La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado hace unos días que la complacencia es la mayor amenaza para los países que están superando la pandemia y advirtió del riesgo de nuevas oleadas del covid-19 en lugares donde se producen concentraciones de personas, en particular durante jornadas de protestas.

El director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha señalado que en esos encuentros masivos el riesgo está en la cercanía con personas con síntomas, por lo que se ha llamado a la población mundial a respetar las medidas preventivas que han dispuesto las autoridades en cada nación. El mundo lleva meses inmerso en la pandemia y no es el momento de quitar el pie del acelerador, han expresado representantes de la OMS, junto con reiterar que ven con preocupación lo que ocurre en Latinoamérica, donde hay más de un millón de casos confirmados. Para ese organismo, en América del Sur está la situación más compleja a nivel mundial, aunque esperan que los países salgan adelante, por su larga experiencia en la lucha contra otras enfermedades infecciosas.

Ya el pasado mes la Organización Panamericana de la Salud (OPS) había indicado que América del Sur se estaba convirtiendo en el nuevo epicentro de la pandemia, al ver con preocupación el notable incremento de casos en Brasil, Chile y Perú, anticipando que el coronavirus traería "semanas muy duras" al continente, por lo que no era el momento de relajar las restricciones impuestas para su control. Mientras en algunos países de Europa los contagios comienzan a descender y se inicia una flexibilización de las medidas de protección, como es el caso de España, Latinoamérica supera a Europa y Estados Unidos en la cantidad de casos de personas infectadas diariamente. La OPS está especialmente preocupada por la situación en Brasil, que junto a EE.UU. y Rusia se encuentran entre los que presentan más casos de contagios. Por ello, sugiere no relajar los controles sino que mantenerse fuerte, vigilante, con medidas de salud pública que han sido probadas en otras naciones.

Al parecer, la relajación de las acciones preventivas en todo el mundo, podría explicar el rebrote de la enfermedad. En los últimos días los dos aeropuertos de Pekín cancelaron miles de vuelos, tras conocerse de nuevos focos de covid-19 en la capital china, y las autoridades instaron a los ciudadanos a evitar los viajes no esenciales fuera de la ciudad y ordenaron que se vuelvan a cerrar las escuelas y centros de educación secundaria.

Hace unos días, el ministro de Salud, Enrique Paris, dio a conocer que existe la posibilidad de que en Chile también se registre una nueva ola de contagio de coronavirus, como se ha visto en otros países. Ha señalado que también "la segunda ola tiene mucho que ver con la cantidad de pacientes que quedan sin anticuerpos, por lo que si nos quedamos con pocos pacientes recuperados, vamos a tener una segunda ola". Asimismo, preocupa especialmente la cantidad de contagios que ocurren en la Región Metropolitana, que acapara el 80% de los casos del país y tiene entre el 90 y 97% de ocupación de las camas de cuidados intensivos. Según las autoridades, si bien la RM no está colapsada, sí se encuentra al límite de la capacidad hospitalaria para hacer frente a la enfermedad.

Luego de más de tres meses desde que llegó el coronavirus a Chile, es evidente que en las últimas semanas muchas personas han hecho caso omiso a los llamados de las autoridades para protegerse, quedarse en casa y evitar salir, para no contagiar ni contagiarse. Se ha informado de infectados que teniendo diagnóstico positivo de covid-19, de todas maneras salen y son sorprendidos en los controles sanitarios en las calles, transmitiendo el virus a otras personas. Otros han infringido las cuarentenas, las barreras sanitarias, toque de queda, las recomendaciones de distancia social o del uso de mascarilla. Con esos comportamientos, las posibilidades de volver a una relativa normalidad se alejan cada vez más.

Hace unos días, el ministro de Salud, Enrique Paris, dio a conocer que existe la posibilidad de que en Chile también se registre una nueva ola de contagio de coronavirus, como se ha visto en otros países. Preocupa la falta de prevención de los habitantes de la RM, donde está el 80% de los casos del país.

Seguramente cansado de las consultas y presiones varias, el alcalde de Talcahuano, Henry Campos, salió a responder en su cuenta de Twitter que no tenía las facultades municipales ni para abrir o cerrar malls, tampoco para declarar cuarentenas, ni menos para hacer dejar de llover, esto último simplemente como un recurso edulcorante para matizar su categórico y claro mensaje.

La desafección y desconfianza ciudadana hacia la clase política radica en gran parte en que las expectativas que se han construido alrededor de ella suelen -por lo general- no ser satisfechas. Esto, primero genera frustración y luego rabia en la gente, lo que se traduce en una escasa valoración que se tiene del trabajo que desempeñan los políticos. A la larga, todo esto termina afectando la democracia.

Como en el caso del jefe comunal de Talcahuano, muchos pensarán que depende de él adoptar las medidas arriba descritas, pero al no concretarse -ya que la atribución está radicada en otra repartición- la "cuenta" la termina pagando el alcalde.

¿Injusto? Claro que sí.

Por un lado, hay en esto una responsabilidad de la ciudadanía, que debiera conocer con mayor detalle y profundidad cuáles son las funciones de sus representantes, qué atribuciones y limitaciones tienen, y qué exigencias se les debe hacer. En síntesis, contar con una mayor y mejor educación cívica. La realidad, sin embargo, indica que existe un alto nivel de desconocimiento de las autoridades, y sobre todo de las funciones que desempeñan, lo cual es aprovechado por políticos para incursionar en otros ámbitos de mayor exposición pública que les terminan reportando mejores dividendos electorales.

Así, vemos de manera frecuente cómo las autoridades se entrometen en las funciones de unas y otras; diputados que se creen alcaldes, alcaldes que actúan como ministros, ministros con perfil de alcaldes; todos convertidos en expertos en todo y de todo, paseándose por matinales de televisión e informativos radiales para alcanzar esa figuración y exposición mediática lo suficientemente importante que les permitan pavimentar sus aspiraciones futuras.

La confusión en la ciudadanía, por lo tanto, es evidente, y no es extraño ni menos condenable, que al no encontrar respuesta ni solución a sus demandas o exigencias, las emprendan contra aquellos que precisamente les hicieron creer -voluntaria o involuntariamente- que podían darle solución, sin tener las facultades ni atribuciones para hacerlo.

Esa expectativa no cumplida se va transformando en desconfianza, la que hoy tiene al mundo político -y a otros tantos más- sumidos en los más bajos niveles de aceptación pública.

Urge entonces un mayor conocimiento ciudadano de las tareas reales y concretas que desempeñan nuestros representantes. Y si esto fuera así, habría un control más potente de la labor que ejercen, y los obligaría a centrarse realmente en sus tareas y no en otras en las que muchas veces parecen estar más interesados por los dividendos políticos que les reportan.

La responsabilidad es mutua, tanto de los ciudadanos, en su deber de informarse, y de la autoridad, en ajustarse a sus ámbitos de acción y a no crear falsas expectativas que terminen confundiendo a la gente.

Vemos cómo autoridades se entrometen en las funciones de otras; diputados que se creen alcaldes, alcaldes que actúan como ministros, y éstos como alcaldes.

Ministros

¿Jaime Mañalich se encontraba agotado como ministro de Salud? Sin duda. ¿Enrique Paris es un reemplazo idóneo? ¡Qué duda cabe! Entonces, ¿Por qué tanta consternación en un sector de los partidarios del Gobierno? En esta paradoja está uno de los principales desafíos de La Moneda: entregar un relato que le permita a los chilenos militancia y coherencia al mismo tiempo. De lo contrario, es natural y obvio que las personas terminen por elegir lo segundo.

Juan L. Lagos

Desigualdad

En el programa de televisión, "Race Matters. America in Crisis", en PBSNewsHour, emitido en YouTube, el presidente de la Fundación Ford, Darren Walker, afirmó, "La desigualdad asfixia la esperanza y la esperanza es el oxígeno de la democracia". Me parece una reflexión acertada. Cuánta falta hace que el gobierno y los diferentes referentes políticos se tomen en serio la necesidad de avocarse a combatir la escandalosa desigualdad que nos caracteriza como sociedad y que se funda en un modelo impuesto por un régimen de facto y jamás ratificado por la soberanía popular. Ésta, finalmente, podrá manifestarse en el proceso constituyente en curso.

Rafael Cárdenas

Corte de pelo

Una de las tantas consecuencias del covid-19 es la imposibilidad de ir a cortarnos el pelo como lo hacíamos regularmente. Robinson Crusoe, Albert Einstein y nuestro compatriota Fernando Villegas, mirarían con envidia algunas de las "pelucas" que exhibimos al estar condicionadas las salidas de nuestros hogares. Pero como siempre hay alternativas, en este caso serían tres: que nuestras esposas nos tijeretearan, lo que sería tan peligroso como el propio virus; solicitar un peluquero a domicilio, con el problema de la distancia entre usuario y peluquero, y el " machetazo" por la visita. La tercera y mejor solución es raparse al cero y comprarse un buen gorro de lana.

Jorge Valenzuela Araya

Mundo al revés

Vivimos en un mundo al revés. Un Chile que urge de unidad y de vigor republicano, hoy presencia cómo algunos intentan aprovecharse del pánico de una pandemia del coronavirus. Un ejemplo es el diputado Iván Flores, que busca censurar la mesa de la Cámara de Diputados.

Nicolás Martins

Empresas

En los últimos días hemos conocido el índice de creación de empresas de personas durante mayo, donde la región marca una sorprendente alza respecto al país. Por razones familiares, sé que una de las causas de esto se debe a la necesidad de formalización de actividades de pequeños empresarios que hasta ahora se mantenían en el ámbito artesanal. Esto, con el objetivo de postular a los créditos o fondos de ayuda estatales para poder mantener la actividad empresarial y los ingresos básicos para mantener a sus hogares. Es decir, es producto de una necesidad de urgencia ante la severa crisis económica que golpea a los distintos rubros de las pyme. Por ello, me llama la atención negativamente la interpretación de la autoridad económica de la región, que a modo de "arenga de camarín deportivo", lo explica por un supuesto "espíritu", ante lo que a todos luces es un espejismo de recuperación económica. Si bien es cierto ya la pyme local tiene convicción de la falta de competencias y el abandono por parte del sector de economía, fomento y turismo del gobierno regional; es válido ahora al menos exigirles un mínimo de prudencia y respeto a la hora de las declaraciones públicas. Ya es suficiente con los negativos efectos económicos reales del estallido social y la pandemia para que ahora, además, se tenga que soportar la falta de sensibilidad y realismo de la autoridad económica regional.

Luis Henríquez Logia

Credibilidad

Si fuera un grupo de médicos o de profesionales de la salud de la primera línea quienes dieran las directrices para que la gente asuma con disciplina las medidas requeridas, otro gallo cantaría. Entre otras razones, lo que urgentemente se requiere es que exista credibilidad en la ciudadanía y aplicación de normas y procedimiento con un mínimo de rigor, para que efectivamente logremos derrotar la pandemia o a lo menos bajar los costos en pérdidas de vidas humanas y deterioro social y económico. Ni al Gobierno ni a la clase política la gente le tiene confianza en sus decisiones. No le pueden creer a quienes han faltado a la verdad o han escondido la verdad total. No es posible que la gente le tenga confianza a las decisiones y acuerdos de los mismos a los que vienen rechazando hace ya mucho tiempo.

Juan L. Castillo Moraga

Atleta

Es lamentable el fallecimiento de Marlene Ahrens, pero es la ley de la vida. Vuela alto Marlene.

Manuel Lagos E.

Ollas comunes

En Santiago, la empresa Fanaloza, con más de 50 años de trayectoria, quebró el 14-12-1981 y, hasta marzo de 1982, los 600 trabajadores no recibían ingresos. Por tanto, las esposas de los obreros tomaron la decisión de mantener una olla común, a pesar de las dudas de la directiva sindical. Ellas, lograron revitalizar al hombre golpeado por la incertidumbre total, vencieron la tendencia de aislarse en sus hogares sin comida, algunas con varios hijos, recordando que la unidad es vital para la sobrevivencia. Grupos recolectaron víveres en Lo Valledor, Vega Central, feriantes, panaderías Selecta y San Camilo. La olla común se instaló frente a la industria paralizada, donde más de 400 personas compartieron a diario los alimentos. Los trabajadores esperaban, que las puertas de la fábrica se reabrieran, para con sus manos e inteligencia volver a crear bienes para el país. A marzo de 1982, en juzgados de Santiago, había 120 solicitudes de quiebras. En distintos períodos de la historia de Chile, a raíz de huelgas o crisis económicas, se realizaron las ollas comunes solidarias, con gran presencia femenina.

DERICO COFRÉ CATRIL

Misas

En estos días de pandemia, cobra singular importancia en nuestro país la frase atribuida a Enrique de Borbón, de que "París bien vale una(s) misa(s)", para lograr el propósito de alcanzar pronto la meseta.

Tomás Varela Hormazábal

La electrificación ferroviaria se acerca a Concepción. Cuadrillas de personal especializado iniciaron la remoción de las vías en el patio de la Estación Central penquista para nivelarlas y colocar el tendido definitivo del tramo electrificado, etapa que antecede a la colocación de postes y transformadores para hacer llegar la energía al sector.

La nivelación de las vías se realiza en el tramo Concepción- San Rosendo y cuando el sistema esté en funciones los trenes que hacen el recorrido entre Santiago y Concepción operarán con locomotoras eléctricas.

Un nuevo túnel de 230 metros bajo el cerro Chepe, doble vía hasta la estación Intermodal de Concepción del Biotrén y vías habilitadas para el transporte de carga y de pasajeros. Esas son las características principales del nuevo puente ferroviario que se construirá sobre el río Biobío y que la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) ingresó ayer al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).

Este paso es necesario para la construcción del nuevo viaducto, que se estima podría iniciarse durante el segundo semestre del próximo año 2020.

La estructura, de acuerdo con lo que reconocieron desde EFE y de Fesur, es clave para la conectividad del ferrocarril local, porque permitirá avanzar en otros proyectos, como la extensión del Biotrén a Lota y Penco, estudios que ya fueron comprometidos por la empresa.