Con un rey y un candado, Chile vuelve a embarcarse rumbo a Qatar 2022
La selección derrotó 2-0 a Perú con goles de Arturo Vidal, la figura excluyente del triunfo nacional, y una actuación reivindicatoria de Claudio Bravo. "Luchar por ir al Mundial es más importante que los goles", aclaró el jugador del Inter.
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Después de un inicio de Clasificatorias poco favorable, Chile regresó ayer de lleno a la lucha por un cupo al Mundial de Qatar 2022 luego de vencer por 2-0 a Perú.
Buena parte de la positiva actuación nacional, que le hizo sumar cuatro puntos en el acumulado y escalar al quinto puesto de las Clasificatorias, estuvo en la estrategia que Reinaldo Rueda presentó en el césped del Estadio Nacional.
El entrenador colombiano supo paliar la falta de días de trabajo con todos los seleccionados con una estrategia que, a priori, se basó en una constante presión a la salida de los jugadores peruanos y una disciplinada cobertura por las bandas, para frenar las subidas de los laterales y extremos visitantes que, como un espejo, Rueda ya había visto en su mente.
Isla y Beausejour cerraron sus bandas a los desbordes de Carrillo y Yotún, mientras que Orellana y Meneses matizaron sus desbordes al área contraria con una férrea marcación sobre la salida de los laterales incaicos Advíncula y Trauco.
Ya en los primeros minutos quedó demostrado que la apuesta del cafetero incomodó demasiado al equipo de Ricardo Gareca, quien ni bien corrían dos minutos comenzó a pedirles a sus jugadores que no le dieran tanto espacio a Erick Pulgar, ni a la línea del primer pase chileno, que siempre encontró de frente al arco de Gallese.
SÓLIDO ARRANQUE
Lo tuvo al minuto y medio Meneses, pero contuvo Gallese. También una aproximación de Pinares, en los minutos siguientes, que movilizó a toda la defensa peruana.
Sin embargo, todo ese entramado defensivo chileno, Rueda lo combinó con una libertad de movimientos para Vidal, Pinares y Mora, quienes vez que tomaron el balón o se combinaron con sus compañeros, fueron de frente al choque con los defensores peruanos.
Así llegó el 1-0, a los 20 minutos, con un impresionante derechazo del súperclase del Inter de Milán que se clavó en el ángulo superior izquierdo del pórtico de Gallese, luego de un pase de Meneses.
Era una justa ventaja a esas alturas, por lo que Chile mostraba en cancha y por la confusión que reinaba en el cuadro peruano, que llevó a Gareca a desarmar sobre la marcha su esquema de 4-2-3-1 a un 4-4-2 para centralizar más el juego y recuperar el balón.
En eso estaban, cuando Chile, y otra vez Vidal, le dieron un nuevo zarpazo a la ilusión peruana a los 35', con el segundo tanto de la Roja. Centro de Orellana, cabecea Mora y en el rebote, el formado en Colo Colo convirtió el 2-0. Como el capitán que fue en el partido, Vidal se fundió en un abrazo con los dos gestores de la jugada. Si liderazgo en la Roja se nota.
APARECE BRAVO
Tras la sólida actuación de Vidal, que le permitió a la Roja marcar la diferencia, vino el turno para Claudio Bravo, quien refrendó con su presentación el liderazgo que tiene en la defensa.
Y lo hizo como sabe. Ordenando a sus compañeros y atajando en los mano a mano, donde le sacó un gol hecho a Ruidíaz en los descuentos del primer tiempo, que le valió las felicitaciones del propio Vidal, y dejó con el grito de gol en la boca a Lapadula en el segundo lapso, período en que los peruanos se volcaron sobre la portería del arquero de Betis, que siempre estuvo atento a las intentonas visitantes.
Al final, fue un valioso triunfo de la mano de dos históricos, que pese a sus diferencias fuera de la cancha, dentro de ella ponen de vuelta a la Roja en competencia por un cupo en el próximo Mundial.
"El primer tiempo jugamos mejor y salimos a buscar el partido, en el segundo nos metieron atrás, pero lo importante es que ganamos y supimos sufrir sin que nos costara caro", dijo Vidal, mientras que Gary Medel felicitó a sus compañeros. "Unos grandes, a seguir por el mismo camino".
Consultado por el doblete que lo pone entre los artilleros históricos de la Roja, Vidal remarcó su objetivo: "Luchar por ir a otro Mundial es más importante que los goles".
El 1-0, a los 20 minutos, con un impresionante derechazo del súperclase del Inter de Milán que se clavó en el ángulo superior izquierdo del pórtico de Gallese.