El 80% de la superficie autorizada para construcción en la Región es para viviendas
Si bien se ve una marcada volatilidad en el último año, expertos creen que esta superficie debería ir en aumento a raíz de proyectos inmobiliarios en comunas como Hualpén o Coronel.
Un total de 61.558 metros cuadrados (m2) abarca la superficie regional autorizada para edificar, según el último reporte sobre permisos de edificación entregado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Los datos correspondientes a enero de 2022 muestran que el 80% del espacio total está dirigido a viviendas, es decir, 48.977 metros cuadrados. El resto corresponde a industria, comercio y establecimientos financieros, y servicios, sectores que comprenden los 9.486 m2 y 3.095 m2, respectivamente.
Durante el primer mes del año el país contabilizó una superficie de 752.258 m2. De ella, el 8,2% equivale a la participación del Biobío. En doce meses, además, la Región registró una merma de 46,6% en relación a la superficie visada para las construcciones.
Según expertos, los porcentajes obtenidos en 2021 y en años anteriores muestran un comportamiento volátil que se explica, fundamentalmente, por la cantidad de autorizaciones que los municipios otorgan mes a mes y la envergadura de los proyectos. Así, si en un mes en específico se da luz verde a cierta iniciativa, es posible que al mes siguiente se acepten más o menos planes, y de distintas características, lo que hace que la superficie pueda subir o bajar de manera considerable entre un período y otro.
Por ejemplo, en enero de 2021 el área local llegó a los 115.376 m2, pero en febrero esta creció a 127.321 m2. Todo esto también incide en la participación regional (ver gráfico).
FACTORES ASOCIADOS E INTEGRACIÓN
Luis Salazar, académico de la Facultad de Arquitectura de la Universidad del Desarrollo, sede Concepción, comenta que los últimos números proporcionados por el INE exponen un bajo nivel, sobre todo si se compara con años anteriores, en donde la participación de la zona era mucho más alta.
"Si uno ve la estadística, desde 1992 en adelante hubo cifras de 17% o 18%. Creo que la contingencia sanitaria influyó en esto, lo mismo que la separación con la exProvincia de Ñuble, en 2018", sostiene el docente, quien recuerda, además, que en los meses más fuertes de pandemia las autoridades dejaron sin efecto los plazos legales de revisión y aprobación de permisos, "lo que dilató un poco las cosas y llevó, por ende, a generar menos permisos".
Pese a todo, Salazar cree que de aquí en adelante la cantidad de superficie debiese ir en aumento, especialmente a raíz de la oferta inmobiliaria que se percibe hoy en la zona -con mayor fuerza en comunas como Coronel o Hualpén- y por los esfuerzos de reactivación que se buscan coordinar para recuperar lo perdido.
El decano de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía de la Universidad de Concepción, Leonel Pérez, reconoce que los últimos datos son modestos, aunque aclara que pueden significar una etapa fecunda tras la emergencia sanitaria, en el sentido de que varias empresas ya dan continuidad a sus proyectos.
"Ojalá que todo esto no solo se ligue a la construcción de viviendas, sino que también a la construcción de más equipamiento para los barrios (…) La idea es tener ciudades más completas, amables y complejas con servicios, porque hoy la sociedad demanda mayor integridad, lo que pasa por sectores integrados que complementen. Con servicios nos referimos a escuelas, liceos, centros ambulatorios o entidades comerciales para la vecindad en núcleos específicos", puntualiza la autoridad académica.
MIRADA GREMIAL
Desde la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Concepción comentan que los permisos de edificación son una especie de termómetro de la actividad económica, productiva y de certezas en la trama mundial, nacional y local. "Por lo tanto, el que observemos bajas en sus registros obedece al actual ciclo económico, geopolítico e, incluso, sanitario. Esta contracción lamentablemente significa un menor desarrollo, menos construcción de viviendas, menos industrias y menores oportunidades de trabajo para los distintos sectores productivos", sostiene la presidenta local del gremio, Helen Martin.
En el caso de Concepción, la dirigente remarca que la caída del subsector vivienda es una respuesta a las restricciones del Plan Regulador Comunal, al alza del precio de los materiales de construcción y al incremento de las tasas de interés de los créditos hipotecarios.
"Preocupa la desindustrialización de la Región del Biobío, por ello creemos necesario volver a poner énfasis en potenciar la competitividad industrial, la cual genera valiosas externalidades que se traducen en mayor prosperidad económica para los habitantes de la zona y la consecuente reactivación del resto de las actividades como el comercio, la venta de viviendas y mucho más", subraya Martin.