Exposición multimedial invita a "Andar por las cuerdas"
La muestra de Lorena Muñoz incluye una fotoperformance de la artista boxeando y audios reflexivos en torno a la pandemia.
Originada en la realización de una sesión fotográfica boxeando, donde se expone su intimidad como un espacio de exhibición pública, la exposición "Andar por las cuerdas" va más allá.
Y es que, para la licenciada en Artes Plásticas Lorena Muñoz, lo anterior también es un desplazamiento hacia otras formas de experimentación sobre un nuevo soporte artístico.
En junio del año pasado, a cuatro meses del inicio de las cuarentenas y a más de un año del estado de excepción, esta instancia íntima de boxear se transforma en un acto de performance fotográfica registrado por la artista visual Yessica Gaete.
Según recuerda Muñoz, "posteriormente la propuesta, realizo una reflexión en formato virtual que circula por redes sociales con la pregunta ¿Qué ves cuando exhibo este cuerpo, este espacio íntimo en un estado de excepción? Pregunta que instalo en el espacio público de la ciudad de Concepción mediante la realización y colocación de 200 serigrafías para proponer ampliar la reflexión en la comunidad".
Al mismo tiempo, la artista le propone a algunos de sus pares de diversas disciplinas reflexiones en archivo sonoro frente a esta interrogante.
La muestra considera nueve peras de boxing y nueve audífonos, cada uno con un circuito compuesto de un sensor giroscopio, microcotrolador y archivo de audio que, al ser accionado por el espectador, gatillará cada uno de los audios con las respuestas recopiladas.
Al mismo tiempo, también consta de ocho fotografías de gran formato y otras 54 de tamaño más pequeño. Luego, un fotolibro con textos de la periodista Alejandra Villarroel, se distribuirá gratuitamente en espacios educativos y culturales.
"Andar por las cuerdas" estará disponible hasta el 22 de julio en el Punto de Cultura Federico Ramírez (a un costado de la Municipalidad de Concepción) de martes a viernes, de 9 a 13.30 horas.
Ideas
La idea de boxear, según reflexiona la autora de la muestra, surge con el propósito de instalar una reflexión sobre el actual estado de precarización del trabajo artístico de mujeres.
"Todos estos lenguajes (imágenes, sonido, boxeo) son una contribución para reflexionar y proponer un espectador participativo, donde su accionar sea uneje fundamental en la articulación y concreción de la propuesta. Son medios conjugados o herramientas para instalar la reflexión", aseguró.
-¿Cómo se te ocurrió la pregunta que acompaña este proceso?
-La pregunta se me ocurrió luego de la realización de las fotografías, de las sensaciones de encierro y la falta de contacto social. Era una necesidad imperante de poder establecer un diálogo con otras artistas, y ampliar la reflexión en la comunidad y cómo esta se identifica con la interrogante. Todo para problematizar públicamente sobre cómo nos representamos como figura social en un contexto, en este caso de pandemia y de estado de excepción, medidas que también impidieron la realización de intervenciones callejeras.
-¿Por qué se te ocurrió mezclar lo íntimo y lo privado, el cuerpo y la virtualidad?
-La instalación "Andar por las cuerdas" es donde contrapongo lo íntimo y lo privado, con énfasis en las relaciones de la virtualidad y las nociones del cuerpo y sus afectividades, nociones que dislocan la clásica noción del desnudo en las artes. Entonces, la acción de boxear, se transforma en un acto feminista de rebelión, donde crear es transformar aquello que históricamente nos concierne. Mezclo ambos conceptos con el objetivo de poner de manifiesto esa relación de contrariedad de cómo nos figuramos y representamos en tiempos de pandemia sobre todo en relación a la exhibición por medio de la virtualidad.
- Aún con la pandemia encima, ¿cómo has visto la recuperación del sector en los últimos meses?
-En el actual estado de pandemia, veo un sector muy afectado, con muchas necesidades sobre todo en lo que concierne al trabajo de las mujeres -no solo artistas- sino en el campo laboral en general. La instancia de la instalación viene a reforzar el diálogo y la reflexión de todo lo que este proceso conlleva, con el propósito de sacar la voz de las realidades que nos incomodan / afectan, para que estas no queden en el silencio.