que compitió el sillón alcaldicio de Concepción con Camilo Riffo, quien obtuvo 19.277 votos, traducidos en el 24.28% de los sufragios y quedándose en el segundo lugar. Esta iniciativa vecinal surgió el año pasado y para elegir el nombre a competir, realizado una primaria no legal y consiguieron imponerse a la candidata de Chile Vamos, Marlene Pérez.
El director ejecutivo de Observa Biobío, Lucas Serrano, cree que el escenario ocurrió porque el votante priorizó otros proyectos, por sobre los tradicionales. "Si uno ve el distrito 20, los partidos tradicionales ven mermada su presencia, porque los votos se fueron a otros proyectos. Pero los votos no fueron en masa a uno solo, no fue un voto estratégico. Pero sí permitió que los independientes tuvieran representación".
El analista cree que el votante cambió su pensamiento de preferir candidatos que son más competitivos o que según las encuestas son los que disputan el cargo, que es el clásico voto por centroderecha o ex Concertación. "Las iniciativas independientes siempre han existido, no estaban fuera del mapa, pero la ciudadanía solía votar por el caballito ganador", asevera.
Riquelme cree que se ha generado una mayor confianza en este tipo de agrupaciones, fuera de los partidos tradicionales. "Ellos reflejan una forma distinta de hacer política y es la forma que tienen también los colectivos, con un trabajo mucho más horizontal. Por eso la gente los prefirió", dice.
Sobre el caso de Rodrigo Díaz, quien también es un independiente, pero exmilitante de un partido tradicional, la analista de datos UBB cree que "a él le favoreció su campaña de recolección de firmas, además de renunciar a un partido que está desprestigiado. Vio la oportunidad de sacar algo bueno de haber sido intendente, pero también tiene que aprender los errores porque su estancia en ese cargo tampoco fue perfecta".
Por eso recalcan los expertos que ser independiente no es sinónimo de "apolítico", sólo de no tener una militancia en un partido, pero sus ideas pueden estar marcadas, como es el caso de los representantes de las listas participantes en las convencionales.