Evergrande, nuevo castillo de naipes
Roger Sepúlveda Carrasco, Rector Universidad Santo Tomás Región del Biobío,
Otra crisis global pareciera avizorarse en el horizonte de la economía mundial. Esto, luego de que se conociera la grave situación financiera que atraviesa el gigante inmobiliario chino Evergrande. En resumidas cuentas, la empresa no contaría con el flujo necesario de caja para mantener activas sus operaciones, lo que sumado a deudas millonarias y un "frenazo" del mercado inmobiliario interno del gigante asiático, la tendría en las cuerdas a punto de caer, de no mediar algún salvataje crediticio, ya sea estatal o privado.
Los títulos de Evergrande han caído cerca de 80% en el año y 40% en el mes, acumulando deudas oficialmente reconocidas por un valor de más de US$ 300 mil millones de dólares, lo que es comparable al 2% del PIB chino o el tamaño de toda la economía de Sudáfrica. Asimismo, esta semana no pagó la deuda de US$ 83,5 millones -sólo de intereses- que vencía el jueves y comienza la cuenta regresiva de 30 días para entrar oficialmente en default.
Chile no está ajeno a las consecuencias que esto pueda traer, pese a los 19.618 kilómetros que nos separan, la economía mundial globalizada además de los beneficios, nos expone también a sus riesgos. Durante esta semana ya se supo la caída en le precio del cobre, las otras materias primas seguirán ese mismo camino de no mediar un giro en el escenario, se apreció el dólar, además se podría temer un aumento del riesgo bancario que puede afectar la disponibilidad de créditos, entre otros.
Así es como nuevamente el mundo sería testigo de cómo un nuevo castillo de naipes se desploma generado por otra crisis inmobiliaria, esta vez China, se va cayendo y desmoronando carta por carta, sin que nadie aparentemente lo pueda sujetar. Ahora el gobierno del país con la segunda mayor economía mundial se enfrenta a una dura decisión, demasiado similar, diría yo (frente a las lecciones no aprendidas), a la que tuvo que adoptar el gobierno de Estados Unidos en 2008 cuando dejó caer al banco de inversiones Lehman Brothers en la poco feliz crisis subprime.
Esperemos que el efecto dominó pueda ser atenuado con medidas rápidas y de alto impacto para que esta situación afecte lo menos posible a los mercados internacionales y a Chile en particular. Al igual que la reciente Pandemia por covid-19, China nuevamente puede alcanzar un contagio global sin que exista una "vacuna" que logre frenar las negativas consecuencias que esta situación puede acarrear. Mientras tanto, para el mundo y sus economías tan globalizadas como interconectadas, el temor de ver caer otra vez un castillo de naipes está más vigente que nunca.