Exportaciones de noviembre anotan fuerte alza y llaman a potenciar envíos de servicios
El aumento estuvo incidido, principalmente, por el sector industria. En total, la Región contabilizó US$ 520,8 millones.
Desde que llegó la pandemia, las economías del mundo comenzaron a sentir una grave afectación, escenario al que no estuvo ajena la Región del Biobío. Sin embargo, control progresivo de la emergencia en los meses venideros permitió que los índices retornaran a números azules, lo que se palpa hoy con claridad en la capacidad exportadora de la zona.
Según el último boletín del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), las exportaciones locales registraron en noviembre pasado US$ 520,8 millones, es decir, hubo un avance de 74,2% en relación al mismo período de 2020, momento en que la crisis se dejaba sentir con ímpetu en el territorio.
El desempeño estuvo incidido por el aumento en el sector industrial, que tuvo una variación positiva de 73,9% y que alcanzó los US$ 514,2 millones. En la misma línea, el área silvoagropecuaria anotó una subida de 135,4% al venderse productos por US$ 3,5 millones.
Las tres actividades que concentraron los montos más grandes, ordenadas de mayor a menor participación, fueron forestales, fabricación de celulosa, papel y cartón, y alimentos, las cuales provienen de la industria y representan el 80,7% del total regional.
MERCADOS
Los envíos realizados desde la Región del Biobío se efectuaron en mayor medida hacia mercados de América (55,8%). Le siguen Asia (39%) y Oceanía (2,7%). En cambio, los cinco principales países de destino fueron Estados Unidos, China, Perú, México y Corea del Sur, que acumularon retornos por US$ 331,9 millones, concentrando el 63,7%. Además, se observó que el monto de las exportaciones de este grupo de países experimentó un alza de 74,6%, en relación a igual mes de 2020.
En doce meses, se observó un avance en cuatro de los siete bloques de destino de los envíos regionales: APEC, NAFTA, Aladi y Comunidad Andina. Por su parte, Mercosur, Mercado Común Centroamericano y Unión Europea registraron una disminución en sus exportaciones, en la comparación anual.
FOCOS Y DESAFÍOS
Actores del medio local celebraron el progreso que la Región mostró en un año, porque, según dijeron, se trata de una señal contundente de recuperación económica. Eso, pese a que la tasa de comparación de 2020 fue baja.
Por lo mismo, plantearon que la idea es mantener o acrecentar este rendimiento, pero sin depender de forma exclusiva de lo que pueda hacer la industria, sino que también de los servicios y los productos con valor agregado, o los esfuerzos que las autoridades puedan gestionar para disminuir los impactos que ha generado la integración de algunas navieras.
"Sin descuidar al sector maderero y a la pesca y acuicultura, hay que apuntar a los servicios y los nuevos elementos que tienen espacio de crecimiento. Todo lo que tiene que ver con servicios con valor agrado intrínseco es muy importante para potenciar y diversificar (…) En Biobío hay un potencial incipiente en exportaciones, porque hay cerca de una veintena de empresas de este tipo, universidades y buenos profesionales. Esto no es algo que es inalcanzable", puntualizó el director regional de ProChile, Osvaldo Marinao.
El gerente general de Asexma Biobío y vicepresidente de la Mesa Comex, Alfredo Meneses, concordó con el planteamiento anterior, especialmente por el rol que cumple el trabajo mancomunado con las universidades a la hora de establecer tecnología e inteligencia. Eso sí, recalcó también que es necesario poner atención a la baja disponibilidad de contenedores y a la merma de recaladas que ha obligado la integración de las navieras.
"Se nos están yendo exportaciones a San Antonio, Valparaíso. Ese es un desafío grande que Biobío debe enfrentar, porque es una amenaza seria. Si queremos fortalecer eso hacia 2022, se requerirán decisiones relevantes que están en el ámbito político y de política internacional", sostuvo Meneses.