Por Redacción

Con una homenaje a los fallecidos durante la pandemia y un marcado llamado a rechazar la corrupción y las malas prácticas, ayer el arzobispo de Concepción, Fernando Chomali, encabezó el Te Deum de Fiestas Patrias en la Catedral penquista.

A la misa asistieron autoridades regionales, así como también parlamentarios de diversas corrientes políticas y representantes de distintas instituciones.

Durante la ceremonia de acción de gracias, el arzobispo oró por los fallecidos por el covid-19. "Son muchos en el mundo y en Chile. Nos duele cada uno y rezamos por ellos y sus familias", dijo, teniendo especiales palabras para el exdirector del Servicio de Salud Concepción, Carlos Grant, por quien solicitó un minuto de silencio.

También recordó a las víctimas de la violencia, asegurando que "es un fracaso de la sociedad porque fue incapaz de resolver los conflictos y situaciones de injusticia que se arrastran por siglos, con el diálogo, la razón, la buena fe, la verdad, la justicia y la reparación".

Durante la ceremonia se mantuvieron todas las medidas sanitarias correspondientes, así como también se realizaron trasmisiones en vivo desde el templo católico.

NO A LA CORRUPCIÓN

El arzobispo Chomali aseguró que junto con dar gracias el país vive un momento en que es necesario meditar hacia adelante, sobre todo teniendo presentes los grandes desafíos que actualmente se están viviendo.

"Lo primero, con claridad, sin ambigüedades y de manera rotunda, aquí, delante de Dios y la comunidad, digamos un rotundo no a la corrupción", sostuvo.

Añadió que el daño que ha hecho "el amiguismo, cohecho y fraude al fisco, favoritismo, colusión, perjurio, abuso, elusión de impuestos, evasión de impuestos, inscripciones electorales cuestionadas cuestionamiento a instituciones electorales y técnicas, es inconmensurable". Afirmó que se trata de situaciones que debilitan la fe pública, dañan la democracia, generan desconfianza y además dan un mal ejemplo a las futuras generaciones, ya que generan la sensación de impunidad.

"Urge un no rotundo a las prácticas ilegales e inmorales, así como sanciones ejemplares. Es un camino sin retorno que solo trae pobreza y violencia", manifestó Chomali.

La autoridad eclesiástica sostuvo que en las malas prácticas de algunos pocos, que generan pobreza, inequidades y falta de oportunidades, radica parte importante del malestar social. También expresó que "duele ver a quienes están llamados a servir, sirviéndose de los demás"

MOMENTO CRUCIAL

Además, en su intervención Chomali manifestó que "llegó la hora de no mirar tanto la paja en el ojo ajeno sino que la nuestra propia viga. Este mandato evangélico vale para todos, de modo especial para quienes tenemos mayores responsabilidades".

Por último, agregó que Chile vive momentos cruciales, debido al proceso para redactar una nueva Constitución y a las próximas elecciones. "Es una gran oportunidad para sacar el alma de Chile amante de la democracia, de la familia, de la vida, de la paz, de la prosperidad. Llegó la hora que cada acción personal, comunitaria, política, social, económica y religiosa tenga la mirada puesta en que los que están al borde del camino".

PRÓXIMAS ELECCIONES Y CANDIDATURAS

Durante la homilía, el arzobispo Chomali se refirió a las próximas elecciones de noviembre, afirmando que se trata de una gran oportunidad para escuchar propuestas que inviten a pensar en un proyecto país.

"No es el momento de la división ni del cálculo pequeño, La pandemia nos enseñó que somos frágiles y vulnerables y que nos necesitamos mutuamente", afirmó

En esta misma línea, pidió a los candidatos a altas responsabilidades políticas que no se critiquen los unos a los otros, que cuiden su lenguaje, que den ejemplo de buen trato, de capacidad de gestión y una intachable vida personal y pública. "Necesitamos ejemplos que nos abran las puertas a la esperanza que le dejaremos a las futuras generaciones un país mejor que el que recibimos", cerró.