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Alexis Kalergis, director del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia, académico de la PUC:

"Mientras exista población sin vacunar, es mucho más probable que se generen nuevas variantes"

El investigador asegura que aún estamos frente a una alta circulación del virus. También llama a que los rezagados se vacunen para proteger a los menores de 12 años y dice que se están implementando ensayos para neutralizar a delta.
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Patricio Tapia

A la vez que ciertas mejoras en los números de contagios han permitido los cambios recién anunciados por el Ministerio de Salud en el "Plan paso a paso", también han aparecido nuevos motivos de preocupación, como la llegada al país de la variante delta del coronavirus, mucho más contagiosa.

¿Se pueden compatibilizar esas mayores libertades con esas amenazas?, ¿la campaña de vacunación ha permitido esa liberalización?, ¿servirán las vacunas existentes para las variantes?

Estas preguntas pueden ser respondidas por el doctor Alexis Kalergis, quien es profesor e investigador en la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Católica de Chile, director del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia y también miembro de la Academia Chilena de Ciencias. Su área de investigación se ha enfocado en la respuesta inmune contra agentes infecciosos y tumores. Kalergis es también quien ha estado a cargo del ensayo clínico de Sinovac en Chile.

-¿En qué situación estamos? Por una parte se dice que la velocidad de contagio ha disminuido a su nivel más bajo durante la pandemia; por la otra, se advierte del peligro de las nuevas cepas.

-Si bien nos encontramos en una situación gradualmente más favorable, con un gran porcentaje de la población objetivo vacunada, con mayor conocimiento sobre los tratamientos médicos contra la sintomatología del covid-19 y una mejor trazabilidad de casos nuevos, no es motivo aún para descuidarnos y exponernos al contagio. El virus ha mostrado una gran capacidad adaptativa, con nuevas variantes, y el llamado es a no relajar las medidas de autocuidado y continuar usando las mascarillas, un lavado recurrente de las manos y mantener distanciamiento físico. Por supuesto, es muy importante que las personas rezagadas puedan acceder a la vacunación a la brevedad posible, por su salud personal y para proteger a aquellas personas que no pueden vacunarse. Por ejemplo, nuestras y nuestros más pequeñas y pequeños, menores de 12 años, que no disponen aún de vacunas aprobadas a las que puedan acceder. El que las personas rezagadas se vacunen contribuye a proteger a la población pediátrica que no puede acceder a vacunas aún.

-Respecto de la disminución de velocidad de contagio. ¿Eso es efecto de la vacunación, de las cuarentenas o de ambas?

-Se podría deber a varios factores, por un lado a la alta cobertura en la vacunación contra SARS-CoV-2, la aplicación de cuarentena en los momentos de mayor número de casos nuevos circulantes y una ciudadanía que ha ido incorporando la importancia del uso de mascarillas, el lavado recurrente de manos y el distanciamiento físico. Es importante tener en consideración que el control de la pandemia requiere la suma de acciones, desde la vacunación hasta la prevención del contagio.

-Respecto de la aparición de variantes, ¿era eso esperable?

-La aparición de nuevas variantes ha sido algo muy sorprendente y relevante de la biología de este virus. Las variantes de este virus aparecen durante el proceso de reproducción de este microbio, por lo que en la medida que podamos disminuir la circulación y transmisión viral debería disminuir la aparición de variantes virales. Por el contrario, una alta tasa de contagio y transmisión viral es el escenario ideal para que el virus genere variantes, debido a la generación de nuevas partículas virales da espacio a cambios en su material genético, obteniendo en su gran mayoría variantes con poco impacto biológico, pero en el menor de los casos se vuelven variantes de interés o de preocupación. Las variantes del coronavirus pueden llegar a ser de alto impacto en salud pública en el caso de que la inmunidad que inducen las vacunas no sea capaz de neutralizarlas.

TERCERA DOSIS

Kalergis asegura que "mientras siga existiendo población no vacunada, es mucho más probable que se generen nuevas variantes. Hasta el día de hoy todas las vacunas que están aprobadas para su uso de emergencia están desarrolladas con el virus original. Debemos tener en cuenta que el virus ha ido mutando más rápido que la síntesis de nuevas formulaciones que consideren estas nuevas variantes. Por lo tanto, es esperable que los anticuerpos generados por todas las vacunas reconozcan mejor a la proteína S presente en la cepa original del virus y, de manera más débil, a la proteína S de las variantes".

Sobre el impacto de las variantes en los fármacos y antídotos, explica que, por ejemplo, "lo que ocurre con la vacuna de Sinovac es esperable y, al igual que en las otras vacunas, los anticuerpos generados reconocen específicamente regiones proteicas del virus, pero cuando ocurren mutaciones alguna de estas regiones proteicas, cambian y los anticuerpos ya no la reconocen con tanta facilidad, disminuyendo su detección. Sin embargo, existen otros elementos de la respuesta inmune, como los linfocitos T, que también contribuyen a la protección contra el virus y deben ser cuantificados".

-¿Cuán riesgosa es la variante delta que ha llegado al país?

-La evidencia científica disponible a la fecha sobre la variante delta indica que sería más contagiosa que el virus original, siendo esta característica la más riesgosa, ya que se ha expandido muy rápido por el mundo. Hasta el momento algunas de las vacunas aprobadas para su uso de emergencia han mostrado mantener cierto nivel de efectividad frente a esta variante y los anticuerpos que generan son capaces de reconocer al virus, aunque con menor afinidad. Las vacunas han mostrado cierto nivel de protección contra las variantes de preocupación, incluyendo la variante delta. Esto se ha observado en experiencias de Indonesia, China, Turquía, Filipinas e India. Los resultados preliminares de nuestros colaboradores en China indican que los anticuerpos pueden neutralizar esta variante, pero en menor medida. Nosotros, en la Universidad Católica, estamos implementando los ensayos para medir neutralización contra la variante delta y esperamos tener datos en las próximas semanas.

-¿Cómo altera esto el proceso de vacunación: será necesaria una tercera dosis? ¿Basta aplicar una dosis más para reforzar la inmunidad o hay que adecuar la vacuna a esas variantes?

-Hasta la fecha las vacunas aprobadas para su uso han mostrado una muy buena efectividad poblacional, reduciendo los casos de enfermedad. Estos estudios de efectividad poblacional sugerirían que la inmunidad inducida por la vacuna estaría teniendo un efecto protector contra las variantes que predominan, a pesar de la neutralización parcial reportada. Sin embargo, la natural disminución de los anticuerpos tras la vacunación, resalta la importancia de fortalecer la inmunidad con dosis de refuerzo para compensar y potenciar la neutralización del virus. Es muy probable que dosis adicionales de vacunas para reforzar la inmunidad sean necesarias para mantener altos los niveles de anticuerpos, dado que estamos en una situación de pandemia, con alta circulación viral y frecuente aparición de variantes del virus con mutaciones que pueden hacerlas más contagiosas y diferenciarlas de la cepa original. El contar con altos niveles de anticuerpos y linfocitos T contra el coronavirus tras la vacunación y dosis de refuerzo, aumenta la capacidad protectora de la inmunidad. Las variantes del virus podrían disminuir la efectividad de las vacunas, lo que podría ser contrarrestado con una vacunación de refuerzo.

-¿Todas las vacunas creadas para el virus original tienen menos efecto respecto de las variantes?

-Es esperable que la capacidad neutralizante de los anticuerpos inducidos por cualquier vacuna disminuyan frente a nuevas variantes, porque estos virus difieren en diferente medida del componente viral original incluido en la vacuna. Lo importante es que a pesar de que exista una disminución en la capacidad de neutralización de una variante, que la efectividad se mantenga alta. Frente a nuevas variantes se podría esperar que la efectividad de las vacunas aprobadas para uso de emergencia varíe, pero hasta el momento se han mantenido efectivas, aunque en menor nivel que el observado para la cepa original.

-¿De qué manera el trabajo previo en otras vacunas en Chile facilitó el contacto con las instituciones que desarrollarían vacunas contra el coronavirus?

-El rol de la ciencia chilena en este proceso ha sido clave, por medio del trabajo local de vacunas, así como a través de la ejecución de estudios científico-clínicos con colaboradores en otros países. Gracias a esta diplomacia científica, la cual cruza fronteras, tiende puentes y derriba barreras, hemos logrado establecer convenios de suministro temprano de dosis de vacunas que han demostrado calidad, seguridad, inmunogenicidad, eficacia y efectividad.

-¿Esta "diplomacia de la ciencia" entonces facilitó el acceso chileno temprano a ellas? ¿Fue el caso de la vacuna Sinovac, cuyos estudios usted dirige en Chile?

-Es importante destacar que la investigación científica que hemos hecho en nuestro país nos valida frente a nuestras contrapartes internacionales, lo que releva la importancia de hacer ciencia en Chile. Un equipo en la Universidad Católica ya desde antes de la pandemia estábamos

"Las variantes de este virus aparecen durante el proceso de reproducción de este microbio (...) En la medida que podamos disminuir la circulación y transmisión viral, debería disminuir la aparición de variantes virales".