Proyectan alto nivel de cesantía en la Región para los próximos meses
La encuesta aplicada por la Universidad San Sebastián arrojó negativas cifras en materia de adquisición de viviendas y automóviles. Eso sí, ven una mejor situación en la economía futura.
La nueva versión del Índice de Confianza en la Economía Regional (ICER), aplicado en diciembre de 2022, arrojó un total de 28 puntos de un total de 100, y pese a la cifra baja de la medición, la población encuestada vislumbró una mejora en la economía regional del futuro. Además, el índice desarrollado por la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián (USS) mostró que el porcentaje de encuestados que considera una negativa economía futura bajó de un 57% a un 46%, en relación a la última medición.
Entre las variables contempladas se encuentran la situación económica personal actual, el momento económico del país y la Región del Biobío, las expectativas económicas a dos años, además de las posibilidades de consumo en materia de vivienda y transporte. Dentro de las consultas también se abordaron preguntas en materia de empleabilidad, con un pronóstico poco favorable para la zona.
De acuerdo al índice, en la Región del Biobío un 53% proyecta que aumentará la cesantía en los próximos meses. Frente a la pregunta "¿considera que encontrar trabajo en la Región es fácil, normal o difícil?", un 62% cree que es difícil, cifra que sube a un 71% para las personas de 56 años y más. Del total de encuestados, solo un 5% percibe como fácil encontrar empleo en esta zona del país.
"En materia de empleo, la percepción de las personas es un aumento de la cesantía, que iría de la mano con las perspectivas de decrecimiento económico que se esperan para este año 2023, además de las nulas señales por parte del actual gobierno en materia de inversión y generación de más y mejores puestos de trabajo", explicó Luis Felipe Slier, director de la carrera de Ingeniería Comercial de la USS Concepción.
Expectativas de consumo
Consumo de vivienda o automóvil fue la categoría con mayor nivel de pesimismo del ICER de diciembre, con un total de ocho puntos. Para un 87% de las personas es un mal momento para adquirir este tipo de bienes, mientras que el mayor pesimismo dentro de este ítem se observó en las personas desde los 36 años y en aquellos pertenecientes al grupo socioeconómico D.
"Las expectativas de consumo de viviendas y de automóviles están en línea con las expectativas económicas. Influye el encarecimiento de los créditos de largo y corto plazo, además de las mayores restricciones en materia de acceso al crédito hipotecario. En síntesis, existen mayores restricciones para acceder al crédito y los créditos son más caros. Es de esperar que a mediados de año el Banco Central relaje su política monetaria y veamos que la TPM comience a disminuir", precisó Slier.
La misma tendencia se registró en la evaluación de créditos bancarios, donde un 92% de los encuestados señaló que es un mal momento para solicitarlos. A su vez, respecto a las percepciones de inflación, para un 74% los precios de los principales productos aumentarán en los próximo doce meses, porcentaje que se eleva a un 81% para quienes integran el grupo socioeconómico D.
Panorama económico
Este índice mostró, además, que el escenario económico regional actual fue mejor percibido, promediando un total de 26 puntos, mientras que a nivel nacional obtuvo 21 puntos. El académico sostuvo que, si bien en la medición de diciembre se observa una mejora en las cifras, se mantiene el indicador en un espacio de pesimismo, lo que se da principalmente por las bajas expectativas de crecimiento para este año, la situación internacional y cómo se comportará China en temas de crecimiento y desarrollo.
"El resultado del plebiscito de salida y posterior acuerdo transversal para la elaboración de una nueva Carta Magna permite a la población pensar en un texto con más bordes que entregue estabilidad económica para los próximos años", cerró Alejandro Weber, decano de la Facultad de Economía y Gobierno de la USS.