De mascarillas a maceteros: a un año del proyecto penquista único en Chile
Con cerca de 13 toneladas de material reciclado, la iniciativa convirtió a Concepción en la primera ciudad del país en reciclar el principal desecho de la pandemia, las mascarillas.
Hace poco más de un año la Unidad de Desarrollo Tecnológico (UDT) de la Universidad de Concepción comenzó un modelo de economía circular, en el que se fabrican productos a partir de mascarillas recicladas, entregadas en distintos puntos de la comuna.
Comenzaron como una investigación impulsada por el Ministerio de Ciencia y Corfo, ya que, según indicó Alex Berg, director ejecutivo de la UDT, los cubrebocas faciales desechables están confeccionadas de un plástico llamado polipropileno, que es potencialmente reciclable. En mayo del año pasado comenzaron iniciaron su apertura a colaboraciones con empresas e instituciones, situación que los llevó a ser pioneros en el reciclaje de este elemento en nuestro país.
Hasta el momento ya se han utilizado cerca de 3,33 millones de mascarillas, un equivalente a 13.3 toneladas. Estas luego se transforman en macetas, basureros y bandejas, que posteriormente se ubican en espacios comunes dentro de los centros comerciales de Concepción, tales como patios de comida.
Transformación
El novedoso proceso en el que las mascarillas pasan a convertirse en producto comprende dos etapas: desinfección y valorización. En el primer paso se les aplica desinfectante y se introducen en una cámara de sanitización a una temperatura determinada, esto es indispensable para que no existan virus activos.
Posterior a esto, se extraen los cubrebocas secos y se procede a una molienda del material que permite retirar los elementos metálicos del clip nasal y crear una mezcla exhaustiva de los elásticos con el resto del producto, de aquí se obtiene un peletizado de la especie de algodón resultante de la molienda. Para finalizar, estos pellets se procesan mediante inyección, lo que finalmente resulta en maceteros, bandejas, basureros, u otros productos.
En julio se cumplió un año desde el inicio del proyecto. y la iniciativa ya lleva como adherentes 7 municipios, entre ellos, la Municipalidad de Concepción y de San Pedro de la Paz, además, han logrado convenios con 46 empresas, 18 establecimientos educacionales y 22 servicios públicos.
"Nuestro programa de reciclaje ha sido todo un éxito, ya que pudimos demostrar que la reutilización del material de las mascarillas es factible, tanto de un punto de vista técnico como económico. Hemos suscrito convenio de colaboración con más de 90 empresas y organizaciones, entre ellas, numerosos colegios y liceos, y varias municipalidades. Estas instituciones recolectan, nos las envían y nosotros las procesamos, para obtener productos de valor e interés comercial. Vale decir, reintegramos un material en una cadena de valor, bajo los preceptos de una economía circular", detalló Berg.
Actualmente, la UDT se encuentra trabajando en el desarrollo de soluciones tecnológicas de otros tipos de residuos, principalmente plásticos y papeles y cartones. "Por ejemplo, estamos evaluando qué hacer con cascos de seguridad, envases de Tetrapak, batas desechables, maxi sacos, guantes de caucho y látex, entre otros" mencionó el director ejecutivo de la institución.
En relación con sus proyecciones a largo plazo, Alex indicó que buscan establecer un precedente a nivel nacional e internacional, "nuestra meta es ser un centro de referencia en Chile y Latinoamérica con relación a la circularidad de recursos; esto incluye tecnologías de reciclaje, pero también el diseño eco amigable de productos, para disminuir al máximo la generación de residuos y minimizar la huella ambiental".
Para ser parte de este proyecto sólo debes dirigirte con tus cubrebocas desechables a alguno de los lugares que se mencionan en el sitio web oficial de la UDT. En el caso de Concepción, se encuentran en el Campus UdeC, Fundación Integra, Mall del Centro, Edificio de la Gobernación Regional y estaciones del Biotrén, entre otros.
También se establecieron nuevos puntos limpios de recolección de mascarillas en otras ciudades como Santiago, Viña del Mar y Curicó.