Gasto operacional: diputados desembolsan $165 millones en tres primeros meses de labor
Según datos públicos de la Cámara de Diputadas y Diputados, algunos parlamentarios de la zona mantienen diferencias de hasta el doble. Cristóbal Urruticoechea (REP) lidera el ránking con un desembolso de $14,8 millones. Al contrario, Félix González (PEV) suma $7,8 millones.
Naturalmente, la tarea legislativa está acompañada de gastos de diversa índole. Con el objeto de difundir su labor en los distritos, llegar hasta el Congreso Nacional o, simplemente, sustentar su trabajo, los legisladores se ven en la obligación de rendir dineros para pagar algunos servicios. Telefonía, traslado, arriendo de inmuebles, personal de apoyo, consumos básicos, correspondencia, mantención o materiales de oficina son solo algunos.
De acuerdo a datos obtenidos de la página web de la Cámara de Diputadas y Diputados, los 13 parlamentarios de la Región del Biobío gastaron un total de $165,2 millones para cubrir parte de estos ítems durante los tres primeros meses del actual ciclo legislativo, es decir, entre el 11 de marzo y el 31 de mayo. El promedio de gasto llega a los $12,7 millones.
La cifras expuestas por el portal de la Cámara Baja muestran disparidad en los montos totales. En algunos casos, incluso, hay diputados que mantienen una diferencia de hasta el doble con sus pares a lo largo del mismo período de análisis. Esto, por ejemplo, sucede en el caso de Cristóbal Urruticoechea (REP) y Félix González (PEV), ya que mientras el primero rindió $14,8 millones, el segundo anotó $7,8 millones (ver gráfico).
Tras Urruticoechea, la lista local es encabezado por Flor Weisse (UDI), Karen Medina (PDG), Eric Aedo (DC) y Marlene Pérez (IND-UDI), todos ellos con sumas que superan los $14 millones. Al contrario, y además de González, las cifras más bajas corresponden a Roberto Arroyo (PDG), Francesca Muñoz (RN) y Clara Sagardía (IND-CS).
Dentro de la norma
Los diputados locales plantean que respecto a este tema no hay mayores comentarios, ya que el gasto evidenciado corresponde al presupuesto que les es asignado para cancelar dichos servicios. Flor Weisse, por ejemplo, sostiene que en su caso todo está dentro de la normativa.
"Obviamente, todo esto (el dinero) se rinde y se revisa. Hay todo un sistema de personal que está acá en el Congreso para revisar y pasar todos los filtros correspondientes, de tal manera que cualquier cosa que no esté de acuerdo a la normativa y al sistema que está en el Congreso se pueda revisar y corregir", puntualiza.
Weisse advierte también que en lo particular debe trasladarse a través de un distrito extenso en kilómetros, como lo es el distrito 21, que abarca a las provincias de Arauco y Biobío, lo que abulta la suma general.
EL SUR contactó al diputado Urruticoechea -quien cuenta con el monto más alto en los tres primeros meses- para tener su análisis. Sin embargo, hasta la hora de cierre de esta edición no hubo respuesta.
Uso racional
Desde la otra vereda, el diputado Félix González recuerda que en el período parlamentario anterior su equipo mantuvo un gasto inferior al promedio del resto de los legisladores de la Región.
"Si bien hay un monto asignado, nosotros asumimos que no es obligación gastarlo todo y que hay que hacer un uso racional de los recursos", asegura, aunque reconoce que hay gastos que, evidentemente, son necesarios. La telefonía, el uso de las sedes o el desplazamiento son algunos de los puntos que más relevancia tienen en su trabajo.
"Ese gasto se tiene que hacer considerando que son recursos de todas las chilenas y los chilenos", subraya González.
12,7 millones de pesos es el promedio de gasto alcanzado por los 13 diputados de la Región del Biobío.