"Hoy hay una buena evaluación mía en las encuestas, pero eso lo veremos en marzo o abril"
El ministro de Defensa arriba hoy al Biobío, donde encabezará una visita a la Base Naval y los Astilleros de Talcahuano. "Los nuevos proyectos seguro ayudarán a la economía regional", dijo.
Una visita a la Base Naval de Talcahuano y un posterior recorrido en los Astilleros de la Armada (Asmar) serán dos de los hitos que marcarán la visita del ministro de Defensa, Mario Desbordes, durante esta jornada. Esta es la primera visita al Biobío desde que asumió dicha cartera, recordó.
La autoridad recalcó que esta visita es estrictamente militar y con objetivos claros: evaluar el despliegue de las Fuerzas Armadas durante el combate del covid-19 y por otro lado revisar el estado de avance de la construcción del Buque Oceanográfico Antártico, uno de los más grandes de su tipo.
Previo a su visita, el expresidente de Renovación Nacional también analizó las opciones de la carrera presidencial, los desafíos del conglomerado y cómo su nombre se posiciona como una carta para las primarias de Chile Vamos.
-El presidente de su partido lo mencionó como la opción presidencial de esa fila. ¿Está disponible para asumir el desafío?
-En marzo tenemos que hacer ese análisis, ahora yo valoro lo que plantea el presidente del partido. Por ahora soy ministro del Estado y estoy dedicado a eso, pero también tengo claro que tenemos que hacer una primaria muy competitiva. Mi partido es el más grande de Chile y tiene todo el derecho a llevar candidato. Hoy hay una buena evaluación mía en las encuestas, pero eso lo veremos en marzo o abril, mientras tanto estoy dedicado a ser ministro.
-A propósito de las primarias. ¿Está abierto a competir con José Antonio Kast o Sebastián Sichel, cuyo nombre apareció este fin de semana?
-Entiendo que el señor Kast no pretende estar en una primaria de Chile Vamos, así es que no veo que pueda figurar en una primaria de nuestra coalición…
-Pero de darse una eventual alianza, podría ser una opción.
-La primaria presidencial debe ser en Chile Vamos, entre los partidos que la integran, como la UDI, que tiene dos tremendas cartas. Sebastián Sichel también ha sido mencionado y que tiene todo los méritos del mundo. Si queremos un nuevo Gobierno de la coalición debemos tener una primaria unitaria, respetuosa, donde haya una competencia leal que termine con un sólo nombre que nos represente a todos.
-¿Con ello descarta la inclusión del Partido Republicano?
-Ellos han dicho que no van a participar de la coalición, así que es una decisión que ni siquiera se puede plantear en términos hipotéticos. Ojalá Chile Vamos crezca hacia el centro, a movimientos que ha liderado Mariana Aylwin u otras personalidades del centro. Por ahora lo único claro es que Chile Vamos está integrado por la UDI, RN, el PRI y Evópoli.
-¿Cuál es su postura frente a la propuesta de la UDI de estar abiertos a un pacto?
-Eso lo tienen que resolver en un consejo general, son las bases nuestras que tendrán que resolverlo. Si entra una persona y se van uno o dos por la otra será una cuestión que tendremos que analizar. Desde Evópoli han dicho que no están dispuestos al ingreso.
-Por otro lado, ¿qué le pareció llegada de Rodrigo Delgado a la cartera de Interior?
-Me parece lamentable, en primer lugar, la salida de Víctor Pérez de la manera en que sucedió. El exministro hizo un buen trabajo y no merecía esta acusación constitucional. Luego de eso, creo que el Presidente ha designado a una gran persona en el Ministerio del Interior, alguien a quien conozco, que ha sido un gran alcalde, que tiene todos los méritos y todas las capacidades. Por ello estoy seguro que será un gran ministro.
PROYECCIÓN EN ASMAR
-¿Cuál es la proyección de trabajo para los astilleros considerando la evolución de la pandemia?
-Junto con las mantenciones, modernizaciones y reparaciones de buques que está haciendo de forma permanente Asmar, la construcción de buques es la tarea más compleja. El busque Antártico va estar listo entre finales de 2022 e inicios de 2023. De inmediato esperamos iniciar el proyecto que se denomina Escotillón, que consiste en la construcción de los buques que van a reemplazar las barcazas que tiene la Armada y también para reemplazar al buque Sargento Aldea. Esta es una decisión que tenemos que tomar este y próximo Gobierno. Se van a construir tres transbordadores grandes, que también es un proyecto extraordinariamente complejo, que va requerir de toda la capacidad de nuestros astilleros y maestranzas en Talcahuano, que estoy seguro que la tienen. Asmar ha sido capaz de construir buques de gran tamaño, de mayor tecnología y eso nos permite situarlo en uno de los más importantes del hemisferio sur.
-Desafíos tecnológicos que incluso han puesto a Asmar al servicio de la pandemia, a través del desarrollo de un ventilador mecánico. ¿Cuál es la evaluación de este desarrollo al interior de los astilleros?
-Se ha podido demostrar que cuando las instituciones van incorporando esta tecnología no están pensando sólo en la guerra, cuando se construye un transbordador o el buque Antártico se hace para el uso científico, para el salvataje. El caso de los ventiladores va demostrando que Chile entero está dando pasos adelante en materia científica y tecnológica.
-¿De qué manera Asmar podría contribuir a la reactivación económica del Biobío?
-Sin duda lo está haciendo, porque ninguno de sus proyectos se ha detenido. Asmar hoy no sólo es construcción de buques, también tiene un trabajo grandote en obras denominadas carenados, que son la limpieza, la pintura, la reparación de cascos de embarcaciones grandes, que son muy requeridas por busques civiles y militares. Estos trabajos han permitido mantener funcionando esta empresa aún en el momento más duro del covid. Los nuevos proyectos van agregar el requerimiento de inversión, personal y eso seguramente ayudará a la economía regional.
-¿Cuál es la inversión de recursos que se proyecta para Asmar?
-Eso recién se está discutiendo en el Congreso, por lo que no podemos anticipar cifras. Sin embargo, estamos hablando de cientos de millones de dólares que se van a destinar a los proyectos más inmediatos.