Aumento de los casos de abuso sexual
En los últimos años se ha podido apreciar un aumento de las noticias referidas a la pedofilia, la pornografía infantil y el grooming (acoso sexual a menores vía Internet). Lamentablemente, los ataques a menores parecieran ser prácticas mucho más extendidas de lo que se cree. Ello explica que de forma permanente se desmantelen redes de pedofilia o de pornografía infantil. Significa que algo anda mal en nuestra sociedad.
Los abusos sexuales han tenido un fuerte incremento y así lo avalan las cifras. De acuerdo a estadísticas de la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI de Concepción, las denuncias por abuso sexual a mayores de 14 años se han incrementado 163% en los últimos tres años. Y las denuncias por abusos a menores han tenido un aumento de 143% en igual período. En general, la policía registra el crecimiento de los delitos de mayor connotación, pero no se puede desconocer que aún existe una "cifra negra" por los casos que no se denuncian, por vergüenza o por el temor de las víctimas a sufrir represalias.
Si bien todos estos casos son condenables, es especialmente preocupante cuando afectan a niños y niñas. Asimismo, se han conocido situaciones en que las víctimas, ya en edad adulta, dan a conocer el drama que vivieron en su niñez o adolescencia. ¿Por qué estos casos se conocen tantos años después? Es explicable. Las menores muchas veces están solas frente al problema, con una madre que niega o relativiza el abuso, y el autor amenaza con matarlas si no guardan el secreto. Chile ocupa los primeros lugares en América Latina en denuncias por abuso sexual infantil, siendo ésta la segunda causa de ingreso al Sename. No obstante, hay una cifra oculta por casos no denunciados.
Por eso, ha sido necesario ir adecuando las leyes a las nuevas exigencias, pero a la vez es necesario prevenir estas situaciones, lo que obliga a replantearnos qué actitud debemos tener e inculcar respecto de la sexualidad. A mediados de 2019, se aprobó una indicación presentada por el Gobierno a un proyecto de ley para que los delitos sexuales contra menores no prescriban. Con la legislación anterior, había un plazo de cinco años para investigar estos delitos y diez años cuando se trataba de crímenes. Hay que considerar que cuando las víctimas son niños, sienten un comprensible temor de denunciar y en muchas ocasiones sólo se atreven a hacerlo cuando han pasado años y el delito ha prescrito. Ese cambio en la legislación se produjo en momentos en que el país estaba entonces conmocionado por el caso de la menor Ámbar Lezcano, de un año y medio, quien murió al ser abusada.
Los medios de comunicación dan a conocer con regularidad la detención de personas acusadas de abusar sexualmente de niños, ya sea en el hogar o en alguna institución. En 2012 se puso en marcha un paquete de medidas para combatir los abusos, por lo que se puede solicitar información acerca de personas que hayan estado involucradas en estos delitos, a través de la página web del Registro Civil. La legislación inhabilita de por vida a los condenados a ejercer cualquier empleo relacionado con niños. La experiencia muestra que éstos son delitos que tienen una alta tasa de reincidencia, de manera que la sociedad no puede permanecer indiferente. La situación es más compleja cuando los atacantes son conocidos de la víctima; habitualmente conviven con ellos y tienen relaciones de preponderancia y de confianza.
El abuso es una forma de maltrato que incluye un amplio espectro de acciones entre un niño y un adulto. Es un delito deleznable y en aumento, si se considera que se roba la inocencia y se marca la vida de un menor, cortando su línea de desarrollo sicológico, daño que se observa en su etapa adulta. La legislación tiene como objetivo resguardar a los niños, contribuir a su seguridad, integridad física y psicológica, y dar algo más de tranquilidad a los padres, pero son éstos quienes deben redoblar sus esfuerzos por protegerlos y disminuir al mínimo la oportunidad de verlos expuestos a estos ataques.
De acuerdo a estadísticas de la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI de Concepción, las denuncias por abuso sexual a mayores de 14 años se han incrementado 163% en los últimos tres años. Y las denuncias por abusos a menores de esa edad han tenido un aumento de 143% en igual período.