Formalización de infantes de marina por muerte de comunero suma tercera jornada
Entre los antecedentes entregados por el Ministerio Público, se detalló que los proyectiles que provocaron el fallecimiento de Lliempi Machacán coinciden con el calibre de los fusiles percutados por los marinos.
Durante una segunda jornada de formalización para fundar la solicitud de prisión preventiva del teniente de Marina Luis Videla Cid y el cabo Ricardo Seguel San Martín, el Ministerio Público expuso antecedentes obtenidos por pericias respecto al procedimiento que habría provocado la muerte de Jordan Lliempi el 3 de noviembre de 2021 bajo estado de excepción. La audiencia se reanudará a las 14 horas para que la defensa entregue sus últimos alegatos.
El fiscal con dedicación a causas de Derechos Humanos, Nelson Vigueras, expuso diferentes informes, entre ellos transcripciones de los registros audiovisuales de las cámaras GoPro de los infantes de Marina, informes de la Policía de Investigaciones, del Servicio Médico Legal, fotografías, nuevamente registros audiovisuales y declaraciones para fundar la existencia de antecedente que justificaban la existencia del delito y de una eventual acción dolosa.
Informe de autopsia
Entre los diversos informes que el fiscal expuso en su presentación de antecedentes, estaba el resultado de autopsia que evacuó el Servicio Médico Legal el 22 de noviembre de 2021, en el que se indicó que la víctima de 23 años presentaba cinco lesiones de distinta consideración, siendo la que le causó la muerte la que generó el ingreso de un proyectil metálico en el hombro izquierdo, el cual atravesó diversos tejidos tales como pulmón izquierdo, corazón y diafragma.
De esta forma se determinó que la causa de muerte fue por un traumatismo torácico provocado por un arma de fuego de carga única sin salida de proyectil. Así también en el proceso de autopsia, los funcionarios pudieron encontrar restos de estos proyectiles que se identificaron como metálicos y alojados uno en la herida principal, rastros en el que comprometió el cuero cabelludo del Lliempi Machacán, y en la mano derecha en que se alojaron fragmentos metálicos.
Pericia balística
El Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones realizó pericias balísticas sobre el proyectil y los dos fragmentos metálicos que fueron encontrados en el cuerpo de la víctima, esto con el objetivo de identificar, clasificar y determinar el posible calibre de dichos proyectiles.
De esta diligencia se evacuó un informe en marzo del presente año, sobre el cual el fiscal Villegas indicó que "corresponden a tres trozos de núcleo (...) que formaron parte de un proyectil balístico del tipo encamisado, sin embargo, considerando las características morfométricas principalmente del núcleo N que posee mayor masa y del que (...) es posible señalar que este formó parte de un proyectil balístico calibre 5.56x45 mm".
De esta forma, el fiscal apuntó a que el calibre de los proyectiles que le causaron la muerte a Lliempi Machacan coinciden con el calibre de las armas que aquel 3 de noviembre portaban los infantes de marina que percutaron un total de 133 disparos con los fusiles FN Scar en el sector con presencia de población San Miguel, comuna de Cañete.
Archivos borrados
La querellante por el Instituto Nacional de Derechos humanos, Carolina Alvear, apuntó a que la necesidad de cautela se funda en la información entregada en un informe policial de la Brigada de Homicidios de Concepción de la PDI, en que se constató la existencia de archivos no vigentes en algunas de las cámaras que portaban los funcionarios públicos, entre ellos una de las que portaba el imputado Videla Cid.
"Se señala en el informe policial "es por tanto que los archivos no vigentes de las nubes (...) son la base para señalar que habría una intervención de la evidencia previa a la incautación que realizó el personal policial lo cual además se sustenta en las pruebas de funcionamiento ejecutados por parte del Laboratorio de Criminalística regional Temuco", detalló la querellante leyendo el documento.
"Estos antecedentes a los que he hecho referencia no solo nos permiten establecer que existe una sospecha grave y fundada de que los imputados pudieran obstaculizar la investigación, sino que lo demuestra (...). Se entiende que la prisión preventiva se hace indispensable para el éxito de la investigación", finalizó.