Hasta $9 mil millones podría costar traslado de basura a otras comunas fuera del Biobío
El gobernador regional contó que solicitarán una reunión con la ministra del Interior, Carolina Tohá, para que la cartera, junto al Gore, asuman parte del costo que Lota y Florida ya tienen.
Entre $7 a $9 mil millones es el cálculo que el Gobierno Regional (GORE) estima que será es el financiamiento que se necesitará en 2023 para cubrir el sobrecosto que Lota y Florida realizan para destinar sus residuos domiciliarios en otras zonas y que próximamente también lo tendrán que desarrollar Talcahuano y Hualpén por la poca capacidad que tienen los rellenos sanitarios que están en la Provincia de Concepción.
El casi definitivo cierre que deberá realizar Hidronor en marzo del próximo año -la reclamación para ampliar temporalmente la planta fue rechazada y proyectan que la quinta etapa no será aprobada- y los dos años que le quedan de capacidad a Cemarc, tiene preocupadas a las autoridades de las comunas del Concepción Metropolitano por la crisis sanitaria que puede haber por el tema residuos domiciliarios.
Traslado de la basura
Ante este complejo escenario, que ya tiene a las comunas de Lota y Florida realizando un sobrepago por llevar sus residuos a otro lugar, y que en marzo lo harán Hualpén y Talcahuano, el gobernador del Biobío, Rodrigo Díaz, comentó que la alternativa que evalúan a corto plazo para evitar la crisis sanitaria en 2023 es tener una reunión con la ministra del Interior, Carolina Tohá, para que esta cartera asuma parte de este gasto en conjunto con el Gore.
"Lo que vamos a plantear a la ministra es que parte de ese sobrecosto, que no es responsabilidad de los municipios, sea compartido, una parte por el Ministerio del Interior a través de la Subdere y otra por el Gobierno Regional utilizando los fondos de emergencia que tenemos", expuso Díaz.
La autoridad regional añadió que el cálculo que realizan es que se necesitan en promedio más de $2 mil millones, por comuna. "Son entre $7 mil a $9 mil millones los que hay que buscar", sostuvo el gobernador del Biobío.
Sobre cómo será la proporción que podría aportar el Gore y la Subdere, Díaz expuso que es una materia que se debe conversar, pero que localmente pueden utilizar recursos de emergencias, que corresponde al 5% del presupuesto regional. "De ese porcentaje, el 2% es de libre designación de la Región. Obviamente tenemos que conversar con el Consejo Regional, pero lo que estoy hablando es de la voluntad política. Ahora cuánto es ese 2%, son aproximadamente $2 mil millones", contó la autoridad regional.
El alcalde de Hualpén, Miguel Rivera, agradeció el trabajo que se realiza, pero aseguró que por el momento son sólo anuncios y que por eso le dieron un plazo para tener respuestas concretas a este problema.
"Dimos un plazo prudente como municipios, porque se sumó el comuna de Florida, de Talcahuano, y espero que Lota también, para que empecemos hacer manifestaciones desde el 1 de diciembre si no tenemos respuestas concretas acerca de este tema, entendiendo que Lota y Florida está con su presupuesto subvencionando esto y Hualpén no le queda más de dos meses para poder empezar también con este mismo tema", declaró el jefe comunal, quien aseguró que en un año más otros municipios también tendrán el mismo problema.
Rivera recordó que actualmente pagan $2.600 millones por el retiro de residuos y que llevarlo a otro punto le incrementa los costos a $5 mil millones, lo que dejaría en una situación compleja las arcas municipales. Actualmente Cemarc ya les informó que no puede recibir sus residuos, por lo que le queda la opción de Los Ángeles y Chillán.
Plan estructural
Si bien por el momento las miradas están en la urgencia, el gobernador del Biobío expuso que también hay un trabajo a desarrollar en el largo plazo, es por eso que informó que habrá un plan para abordar el problema estructural de los residuos que considera la separación y clasificación de esto, apuntando a una economía circular.
"Ese plan no existe en la Región y hemos tomado el compromiso de transitar ese camino. No vivir solo de zafar de la emergencia, sino que gestionarla y comenzar a trabajar en una solución estructural que nos permita reducir los volúmenes de basura, clasificarla, destinarse a reciclaje aquello que se pueda, incluso pensar en transferencia a terceros o incineración para generación de energía", expuso Díaz.
En la misma línea, el seremi de Medio Ambiente, Óscar Reicher, contó que están esperando confirmaciones respecto a la viabilidad de las alternativas que han proyectado y así "avanzar en una solución de manera conjunta, que aborde la urgencia a corto plazo, pero sin perder de vista el enfoque de que hay que tener respecto del mediano y largo plazo, para lograr menores niveles de generación de residuos (…), y que los municipios aumenten sus niveles de reciclaje y compostaje".