"El Estado tiene mucho que decir en la crisis, pero no es el único salvador"
Mauricio Gutiérrez analiza las últimas cifras sobre el efecto de la pandemia y aborda los caminos a seguir para recuperar el crecimiento.
El Observatorio Laboral Biobío, organismo dependiente del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence), reveló hace unos días cifras impactantes en relación a la profundidad de la crisis económica local causada por la pandemia de covid-19. Según la instancia, un 43% de los restaurantes de la zona cerró o está en proceso de hacerlo. Esta situación se experimenta también en otros rubros asociados al turismo.
Mauricio Gutiérrez, seremi de Economía, dice ver con tristeza estos resultados, pues el análisis "es bastante decidor, claro y potente". Pero va más allá. A su juicio, de acuerdo a información del Servicio Nacional de Turismo (Sernatur), solo el 21% de las empresas que componen este sector están en funcionamiento.
Ante las cifras, la autoridad reconoce que el panorama no es el mejor: "Aquí hay que ser claros, habrá restaurantes, bares u hoteles que no van a poder sortear el perverso efecto económico, pero existirán algunos que saldrán robustecidos y otros que se reconvertirán".
-En vista de lo anterior, ¿considera adecuadas las medidas levantadas desde el Gobierno para evitar la debacle económica?
-Por supuesto. El efecto económico existe aquí, en el país y en el mundo. No tiene un costo cero. Su costo es mayor o menor de acuerdo a las medidas que los gobiernos vayan tomando. En ese sentido, el nuestro ha hecho una labor muy buena, en donde ya sobrepasamos el 10% del producto interno bruto (PIB) en términos de ayuda social y empresarial para las pequeñas y medianas empresas (pymes).
-¿Todo lo hecho es suficiente, o se puede hacer algo más aún?
-Que sea suficiente o no dependerá mucho del comportamiento que tengamos las personas. No es el Estado el único salvador de esta situación. Por cierto, el Estado, representado por nosotros como Gobierno, tiene mucho que decir y que ayudar, y hemos hecho mucho.
RUBRO TURÍSTICO
-Desde el rubro del turismo han pedido ayuda de forma particular, ya que dicen ser uno de los más golpeados por la crisis. ¿Qué se puede hacer al respecto?
-Nos hemos reunido muchas veces con cámaras de comercio y turismo o asociaciones que abarcan muchas empresas del sector y la gastronomía. Ellos piden, probablemente, más ayuda de la que se está entregando. Uno empatiza porque hay desesperación. Sabemos que lo están pasando mal, pero cada semana seguimos adjudicando recursos, y ahí uno ve con mucha alegría cómo se van sumando nuevos beneficiarios.
-¿Cuándo prevén que mejore el panorama para estos sectores?
-Yo soy un optimista crónico. Creo que el turismo interno comenzará a reactivarse en el mes de septiembre. Ahí podría haber un incipiente reinicio de actividades, siempre y cuando el comportamiento de la población sea responsable y no tengamos nuevos peak de la pandemia.
REACTIVACIÓN
-¿Cuáles son los puntos claves que debe asumir la Región para la reactivación económica?
-El sistema portuario de la Región está funcionando al 100% y nunca ha parado, aunque con menor carga exportada, porque este es un efecto mundial. En la medida que se vaya recuperando la economía de nuestros principales compradores (China y Estados Unidos), nuestros puertos estarán listos para seguir entregando sus mercaderías. Por otro lado, el consumo interno dependerá de la capacidad que tenga la Región de ponerse de pie. Hoy, el pequeño comercio está funcionando en un 90% y 95%, aunque sus ventas son más bajas. El sector metalúrgico está en un 83%, la pesca industrial en un 75%. El sector más dañado es el turismo. Ahí es donde hay que apuntar el tema de los subsidios.
-Durante los últimos días, distintos gremios y organismos empresariales insistieron en mantener una adecuada colaboración público-privada. ¿Cómo debiese materializarse este aspecto hoy y en la etapa post pandemia?
-Esta colaboración, sumada la academia en esta triple hélice, es fundamental. Nosotros nos reunimos virtualmente todas las semanas con los gremios de las pymes y de los sectores productivos más grandes. Por lo pronto, se toca el tema con el sector privado y estamos claros que el futuro de la Región es el sector logístico y exportador, en donde los puertos tienen una labor fundamental.
-¿Qué se deberá hacer distinto cuando todo esto acabe?
-Hay inversiones públicas que los privados están pidiendo a gritos para tener un mayor desarrollo económico, como el avance del nuevo puente ferroviario en el Servicio de Evaluación Ambiental, o el diseño de ingeniería de la Ruta Pie de Monte. Todo lo relacionado a la conectividad portuaria se está pidiendo y nosotros recibimos esas inquietudes. Por el lado de la inversión, tenemos que seguir mejorando nuestro Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental. Eso sí, no significa con ello tener normas más laxas de aprobaciones ambientales, sino que seamos más veloces.