Por Nicolás Álvarez Arrau
Un preocupante y crítico panorama experimentan actualmente las pequeñas y medianas empresas exportadoras de la Región del Biobío. Sumado a los conocidos efectos económicos de la emergencia sanitaria, estas firmas han tenido que lidiar además con una escasez de contenedores, escenario que desde algunos meses ralentiza el comercio exterior de la zona.
Según cifras entregadas por el vicepresidente de la Mesa Comex Biobío y gerente general de Asexma Biobío, Alfredo Meneses, en comparación a un año normal son más de 4 mil los depósitos faltantes. Esta merma, afirma, impacta muy directamente al área maderera y al resto de rubros del territorio que tienen actividades internacionales.
"Aquí las primeras dañadas son, sin lugar a dudas, las pymes exportadoras. Un segundo impacto tiene que ver con la incertidumbre que genera todo esto, dado que los envíos son programados y hay que cumplir con los compromisos (…) La disminución se ve agravada porque aún no se sabe cuándo se va a normalizar y, de seguir, podría desembocar en pérdida de empleos", relata Meneses.
Los motivos que están detrás de este problema dicen relación con dos hitos: el cierre de los puertos de China por la pandemia y la posterior reactivación del país oriental, evento que llevó a capturar en cierta medida la gran cantidad de contenedores que circulan a nivel mundial.
"Los contenedores que están hoy disponibles están a muy alto precio y solo pueden ser pagados por las grandes compañías. Las pymes están imposibilitadas por un tema de costo", remata Meneses.
ACCIONES
En línea con este planteamiento gremial, desde ProChile Biobío advierten que este es un asunto global que hoy concilia una preocupación relevante del organismo, pues conlleva un inconveniente "que se ha agudizado y se ha vuelto una cuestión mucho más grave" con el tiempo.
"Nosotros levantamos el tema en la Región y preguntamos a nuestros clientes cuál es su situación. En base a eso, nos percatamos que es el sector forestal el área que presenta mayores complejidades en Biobío", puntualiza el director regional de la entidad, Osvaldo Marinao.
A diferencia de la información entregada por la Mesa Comex, en ProChile calculan una necesidad de al menos 700 contenedores en la Región. Eso sí, enfatizan que este número absorbe en casi su totalidad la opinión de las pymes forestales, por lo que es posible que falte agregar a otros sectores del comercio exterior local.
A fin de evitar un escenario peor, Osvaldo Marinao comenta que ya se encuentran en conversaciones con un operador logístico, quien en primera instancia habría acogido la inquietud. "Nos estamos poniendo en contacto con aquellas instituciones que tienen problemas de disponibilidad y estamos solucionando por esa vía, porque hay que tener plena conciencia de que una compañía que quiebra significa trabajadores que se quedan sin su fuente laboral", sostiene.
MAYOR SOLIDARIDAD
Uno de los grupos que más ha sufrido con este déficit es Pymemad, agrupación que a nivel regional reúne a unas 30 pequeñas y medianas empresas ligadas al ámbito forestal. Para su presidente nacional, Michel Esquerré, el desbalance global que se vive en estos momentos producto de la emergencia sanitaria originó también una situación dispar entre las grandes y pequeñas compañías que se reflejaría en una desigualdad del sistema naviero.
"Si va a haber una crisis, hay que distribuir la pobreza entre todos para que haya distribución homogénea de esta falta de contenedores (...) Las grandes deben hablar con las navieras para que se mantengan vivas las pymes. Apelamos a la justicia, porque no puede ser que en la relación que hay entre ambas estemos solo en las buenas y no en las malas", cuestiona Esquerré.
Según el representante gremial, y en consonancia con lo expuesto anteriormente, de profundizarse este obstáculo se trancarán las exportaciones y los flujos, lo que posteriormente generará mermas en los dineros destinados a los transportistas y empleados de las pymes. Y eso, agregó, "ya no se puede permitir".
Los exportadores también esperan un acercamiento del Ministerio de Economía pare que el Ejecutivo se pronuncie y elabore un plan de ayuda que evite nuevas afectaciones.
La preocupación central que provoca la falta de contenedores pasa más bien por la destrucción de puestos de trabajo que podría haber próximamente en la zona.