Miguel Mateos celebrará 40 años de rock en Concepción
Afirmando que es un privilegio volver a compartir con los chilenos, el exlíder de Zas evocará sus mejores éxitos en una noche cargada de rock y anécdotas.
Considerado una de las voces más influyentes del rock argentino, Miguel Mateos regresa a Chile luego de su última presentación en el país en mayo de 2019.
Enmarcada en la celebración de sus 41 años de carrera, el cantante porteño aterrizará por primera vez en la capital penquista con la gira "40 años, grandes éxitos" en el Gimnasio Municipal de Concepción, el 14 de agosto, a las 20 horas.
El concierto, pensado para 150 minutos, será un viaje sonoro recorriendo sus composiciones más antiguas hasta su último disco, "Undotrecua" (2019). Así, de manera aleatoria según adelantó el artista, repasará temas que en los ochenta tocaba en compañía de su banda Saz (1979- 1989), como "Va por vos, para vos" (1982), producción que se convirtió en el primer hit del grupo, gracias a la potente difusión radial en el periodo de la Guerra de Malvinas.
El intérprete de "Cuándo seas grande" (1993) reconoce que no será fácil compilar cuatro décadas de trayectoria en una sola noche. "Por mí, me quedaría durante seis horas en el escenario, pero no creo que el cuerpo ni el público lo aguante", comenta entre risas. Sin embargo, añade que "creo haber hecho una selección muy realista y contundente de las canciones", detalla.
De este modo, el músico estará acompañado de su hermano, Alejando, en la batería; Leo Bernstein, en teclado; Oscar Kreimer, en el saxo; Ariel Pozo y su hijo, Juan, en guitarra.
-¿Cómo es trabajar con tu hijo?
-Esa es la particularidad fundamental de toda esta historia. De pronto, estando cantando, miro para atrás y veo a mi hijo guitarreando haciendo solos, o a mi hermano con la intro de una canción, es un sentimiento muy familiar y entrañable. Lo he visto madurar frente a audiencias de cinco mil o diez mil personas. Nunca fue lo mismo contarle lo que su papá vivió en Nueva York, por ejemplo, a que lo viva conmigo.
-¿Por qué contemplar a Chile y Concepción en esta celebración?
-Siempre lo digo y no me cansaré de afirmarlo: quiero mucho a este país. Fue el primer lugar, fuera de Argentina, en el que me presenté a mis inicios. En aquel momento me recibió, bien clandestinamente hay que decir, mis cassettes, lo que me parecía una locura. Estamos hablando por allá en el 83. Chile y Argentina vivían momentos políticos y sociales muy difíciles, entonces se daba una complicidad y entendimiento con el pueblo chileno.
Voz de logros
Uno de los logros que el rockero recuerda con gran simbolismo fue la presentación de Zas como teloneros para Queen, en 1981. En ese entonces, el conjunto de Freddie Mercury y más de 150 mil personas fueron testigos de lo que sería el primer evento masivo de Mateos. "Recuerdo que con mi hermano estábamos muertos de pánico", declaró.
A aquel hito con los autores de "Bohemian Rhapsody" (1975), se suma el hecho que, poco después, el grupo liderado por Mateos empezó a girar por todo el continente americano. A tal punto que, en septiembre de 1989, Zas sería la primera banda argentina en tocar en Estados Unidos.
Por ahora, los planes del legendario compositor están concentrados en celebrar estos logros compartiendo anécdotas con el público latinoamericano. Advierte que, cuando finalicen estos viajes, el próximo año liberará su más reciente trabajo: una ópera de rock.
"Mi evolución musical ha sido académica. En la pandemia me puse a estudiar, así fue como nace esta nueva etapa. Espero que con esta propuesta haya más alternativas para escuchar. Soy un disfrutador, así que invito a que todas y todos lo sean. La vida es muy corta, tenemos que enfocarnos en ser felices, querernos, respetarnos y vivir", expresó, añadiendo que la única manera en la que se imagina celebrando todos estos años es arriba de un escenario.
De manera muy entusiasta evoca la admiración por el rock chileno y se declara ser fan de Los Prisioneros y La Ley.
-¿Cuáles son tus impresiones respecto a la escena de rock en Argentina?
-Frente a cualquier cosa, yo siempre voy a defender este género musical. Pese a que siento que otros estilos han invadido la música y así las formas comunicacionales, nunca traicionaría este tipo. Parte de mi vigencia ha sido esta consistencia melódica. Digo esto porque ahora pareciera que hay una escena musical más fuerte que otra, como el peso urbano, pero yo nunca haría algo con ese repertorio. Simplemente, porque defiendo el rock.