La reapertura de fronteras entre Colombia y Venezuela y efecto en los migrantes
A las 10 de la mañana de este lunes se reabrirán los puentes internacionales Bolívar y Santander, en otro paso de ambos países para restablecer relaciones diplomáticas.
Redacción/Agencias
Luego de permanecer cerrada durante siete años, la frontera entre Colombia y Venezuela será reabierta mañana y los más expectantes son tal vez los miles de migrantes.
Debido a los roces políticos entre ambos gobiernos, en agosto de 2015 el principal cruce fronterizo fue clausurado por el presidente venezolano Nicolás Maduro con el argumento del combate al contrabando y a las bandas criminales colombianas. En esa ocasión se expulsó de la zona limítrofe a más de 20.000 colombianos.
Las relaciones diplomáticas entre los dos países se rompieron el 23 de febrero de 2019 en medio de un agravamiento de la crisis venezolana, cuando el líder opositor Juan Guaidó intentó ingresar desde Cúcuta con una caravana de ayuda.
La reciente llegada a la presidencia de Colombia de Gustavo Petro significó un cambio en la relación entre ambos países, con el objeto de reactivar su comercio bilateral frente a la crisis económica global. Es así que los acercamientos entre Petro y Maduro con miras al restablecimiento total de relaciones diplomáticas incluyó el nombramiento de embajadores en Bogotá y Caracas y, en cuatro días, la reapertura total de la frontera.
Los dos pasos que se abrirán mañana son el Francisco de Paula Santander, que une la ciudad colombiana de Cúcuta con el poblado venezolano de Ureña, y el puente Simón Bolívar (en la imagen principal, mientras era reparado para mañana), que comunica el área metropolitana de Cúcuta con San Antonio del Táchira en Venezuela. Se espera que ambos sean habilitados a las 10 de la mañana para el paso de vehículos por la frontera, según señaló el ministerio de Comercio, Industria y Turismo (Mincit) en un comunicado.
El anuncio fue hecho el pasado 9 de septiembre y en esa oportunidad el presidente colombiano explicó que "como primer paso, se reanudará la conexión aérea y el transporte de carga entre nuestros países", mientras que Nicolás Maduro agregó que el "intercambio y la cooperación entre nuestros pueblos se reinician con buen pie".
De ambos mandatarios, solo Gustavo Petro, confirmó su asistencia al acto de reapertura de la frontera y hasta el cierre de esta edición aún estaba pendiente la de su homólogo venezolano.
"Se tiene estimado el paso inicialmente de un número pequeño de vehículos, pero con esta apertura se espera un crecimiento importante", manifestó el director de Comercio Exterior del Mincit, Luis Fernando Fuentes, al concluir la inspección del lado colombiano.
Las operaciones aduaneras internacionales también estarán funcionando y 38 funcionarios atenderán en los pasos fronterizos el paso de carga entre las diez de la mañana y las seis de la tarde.
"El sistema informático aduanero ya tiene prevista toda la operación tanto de tránsito como de ingreso y salida de mercancías. Ya estamos preparados para la reapertura de la frontera", precisó la directora general de Aduanas, Ingrid Díaz.
Migración
En cuanto al corredor humanitario, el director de Comercio Exterior indicó que "se dispondrá de unas vallas preferenciales para el carril de los peatones".
La reapertura total de los 2.219 kilómetros de frontera representa un alivio para los cerca de 2,5 millones de venezolanos que huyeron a Colombia debido a la crisis económica y política, muchos de los cuales recibieron el Estatuto Temporal de Protección, y con la reapertura tendrán más facilidades para mantener los lazos con su país.
Sin embargo, las dinámicas migratorias ya no son las mismas de antes de la pandemia y la reapertura de los límites colombovenezolanos trae consigo nuevos retos.
El principal, sin duda, será garantizar la seguridad y los derechos humanos de los migrantes en una frontera con problemas de seguridad, así como articular acciones para enfrentar el desafío que representa el creciente paso de vene-zolanos por el inhóspito "Tapón del Darién", en la frontera colombopanameña, en su camino hacia EE.UU.
Por otro lado, los habitantes de la frontera sentirán el alivio, ya que son los que transitan entre ambos países y que desde el cierre de los pasos se vieron enfrentados a un problema al que tuvieron que adaptarse. "Esperamos que sea una realidad, hemos esperado tanto que ya esperaremos muy poco", dijo a Agencia Efe Eduardo Casanova, quien debe cruzar la frontera a pie, de Cúcuta a San Antonio del Táchira, y de ahí buscar un transporte que lo lleve a Rubio, a 30 kilómetros de la ciudad fronteriza.
Casanova no oculta su ilusión y vislumbra con optimismo las decisiones tomadas por Maduro y su homólogo colombiano, Gustavo Petro, de reabrir la frontera "para el bien de todos". "Nosotros vivimos en Cúcuta, pero vamos a Rubio constantemente y nos parecería muy bien el libre paso, sin obstáculo alguno, tranquilamente, con confianza, que sería lo mejor para todos", agregó.
No obstante, muchos se preguntan qué pasará con los migrantes venezolanos que ya se establecieron en Colombia.
Las cifras más recientes de Migración Colombia, con corte en junio pasado, señalan que en el país hay 2.477.588 venezolanos, de los cuales 333.806 están regularizados; 617.069, autorizados a permanecer; 1.231.675, en proceso de acogerse al Estatuto Temporal de Protección y 295.038 en estado irregular.
El Estatuto permite a los venezolanos que lo suscriben acceder a beneficios sociales del país vecino, entre ellos la vacunación contra el covid-19, sacar una licencia de conducir o mayor facilidad para obtener contratos laborales y servicios bancarios, entre otros.
Para Donna Cabrera, especialista en migración de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, Colombia cuenta "con cuerpo para que las personas que han accedido al Estatuto de Protección Temporal puedan desarrollar su proyecto de vida en el país superando las barreras que existen de acceso a servicios".
La experta recuerda que el presidente Petro dijo que va a mantener la política de integración migratoria y que su Gobierno flexibilizará algunos procesos, como la convalidación de títulos universitarios para facilitar su entrada al mercado laboral.
Del darién a norteamérica
Según la Defensoría del Pueblo colombiana, durante los primeros ocho meses del año, 102.067 personas atravesaron la Selva del Darién rumbo a Norteamérica, de las cuales 68.575, el 67%, fueron venezolanos.
La especialista en migración cree Colombia y Venezuela deben unirse para enfrentar este problema como un asunto regional, pues ahora "el flujo migratorio de venezolanos se redefine a partir de las condiciones sociales, económicas, políticas y de regularización migratoria en los países de la región".
"La normalización de las relaciones de Colombia y Venezuela puede tener un impacto en garantizar que quienes están aquí avancen en sus procesos de integración (...) pero la percepción que hay con el Gobierno de Joe Biden, con medidas más abiertas a la migración de Venezuela (...), ha incrementado su cruce por el Darién", explica Cabrera.
Asimismo, la experta considera que la normalización de relaciones "puede tener un impacto en el aumento de este tránsito", pero aclara que no es el único factor, ni el más determinante.
De esta forma, la reapertura total de la frontera y la eventual normalización del tránsito en los próximos meses facilitará la vida principalmente a los "migrantes pendulares", por ejemplo los que se trasladan diariamente por motivos de trabajo, educación o abastecimiento. Además pondrá a prueba la cooperación entre los dos países en materia de respeto de los derechos humanos de quienes crucen los pasos fronterizos y de aquellos que pasan por Colombia en su camino hacia Norteamérica.