Escenario de incertidumbre afecta a las pymes forestales
Junto con valorar las medidas implementadas por el gobierno, piden agilizar el otorgamiento de créditos en bancos, de manera que les permita seguir sorteando el difícil momento.
Frente a la crisis económica generada por el coronavirus en Chile, pequeños y medianos empresarios forestales analizan el difícil escenario actual y futuro y junto con valorar las medidas que ha implementado el Gobierno, piden agilizar el otorgamiento de créditos en bancos, de manera que les permita seguir sorteando el difícil escenario productivo que enfrentan.
Según describe Pablo Swinburn, gerente de Agrícola y Ganadera Dadinco, (pyme que exporta a través de terceros a Perú y Ecuador), decidieron postergar cosechas silvícolas hasta el próximo año. "Vamos a esperar a contar con mejores condiciones comerciales y, por lo tanto, no estamos exportando".
Por ser pymes el número de colaboradores que mantienen en tiempos normales es bajo, por lo que uno de los principales obstáculos que enfrentaron fue la disminución de personal en terreno, con el fin de prevenir cualquier riesgo de contagio.
TRABAJO EN TERRENO
"Les pedimos a los trabajadores que no vinieran a la empresa dado que varios viajaban en locomoción colectiva. El trabajo de terreno que normalmente realizan dos personas bajó a una y, en consecuencia, el tiempo de faena se ha duplicado", comenta Gloria Molina, gerente de MIPlagas, empresa pyme especializada en control de plagas forestales.
Para Rodrigo Olguín, gerente de Forestal Foresol, dedicada a la producción de madera y a exportación principalmente a mercados en China, Japón y Corea, relata que al inicio de la pandemia pararon todas las operaciones, aplicando teletrabajo. "Con el paso de los días aprendimos y nos adaptamos a la nueva forma de trabajar con reuniones online, esto implicó no generar ingresos. En una segunda etapa, algunos volvimos a la oficina por turnos, para volver a producir, vender y así poder solventar los costos y pagar los sueldos".
Recién a fines de mayo e inicios de junio, Foresol pudo retomar sus operaciones. "Decidimos como empresa no despedir a nadie, aguantar hasta julio y evaluar en ese momento el escenario", dice Olguín.
Empresas que prestan servicios a terceros, como South American Forests, dedicada a la integración de tecnología remota o máquinas no tripuladas a faenas forestales, también han visto disminuidos o detenidos los proyectos que tenían previstos ejecutar este año. "Nos ha afectado negativamente el covid-19. "Nosotros tenemos un área que aborda la venta de equipos tecnológicos que son importados desde Asia, los fletes han aumentado de precio por la demanda y el alza del dólar, lo que dificulta continuar operando", relata su gerente general Pablo Mieres.
APOYO GUBERNAMENTAL
Respecto de las medidas que ha implementado el Gobierno, la gerente de MIPlagas, Gloria Molina, indica que su principal problema son los requisitos para el otorgamiento de beneficios. "La postergación del IVA es una buena medida, pero es pan para hoy hambre para mañana, son sólo tres meses, y en mi caso están los meses que no tengo faena. Por mi parte prefiero pagar los sueldos a mis trabajadores y llevarles el pan a la mesa", argumenta la profesional.
Pablo Mieres agrega que para evaluar el otorgamiento del apoyo financiero las entidades financieras "han tomado la rentabilidad del año 2019 que fue terrorífica, y hoy no nos han ofrecido ningún crédito covid-19 como capital de trabajo".
Una mirada distinta es la de Pablo Swinburn, quien valora las herramientas disponibles. "Creo que el Gobierno ha tomado buenas medidas, acorde con las dificultades en que se encuentra el país y el mundo. Esperamos que vengan nuevos estímulos económicos, en la medida que la crisis continúe. La banca ha tomado una actitud proactiva con nosotros. Por supuesto que nos gustaría que fuera más ágil para el curse de los créditos, pero entendemos que tienes sus procesos internos".
VISION A FUTURO
El ingeniero forestal Roberto Pera, gerente de la consultora Forst y propietario forestal, estima que "el sector tiene una oportunidad de retomar el impulso forestador y reforestador con una gran absorción de trabajadores en plantaciones como en su manejo posterior. En estos tiempos de incertidumbre los activos forestales constituyen un buen refugio, porque los árboles siguen creciendo independiente de si el mercado sube o baja".
Además, cree que es el momento "para un gran plan construcción de viviendas hechas a base de madera con altos estándares que, utilizando modernas técnicas ya probadas por cientos de años en países forestales, nos permitan absorber madera en el mercado nacional con diferentes grados de agregación de valor".