Advierten riesgos por niveles de concentración de THC de cannabis vendida en la Región
A través de los análisis se identificó que existen una gran variedad de concentraciones del compuesto psicoactivo de la marihuana, lo cual puede implicar graves riesgos a la salud de los consumidores.
Con altos promedios de concentración de tetrahidrocannabinol (THC), casi nula presencia del compuesto que entregaría beneficios medicinales (CBD) y con trazas de toxicidad. Estos fueron los principales resultados del primer estudio realizado a nivel nacional que analizó diversas muestras de cannabis que circulan en el país. A raíz de estos resultados, la principal preocupación radica en que las personas no pueden tener certeza de lo que consumen, situación que se agrava al considerar el aumento de los menores de edad que utilizan este tipo de drogas ilícitas.
A través de un estudio realizado por el Instituto de Salud Pública, la Fiscalía Nacional y Senda, este año se analizaron 490 muestras de cannabis que fueron incautadas entre octubre de 2019 y abril de 2021 en diferentes hechos delictuales a lo largo del país, lo que permitió detectar tres componentes, el tetrahidrocannabinol (THC), Connabidiol (CBD) y Cannabinol (CBN).
Según detalló el director regional de Senda, Jorge Bastías, la importancia de este estudio es que no se habían realizado otros que permitieran conocer la composición química del cannabis que circula en el país, cuya relevancia radica en que es la droga ilícita de mayor consumo tanto a nivel nacional como regional.
"Tenemos un alto porcentaje de personas que consumen marihuana, y lo peligroso es que no es posible interpretar la existencia de una dosis única en el país, por lo tanto, una persona que compra marihuana a menudeo, por ejemplo, puede consumir droga con índices mínimos de THC, generando pocos efectos alucinógenos, pero también otra persona puede consumir marihuana con concentración superior al 80% de THC, existiendo el riesgo de generar una crisis importante en el organismo", detalló Bastías.
Según el director, estas diferencias en las concentraciones se evidencian también en los controles Tolerancia Cero, donde asegura que han "descubierto a muchos más conductores bajo los efectos de las drogas (ilícitas) en comparación a los que lo hacen bajo el efecto del alcohol, siendo la marihuana la principal detectada". Explica que esto se produce exactamente porque las concentraciones de psicoactivos no son las mismas en la droga que cada conductor consume.
MENORES DE EDAD
Si bien el consumo de esta droga se evidencia en los distintos grupos etarios, Bastías enfatizó el problema incipiente que se puede generar en los menores de edad.
"En la Región del Biobío un 28% de jóvenes entre octavo y cuarto medio nos indican que en el último año han consumido marihuana, por lo tanto, es peligroso si a estos niños obtienen marihuana con altas concentraciones de THC, pues genera un poder alucinógeno riesgoso y también dependencia a los efectos que produce su consumo", detalló.
A través del seguimiento que se realiza con el plan Elige Vivir sin Drogas, el servicio regional ha detectado que la edad de inicio del consumo de drogas, ya sean lícitas como el alcohol o ilícitas como el cannabis, es entre los 12 y 13 años, aumentando considerablemente desde los 15, donde los adolescentes cuentan con mayores libertades.
"Si ya tenemos un problema con el alcohol, cuya venta está dirigido a los mayores de edad y aun así lo están consumiendo los menores de edad, con el cannabis que es ilegal, que no tienen ningún control ya está siendo consumida por los más jóvenes", manifestó Bastías.
DETALLES DEL ESTUDIO
El estudio nacional se realizó para tener evidencia científica local sobre la tendencia internacional hacia el aumento de la potencia del cannabis disponible en el país, considerando su alto nivel de consumo, especialmente en la población escolar.
Estudios de Senda indican que en Chile ha disminuido el uso de la marihuana "prensada" y ha aumentado el de "alta potencia", lo cual puede implicar un alza en la cantidad de personas que necesiten un tratamiento de su consumo.
El análisis arrojó como resultado que el compuesto de la planta a la que se le atribuyen propiedades terapéuticas (CBD) sólo se detectó en 4 muestras, pero con concentraciones menores al 2,5%, siendo una de ellas obtenida en el Biobío; que el compuesto psicoactivo con poder tóxico (CBN) fue detectado en 47 muestras, siendo la segunda con mayor concentración también procedente del Biobío.
Además, en cuanto al THC, que causa la mayoría de los efectos adictivos y psicoactivos, se detectó en todas las muestras analizadas con un promedio de concentración del 17%. No obstante, 14 muestras de marihuana prensada presentaron concentraciones superiores al 80% y 5 muestras que sobrepasan el miligramo de THC por miligramo de muestra.
Sobre esto, Bastías explicó que en la marihuana actualmente está siendo prensada con la misma resina y aceite de los restos que no se utilizan de la planta, por lo que pueden generar mayor adicción, concentraciones de THC, así como probabilidades de dependencia y efectos psicoactivos.
28% de jóvenes entre octavo básico y cuarto medio ha consumido marihuana en el último año, según estudios de Senda.