Los Tres regresan a casa para debutar en el Teatro Biobío
La reconocida banda penquista vuelve hoy a la zona a seis meses de su última visita. Destacan el regreso de la presencialidad como una "felicidad enorme".
Los Tres y Concepción están unidos de forma indisoluble. Si bien con el paso de los años este camino se ha ido separando, especialmente desde la partida de la banda a Santiago a fines de los 80, la música los sigue uniendo.
Es así que la banda liderada por Álvaro Henríquez y Roberto "Titae" Lindl regresa a la zona para debutar en el Teatro Biobío. El escenario de la Sala Principal los recibirá con toda su capacidad (1100), por cambios en el plan "Seguimos cuidándonos, Paso a Paso".
Todo hoy, a las 20.30 horas, con entradas en ticketplus.cl, con valores que van de los $12.714 a los $26. 488. "Era una deuda que teníamos que saldar, tocar en este importante recinto de la ciudad (...) Y qué bueno que se abrieron los aforos al 100%, será aún más emotivo", aseguró Henríquez.
He barrido
La última vez que los penquista barrieron el sol de la ciudad, fue en octubre pasado, en medio del aniversario de la comuna y de su fallida postulación como Ciudad Musical de la Unesco.
Para el artista de 52 años, "siempre es una felicidad y emoción tocar en nuestro querido Concepción, es una parte importantísima de nuestra historia".
Con visitas a diversas ciudades de Chile y salidas al exterior en los últimos meses, Los Tres ya han retomado su ritmo de presentaciones, uno interrumpido por largos meses debido a la pandemia.
"Recibimos este regreso a los escenarios con una felicidad enorme. Nos faltaba oxígeno tocando sin público, la energía del público es oxígeno", detalló el cantante.
En su estilo
Siempre atentos a lo que dicta el río, como versa "Feria verdadera" del ya legendario disco "Fome" (1997), el grupo cimentó el éxito de sus inicios en el rock. Sonidos como el rockabilly, el jazz, la balada y el pop están presentes en éxitos como "Un amor violento", "Déjate caer", "La espada y la pared" y "Hojas de té", entre otros.
Sin embargo, su discografía no está ajena a sonidos como la cueca -de la cual fueron los principales impulsores de su fusión con el rock- la Nueva Ola y la Nueva Canción Chilena.
Consultado Henríquez sobre la posición hoy, como un clásico indiscutido del repertorio nacional, en medio de la irrupción de otros géneros, el músico es enfático en asegurar que "nosotros hemos seguido haciendo lo nuestro, a pesar de las modas y cambios culturales, somos un grupo sólido".
Una de las principales características en sus inicios fue estar abiertos a la exploración de sonidos. Sin embargo, esta libertad tiene un límite.
En ese sentido, frente a la posibilidad de colaborar, por ejemplo, con artistas de música urbana o estilos afines, la respuesta del cantante de "La espada y la pared" es un rotundo "NO".
A 12 años de su último álbum, el casi olvidado "Coliumo", y a siete del EP, "Por Acanga" -el cual tendría una segunda parte que todavía no llega- la agrupación cimenta su legado en producciones clásicas como "Se remata el siglo" (1993), "La espada & la pared" (1995), "Fome" (1997) y "La sangre en el cuerpo" (1999). Estos mismos, son los que más suenan en conciertos como el de hoy.