"Los primeros desarrollos estarán en las grandes ciudades, pero las pequeñas quedarán relegadas"
El gerente general de la empresa penquista de telecomunicaciones advirtió que antes de impulsar esta medida es fundamental levantar un detalle con la situación de las comunas en términos de conectividad.
La pandemia ha desnudado un sinfín de cosas. Una de ellas es la brecha digital que aún golpea fuertemente a las comunas más alejadas de centros urbanos, lo que ha impedido, por ejemplo, que muchos estudiantes puedan estar presentes en sus clases online. Toda esto afecta directamente a comunas de la Región del Biobío, territorio caracterizado por sus altos niveles de ruralidad.
Según Enrique Coulembier, CEO de Mundo, empresa de telecomunicaciones con casa matriz en Concepción, este escenario era mucho más complejo hasta hace tres años. A su juicio, en ese momento gran parte del país se encontraba abandonado digitalmente, "aunque ha habido un avance importantísimo".
-Pese a esta mejora, aún se manifiestan déficits en materia de conectividad. ¿Por dónde pasa la solución a este problema?
-Lo primero que tendría que hacer el Gobierno es un levantamiento que sea muy al detalle de cómo está la situación en términos de conectividad de todas estas partes desagregadas que tiene Chile, y a partir de ahí tratar de focalizarse en la conectividad del cliente. El Ejecutivo hace muchos esfuerzos con respecto a ayudar o subvencionar las fibras troncales para llegar a las ciudades. En España, por ejemplo, en vez de apoyar a las empresas para intentar que vayan a las ciudades, el gobierno está ayudando a la conectividad final, es decir, lo que hace es pagar la instalación y meses de servicio a los clientes finales que cumplen ciertas condiciones sociales por medio de un subsidio a la contratación.
El gerente general de la firma local agregó que eso ayudaría a que las empresas apuesten por las comunas más apartadas. "Hoy las compañías buscan el mercado de las grandes ciudades, y si no hay un modelo distinto seguirá pasando lo mismo", cuestionó.
-En vista de lo anterior, ¿es posible tener una infraestructura digital 5G que sea adecuada, tal como busca el Ejecutivo?
-No. Sin fibra óptica no existe el 5G. Si no hay conectividad a través de un elemento físico de mucha capacidad esto no tendrá resultado y no podrá ser viable. Entonces pasará lo mismo, ya que el 5G se desarrollará en las grandes urbes y no llegará a todo el país.
-¿Regiones como Biobío entonces no están preparadas para recibir este nuevo servicio?
-En términos de conectividad, habrá sectores que podrán implementarlo muy rápidamente, pero falta mucho desarrollo. Creo que la gente común todavía no sabe lo que significa el 5G, porque si lo entendemos como un servicio para intentar navegar un poquito más rápido con el teléfono, creo que no se justificaría implementar esta nueva tecnología. El 5G va mucho más allá y necesita mucho desarrollo de tecnología para poder usarse. Los primeros desarrollos del 5G van a estar dados en la masa de clientes, y eso está en las grandes ciudades. Siempre las comunas pequeñas quedarán relegadas. Eso debería ser al revés.
-¿Y ustedes qué tan posicionados se ven ante este desafío?
-Actualmente, no tenemos espectro para cubrir el 5G, pero sí tenemos capilaridad, tanto en redes de interconexión como en redes de última milla.
Proyecciones de la firma
Hace tan solo unos meses, Mundo lazó al mercado una nueva oferta comercial denominada Mundo Móvil. Según sus cifras, este servicio de telefonía móvil ya posee más de 4.500 líneas. "Vamos muy por encima de las expectativas, pero podríamos hacer la oferta más competitiva si existiera la convergencia y si Chile cambiara su modelo de comercialización hacia las empresas", recalcó.
-¿A qué nivel llegará la inversión de la empresa en 2021?
-Queremos continuar con nuestro plan de despliegue. Desplegar lo que queda de Chile para nosotros es caro. Estamos hablando de cantidades por encima de los $100 mil millones. Eso es para 2021, mientras que en 2020 estuvimos sobre los $90 mil millones.
-¿Qué iniciativas piensan levantar en la zona?
-Lo primero que estamos haciendo es una migración de la tecnología antigua (HFC), pero también estamos haciendo crecimiento de despliegue. En diciembre, por ejemplo, llegamos a Caleta Tumbes, un sector bien apartado de Talcahuano que conectamos con fibra óptica (...) La semana pasada, por ejemplo, llegamos a Rafael, en Tomé. (…) En julio terminaremos de migrar a todos los clientes para que tengan fibra óptica. Estamos hablando de ciudades como Cañete, Arauco o Lebu que todavía tienen red HFC.
Actualmente, Mundo cuenta con capacidad de fibra en cerca de dos millones de hogares en todo Chile. La meta es alcanzar los tres millones este año.
EL ROL DE LA INDUSTRIA
Así como otros sectores productivos tienen un rol relevante en la reactivación económica del país, Coulembier sostuvo que esta es una tarea que también le compete al sector de las telecomunicaciones, sobre todo en el apoyo que se pueda brindar a los emprendimientos que, a propósito de la emergencia, han debido digitalizar sus negocios mediante el teletrabajo y el delivery.
"Sería muy importante que el Gobierno pusiera mucho foco en este tema, a nivel residencial y empresarial, pues hay muchos emprendimientos fuera de las grandes ciudades que hoy tienen una conectividad deficiente", dijo.