Chile Ópera Festival: Concepción en el primer plano de la lírica
Un evento que comenzó a gestarse en 2019, con la firma del convenio de alianza entre la Corcudec, el municipio penquista, el Instituto de Cultura Italiano y la Associazione Internazionale delle Culture Unite, A.I.C.U. de Genova, Italia; colaboración que dio forma a la primera versión del Chile Ópera Festival, realizado entre el 19 de noviembre y 11 de diciembre pasado.
Desde la Gala Lírica inaugural, en el Teatro UdeC, hasta el cierre con la presentación de la ópera "Rigoletto", en el Estadio Ester Roa Rebolledo; hizo que Concepción se ubicara en el primer plano del circuito lírico nacional e internacional, bajando la cortina con una aplaudida presentación frente a unas 3.500 personas, en atención a los aforos permitidos en emergencia sanitaria.
Con más de 150 músicos participantes, liderados por la Orquesta Sinfónica, el festival sumó reconocidas voces líricas como Giada Venturni, de las promesas vocales de la ópera italiana, la soprano Maureen Marambio y el tenor Gonzalo Tomckowiack; quienes estuvieron en la gala inaugural. Por su parte, Pablo Castillo, Natalia Vilches, Javiera Orellana y Pedro Alarcón, entre otros, protagonizaron la ópera de Giuseppe Verdi.
Claudia Muñoz, vicerrectora de Relaciones Institucionales y Vinculación con el Medio UdeC, recalcó la satisfacción que les dejó el festival. "Permitió que Concepción fuera sede de un magno evento, contando con actividades como masterclass, presentaciones online de las óperas de Miguel Farías, la conferencia de Alberto Macri, el concurso lírico para 'Jóvenes talentos" y, por supuesto, la ópera Rigoletto, con voces internacionales y locales", destacó la también presidenta del directorio de la corporación cultural.
"Mis vecinas trágicas": un cortometraje original y en pandemia
La faceta creativa y autoral de Patricia Cabrera no solamente ha tenido en el teatro una expresión vital (La Otra Zapatilla), para señalar sobre el pálpito de personajes intensos, en marcos de referencias acotados y a veces tensos.
También, junto a Óscar Oviedo, ha aportado desde el teatro sonoro relatos que conmueven y son capaces de transportar al oyente (desde el sonido) a otras voces y otros ámbitos de condiciones humanas. Ello, en los surcos de La Gaviota Podcast, proyecto al aire desde marzo del año pasado en pandemia.
De ahí el paso al cortometraje podía ser medio lógico para Cabrera, en tanto el deseo de contar historias en otros formatos. Como realizadora de "Mis vecinas trágicas", pieza ganadora del II Festival de Cine Comunitario de La Reina, en mayo pasado, la actriz de profesión construye un universo distópico. Acá lo entendemos como una representación de la sociedad (futura) enfrentada a cuestiones de carga negativa: el miedo, el dolor y la opresión.
Registrado entre noviembre de 2020 y marzo de este año, en 20 minutos, y con planos enfocados en sus propias vecinas (nueve en total), Cabrera genera un espacio sombrío, a partir de una galería de mujeres que actúan desde los ámbitos de la tragedia griega. Antígona, Medea o Afrodita plantean corpus femeninos, que escriben su propia obra, mientras ronda la muerte.
El cortometraje, que también cuenta con la participación de la bailarina Flor Correa, en el rol de Cabrera; se expone como un ejercicio original y atractivo que brilla con argumentos propios, y que motiva el camino para una próxima incursión audiovisual sin necesidad de un pie forzado.
Sala 100: la consolidación del ícono de Artistas del Acero
Inaugurado a fines de 2020 y en medio del 62º aniversario de la Corporación Cultural Artistas del Acero, la Sala 100 se ha transformado en uno de los nuevos escenarios imperdibles de la escena penquista.
El escenario, de 62 m2 a nivel del piso, reemplazó las antiguas instalaciones de la corporación, las cuales comenzaron a quedar obsoletas frente a los requerimientos técnicos y espaciales que demandaban los diversos montajes que llegaban al lugar.
Obra del arquitecto Carlos Inostroza, las obras del espacio se extendieron de enero a noviembre de 2020 y contó con una inversión cercana a los $179 millones.
"Toda mejora de infraestructura para nosotros es importante, pero también lo es para el mundo artístico, porque está para ellos. Genera espacios dignos para el trabajador de la cultura, que es el artista", señaló el gerente de la corporación cultural, Arnoldo Weber.
Luego de estar cerrado por 17 meses, fue en agosto pasado cuando Artistas del Acero reabrió sus puertas -luego del estallido social y los momentos más álgidos de la pandemia- y con ello la Sala 100 también comenzó a recibir público.
Albergando conciertos de diversos géneros musicales, montajes de obras de teatro y otras actividades, el espacio encamina su 2022 para continuar abriendo sus puertas a la recepción de diversas expresiones artísticas.
Con ello el escenario de la Sala 100 se transforma en uno de los nuevos espacios a conquistar por parte de los artistas que visitan la zona.
Música y mujeres: Talcahuano y el primer concierto masivo en pandemia
Sin duda, la música en vivo sufrió un gran golpe tanto con el estallido social como con las duras restricciones impuestas por la pandemia.
Artistas, técnicos, productores y demases quedaron sin su fuente laboral, al mismo tiempo que el público quedó huérfano de vivencias esenciales en el diario vivir del público penquistas, acostumbrado siempre a la música en vivo.
Es así que, el pasado 7 de agosto y luego de más de un año y medio sin música masiva en vivo, Espacio Marina -en Talcahuano- fue el escenario escogido para el regreso en grande de los conciertos a Chile.
En esta ocasión, las protagonistas fueron tres mujeres: Camila Moreno, junto a las locales Dulce y Agraz y Valiente.
Bautizado como "Teatro Bodeguita Al Aire Libre" y reuniendo a más de 650 personas, uno de los organizadores fue el reconocido productor local Daniel Gómez.
"Estuvo todo bajo lo planeado, por suerte. El público se comportó de una manera muy muy buena. La evaluación de parte del personal de salud que estaba ahí fue muy positiva y con el tremendo show la gente quedó súper feliz, así que fue una jornada redonda", destacó.
El evento requería el porte obligatorio del pase de movilidad, el uso de mascarillas en todo momento y la no interacción entre los asistentes.
A partir de ahí, tanto el propio Gómez como otros productores locales, comenzaron a traer cada vez más conciertos en vivo. Si bien la normalización completa aún no llega, ya que continúa habiendo restricciones de aforo, ciertamente el evento fue un exitoso experimento y el puntapié inicial para el regreso del público a los escenarios.