Luis Barceló Amado
Colectivo Apruebo Distrito 21 Comisiones: -Derechos fundamentales subcomisión N°4 -Derechos fundamentales subcomisión N°2 -Derechos fundamentales -Preámbulo
Autoevaluarse siempre es muy difícil, porque requiere una cuota de narcisismo bastante importante que yo, en general, no la tengo. Teniendo presente que formo parte de un grupo que, por así decirlo, era el jamón del sándwich, porque estábamos en el centro, un poquito cargado más hacia la izquierda, éramos la bisagra de la Convención, aunque no siempre tuvimos oportunidad de que eso fuese efectivo, pero en teoría, al menos, lo era. Fue una situación difícil porque, en general, entrábamos en conflicto hacia la derecha y hacia la izquierda, por lo que no fue fácil. En lo personal, hice todo lo que pude por tratar de conciliar intereses, siempre avanzando y progresista, pero tratando de conciliar y entendiendo que aquí hay un 80% de gente que votó por cambiar la Constitución, y que a medida que el proceso fue avanzando vimos en las encuestas cómo ese porcentaje iba cambiando sensiblemente hacia abajo. Hoy estamos en una situación compleja porque la mayoría de la gente está con el Rechazo, lo que yo no crítico de ninguna manera, pues puedo tener mi posición favorable al Apruebo, pero entendiendo que habrá que instalar y luego corregir. Así que respecto a mi participación puedo decir que hice todo lo que pude y en el grupo en que estábamos sucedió lo mismo, con la limitación de ser un grupo muy pequeño de siete personas y con algunas diferencias entre nosotros.
Depende de lo que suceda. Eso pasa por la aprobación o rechazo en el plebiscito. Ese es un elemento que hay que tener en consideración, porque falta el epílogo del libro donde vamos a saber cuál fue el resultado de la Convención. Si se da un Apruebo por una cantidad significativa, más allá de un 57%, por ejemplo, evidentemente la mirada será positiva, que se hicieron todos los esfuerzos y cuadró con los intereses de la ciudadanía, lo que sería un gran paso hacia la democratización del país. Si esto es rechazado, sin duda alguna será una experiencia fracasada, como las tentativas de constituciones que tuvimos en los períodos de ensayos constitucionales, como se denominan entre 1818 y 1833.