Los daños del sistema frontal
El sistema frontal que azotó la semana pasada a la Región del Biobío dejó anegamientos de calles y deslizamientos de tierra, debido a la caída de 105 milímetros de lluvia. Se reportaron 79 viviendas afectadas, mayormente en Concepción, Tomé y Hualqui, por filtraciones de agua, voladura de techumbres o caídas de árboles.
También el fenómeno causó el rebalse de alcantarillados en Concepción, Hualqui, Penco y Tomé, y el corte del suministro eléctrico en algunas comunas. De acuerdo con la Oficina Regional de Emergencia, en general la zona soportó bien el frente de mal tiempo, y los daños provocados fueron superados por las cuadrillas de trabajadores de las respectivas municipalidades. Este año comenzaron con anticipación los trabajos preventivos para evitar que las lluvias y el viento del período otoño-invierno generen mayores problemas a la población. El programa ha considerado la limpieza de canales, rejillas y el retiro de microbasurales. No obstante, es evidente que con las lluvias de los últimos meses se han producido problemas como anegamiento de calles y desprendimiento de ramas. Aparte de la limpieza de rejillas de aguas lluvia, que con frecuencia se tapan en otoño debido a la caída de las hojas, y podas preventivas de árboles, el Plan de Invierno ha incluido la entrega a la Oficina Regional de Emergencia de un detalle de los puntos tradicionalmente críticos en las comunas, para actuar con anticipación.
La ciudadanía sabe que en nuestra zona caen abundantes lluvias durante la temporada de otoño e invierno, y así ha ocurrido siempre. Las ciudades deben convivir con el nivel de las lluvias, el aumento de caudal de los ríos, esteros y canales, y eso implica mantener expeditos los cauces y colectores. Por ello, son importantes los operativos de invierno y la eliminación de riesgos potenciales que deben hacer los municipios y los distintos servicios públicos. También deben realizarse las mantenciones a medida que avanzan los meses. En esta tarea, también los vecinos deben hacer la limpieza de canaletas y desagües en sus entornos, para evitar que cada año haya que lamentar que la lluvia y el viento generen problemas que eran predecibles.
Hay sectores que en forma recurrente se inundan, como Ramón Carrasco, en el acceso a las Lomas de San Sebastián, Nonguén, Palomares, Collao, Plaza Acevedo y Andalién Bajo, entre otros. Por eso, es importante que con la debida anticipación haya cuadrillas y el equipamiento para trabajar en diferentes puntos, con camiones y maquinaria, para despejar canales y laderas de cerros.
Respecto del sector céntrico, hay que tomar en cuenta que a medida que avanza el otoño las hojas que caen de los árboles tapan los colectores de aguas y se generan inundaciones. Asimismo, es necesario atender las necesidades de los campamentos que existen en la Región del Biobío, donde la situación es más crítica con las lluvias y el viento. Si bien las condiciones de esos asentamientos de emergencia son más adversas por la pandemia, se han intervenido algunos para mejorar sus condiciones y para adelantar el cierre de otros.
Cada año es necesario que se tomen las medidas de prevención según necesidades de cada comuna. Es una tarea que debe realizarse cada año, antes de la llegada del invierno, sin necesidad de esperar que se produzcan catástrofes para reaccionar. En algunos sectores, con cada aguacero importante, los vecinos tienen que poner sacos de arena en las puertas y subir los electrodomésticos al segundo piso, donde es posible, para sortear en parte los efectos y minimizar las pérdidas.
Junto con la labor que le corresponde a los servicios públicos en la limpieza de ríos, canales, rejillas de aguas lluvias, es necesario también que la ciudadanía entienda que en cada hogar deben realizar una "operación invierno", para limpiar sus canaletas y desagües, para evitar las consecuencias y transformarse en damnificados.
Respecto del sector céntrico, hay que tomar en cuenta que a medida que avanza el otoño las hojas que caen de los árboles tapan los colectores de aguas y se generan inundaciones.