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Gloria Varela, actriz y directora de Extensión Artística y Cultural de la Ucsc

"Quiero estar libre, me he entregado y hoy deseo eso para mí"

A pocos días de dejar el cargo que ocupó por 20 años, la también profesora de Español y actriz repasó su trayectoria, sus años en el TUC y lo que viene ahora.
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Por Nicolás Martínez Ramírez

Si hay alguien que ha sido testigo privilegiada y protagonista de los últimos 60 años de la cultura penquista, es Gloria Varela (86).

Actriz, profesora de Español y directora de Extensión Artística y Cultural de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (Ucsc) por más de dos décadas, recuerda con detalles nombres, fechas y momentos que han marcado su vida artística y profesional.

Es por estos días que se encuentra realizando sus últimas labores al frente de la dirección que ha liderado desde mayo de 2001. Una donde ha puesto énfasis en la formación de audiencias y en el recibimiento de múltiples propuestas y disciplinas artísticas.

Integrante histórica del ya legendario Teatro de la Universidad de Concepción (TUC, entre 1963 y 1973), Varela también se ha destacado como docente en la Alianza Francesa y las universidades de Concepción y San Sebastián, instituciones que recuerda con cariño.

Es en 1997 cuando llega a la Ucsc como docente en la Facultad de Derecho, desde donde migró a Extensión en 2001.

Su carrera docente la inicia en 1970, cuando luego de estudiar teatro y de formar parte del elenco estable del TUC, ingresa a cursar Español. "Entré a estudiar para enfrentar la obra desde el punto de vista del autor y la literatura. En el fondo, lo que yo quería era estudiar psicología, para entrar al personaje, pero no existía la carrera en Concepción", dice.

"Decido Español no para ser 'la vieja de Castellano', pero sí podía hacer clases de teatro en los colegios: por eso estudié pedagogía y no licenciatura. Que la enseñanza fuera teatral desde la básica. Como irradiar esto en los chicos, algo que sigo pensando todavía".

Detrás del telón

Aún a través de una pantalla, ya que esta entrevista se realizó vía Zoom, la actriz conserva su amable semblante y gran aptitud para la conversación, transcurriendo de un hecho a otro sin olvidar nada. No pierde la capacidad de envolver al oyente en su relato.

Sin duda, su gran amor es el teatro, toda su carrera artística y docente ha girado en torno a él.

Integrante de grupo de la UdeC desde que terminó sus estudios teatrales en 1963, fue compañera de Delfina Guzmán, Yeya Mora, los hermanos Villagra y Brisolia Herrera, entre muchos otros.

"Me fue dado el camino para ir nutriéndome con lo que viene, pero -al mismo tiempo- dando para el otro lado. Mi maestro fue Nelson Villagra ("El Chacal de Nahueltoro"), mi profesor en 1960 y luego trabajé con él. Nos decía que el público es sagrado. Sin éste no existe la función teatral".

Esto, dice, fue lo mismo en la enseñanza. "El profesor es el actor y los estudiantes el público. Por lo tanto, yo tengo que respetarlo y lo que esté diciendo es sagrado. Con la verdad, por eso al actor se le pide la verdad escénica", agrega.

En la ucsc

Uno de los ejes más importante en sus 20 años al frente de la Dirección de Extensión Artística y Cultural de la Ucsc ha sido la formación de audiencias y su vinculación con la comunidad.

Al mismo tiempo, el teatro, la música, danza y la puesta a disposición de los espacios de la universidad al arte han sido clave.

Es en 1997 cuando llega a Extensión en Facultad de Derecho Ucsc, espacio donde ejerce como docente de la carrera y, también, se encarga de cultura.

Ya en 2000, divide su tiempo entre la docencia universitaria, además de talleres en diversos lugares. A esa fecha, hace ya casi cinco años que había dejado su querido Charles de Gaulle.

"A fines del 2000 me dicen que habrá una posibilidad allá y dije 'bueno, voy a postular'. No sé quiénes eran los candidatos, nunca me los dijeron. Quedo y ahí poco a poco empiezo a deshacerme de todo lo que tenía. Me concentro solo en esto: me podían dar las 10 de la noche, pero tenía que cumplir como fuera", recuerda.

En este tránsito de los escenarios a la docencia y su paso a Cultura Ucsc, clave fue el apoyo de su marido, el ingeniero Víctor García, fallecido en marzo de 2019.

Con García, la exintegrante del TUC tuvo a José Luis, quien falleció muy joven; Paulina, psicóloga, cineasta y exseremi de las Culturas; y Felipe, quien es comunicador audiovisual.

"Mi marido también era actor y un hombre de teatro. Le gustaba todo eso. Me motivaba y apoyaba. Yo no fallé nunca en ninguna actividad. Era mi vida entera ahí, he vivido siempre con y para el arte", enfatiza.

"Todo esto para mí era normal, natural y lo que corresponde hacer. Con esa entrega que hoy se ha perdido mucho. Viví esa escuela y ahora la recuerdo mucho", agrega.

Para Varela, clave en el retiro ha sido toda esta época de incertidumbre en torno a la pandemia y sus restricciones. Siendo años duros para la docente, con el fallecimiento de su compañero de vida por más de 50 años y la imposibilidad de retornar presencialmente al trabajo, la reflexión es una: "Debí haberme retirado antes".

- ¿Por qué?

- Cuando me dicen que no puedo ir más de forma presencial, me sentí pésimo. ¡Dios mío! He ido toda la vida, nunca me he enfermado ni he pedido permiso. Era un castigo. Ahora estoy en el otro extremo, no fui más.

Parte de su extenso legado, sin duda, es la formación de las bases de la propia Dirección, el importante traspaso de sus instalaciones desde un costado de la Catedral al Campus San Andrés y los miles de estudiantes, quienes siempre la recuerdan con cariño.

"Estoy contenta de haber realizado todo esto. Lo único que me habría gustado tener, así como yo fui producto de un teatro profesional, es un grupo estable acá. Eso habría sido un sueño", dice.

"Ahora me dedicaré a leer, releer, dormir y a la parte espiritual, no comprometerme con nada. Quiero estar libre, me he entregado y hoy deseo eso para mí. Tomar esa energía antes de irme. Así puedo encontrarle más sentido a lo que hacía creo yo", señala.

- ¿Cuál cree que es su legado?

- Creo que una disciplina y estar ahí. Una entrega plena. El respeto a la academia, no existe otra institución que nutra. Le di un gran valor a las universidades donde he estado. La laboriosidad, estudio, respeto, valores, generosidad y honestidad. El decir de frente las cosas.

- ¿Qué mensaje le dejaría a su sucesor en Extensión de la Ucsc?

- Decir que esto es una joya. Trabajar en este espacio es una maravilla, hay que cuidarla y pulirla. Siempre se puede mejorar. La búsqueda de público será como volver a empezar, tendrá que tener mucha paciencia y constancia.

Para la encargada cultural de la casa de estudios, clave en su retiro ha sido esta época de incertidumbres en torno a la pandemia y sus restricciones.