En el Senado se encuentra el proyecto de ley que prohibirá y sancionará fumar en playas, ríos o lagos, así como lanzar colillas de cigarrillos en las calles y espacios públicos, con lo que se espera aminorar la contaminación. La iniciativa ya pasó por la Cámara de Diputados y ahora será analizada por la Comisión de Medio Ambiente y Bienes Nacionales en su segundo trámite constitucional.

El proyecto llamado "Chao colillas", modifica la ley 19.419, para facilitar el reciclaje del tabaco y derivados, introduce cambios en el Código Penal para proteger el ambiente y fija multas de una a cuatro UTM ($ 52.000 y 200.000) a los infractores por botar filtros y colillas en la vía pública, y en espacios al aire libre, sean éstos públicos o privados. Asimismo, establece que los filtros y las colillas de los cigarrillos que se comercialicen dentro del territorio nacional deberán ser fabricados con materiales biodegradables.

En el caso de la prohibición de fumar en playas de mar, ríos o lagos, la fiscalización corresponderá a la policía marítima, fluvial y lacustre y, en caso de constatarse alguna infracción, ésta se deberá denunciar ante el juez respectivo. Sin embargo, el proyecto indica que cualquier persona también podrá denunciar en forma documentada el incumplimiento de las obligaciones, imponiéndose así la denominada denuncia ciudadana.

Se recuerda también que el 10 de diciembre de 2018 comenzó a regir la ley que modificó el Código Penal y tipificó como falta ensuciar playas, riberas de ríos o lagos, reservas y parques nacionales, monumentos naturales u otras áreas de conservación de la biodiversidad declaradas bajo protección oficial. La medida busca sancionar un mal hábito individual que repercute y ocasiona daño a la comunidad en general y, a la vez, permite educar a la ciudadanía respecto del cuidado al medio ambiente. Para ello, se dio atribuciones a Carabineros para realizar la fiscalización, pero también se asignó responsabilidad a los funcionarios municipales y ciudadanos que puedan hacer denuncias documentadas en el caso de que sean testigos de estas infracciones.

La Región del Biobío no escapa a estos problemas de tipo ambiental, sobre todo cuando se analiza la contaminación del mar y de los ríos. A eso, se agrega la poca conciencia en la disposición de las basuras, lo que exige acciones concretas para comenzar a remediar los perjuicios y transformaciones ocasionados, porque las futuras generaciones así lo exigen.

El debate sobre el tema ecológico crece y así también se desprende de los movimientos sociales que han puesto de relieve estas discusiones. Sin embargo, más allá de los grandes temas medioambientales, existen aquellos particulares o menores, pero no por ello menos importantes, confinados a las comunidades, en las que la conciencia ecológica es escasa o no existe. Están desde quienes lanzan basuras a los ríos, lagunas o al mar, o incluso quienes tiran a diario sus desperdicios en la calle. Cada temporada de verano, especialmente, exige una preocupación aún mayor, considerando que con frecuencia los grupos familiares van a playas, ríos y parques y no se preocupan de dejar limpios esos lugares. Pero éste no es un problema que afecte sólo a los recursos acuáticos. Los microbasurales nacen también en sitios abandonados en las ciudades y a orillas de las carreteras.

Iniciativas como éstas pretenden generar conciencia ciudadana respecto a la responsabilidad social que se debe tener con la mantención de un ambiente limpio en los espacios públicos. Podría pensarse que estas iniciativas podrían tener un efecto más bien simbólico, ya que es difícil que se realice efectivamente una fiscalización -por poca disponibilidad de personal- y que se genere un cambio de conciencia en la sociedad, cuando parte de ésta carece de educación ambiental. Sin embargo, iniciativas como éstas pueden ayudar a internalizar la necesidad de cuidar los recursos de la naturaleza.

El proyecto "Chao colillas" modifica la ley 19.419, para facilitar el reciclaje del tabaco y derivados, introduce cambios en el Código Penal para proteger el ambiente y fija multas de una a cuatro UTM por botar filtros y colillas en playas, calles y en espacios al aire libre, sean éstos públicos o privados.

En el último tiempo hemos sido testigos de diversas situaciones donde el lenguaje ha tenido que reconvertirse para no "incomodar" a ciertos grupos de la sociedad. Es así como surge una suerte de "ministerio de la verdad" que viene a fiscalizar y detener a quienes osan utilizar cierto tipo de palabras, consideradas como indeseadas e incómodas.

La polémica más reciente guarda relación con un famoso dulce que debió modificar el nombre impreso en su empaque por considerarse arbitrario y discriminador. Sin embargo: ¿Será que esta realidad contribuye efectivamente a la no discriminación? ¿Podrá el "cambio de nombre" transformar nuestra sociedad y hacerla más inclusiva? Estoy profundamente convencido de que no lo conseguirá en lo más mínimo, prevaleciendo el espíritu de contracción que ha permitido que estas y otras situaciones sigan cohabitando como de costumbre.

George Orwell, novelista y critico británico (1903-1950) afirma en su texto 1984 que: "Cada año habrá menos palabras y el radio de acción de la conciencia será cada vez más pequeño. Por supuesto, tampoco ahora hay justificación alguna para cometer un crimen por el pensamiento. Sólo es cuestión de autodisciplina, de control de la realidad. Pero llegará un día en que ni esto será preciso".

A todas luces, estamos frente a una "sociedad hipersensible" que se ofende con facilidad y frente a la cual resulta improbable una mirada alternativa, pues la legitima expresión de lo distinto (entendida como el no estar de acuerdo en algo) lleva directamente a la hoguera y a la condenación eterna. Curiosamente estamos frente a una tolerancia que no se tolera a sí misma, una suerte de salvajismo o casa de brujas en la que perecen quienes buscan preservar el sentido común.

Respecto a los enfoques de la sociedad actual, me hace sentido el referirla como "una sociedad orweliana" es decir, una donde "el gran hermano" cumple un rol de suprema vigilancia y donde no podemos estar tranquilos ni un solo segundo con lo que hacemos o decimos, pues siempre habrá un juez que pueda imponerse con fuerza para expresarnos que lo que hemos dicho o hecho no está del todo acertado. Citando a Orwell: "Si el líder dice esto no ocurrió, pues no ocurrió. Si dice que dos y dos son cinco, pues dos y dos son cinco. Esta perspectiva me preocupa mucho más que las bombas".

Resulta interesante reflexionar sobre las causas que llevaron a que estemos donde nos encontramos en la actualidad, pues a todas luces se trata de un fenómeno que hemos venido experimentando desde hace un largo tiempo y que responde a un cierto malestar de la cultura. Por otra parte, me preocupa el que podamos caer en el extremo de no poder expresar lo que pensamos, pues si lo hacemos y no parece haber un consenso generalizado seremos silenciados ipso facto.

Citando a Orwell: "Era de la patrulla de policía encargada de vigilar a la gente a través de los balcones y ventanas. Sin embargo, las patrullas eran lo de menos. Lo que importaba verdaderamente era la policía del Pensamiento". ¿Hasta qué punto somos víctimas de una policía del pensamiento? ¿No resulta contradictorio que en la "sociedad de las libertades" sea donde menos libres somos? Dialogar y revisitar estas problemáticas resulta tremendamente interesante, para dilucidar en parte los destinos que tendrá nuestro país, particularmente en estos tiempos donde las decisiones que se toman buscan acomodarse a las circunstancias, dejando de lado la tan anhelada objetividad.

"Surge una suerte de 'ministerio de la verdad' que viene a fiscalizar y detener a quienes osan utilizar cierto tipo de palabras, consideradas indeseadas e incómodas".

Escasez de agua

La ciencia lo ha advertido por años, pero ningún gobierno le ha dado importancia a la crisis del agua, al menos no con las soluciones que realmente se necesitan. Es hora de trabajar con los ojos mirando hacia adelante y no sólo hacia la punta de los pies. Un país sin agua es un país que se muere. Chile se está muriendo y esto continuará empeorando hasta que tomemos las medidas correctas y resolvamos la crisis hídrica que nos azota.

Pablo A. García

Adultos mayores

Que todos tengamos un trato digno está explícito en la Declaración Universal de los DD.HH. Sin embargo, distintos grupos de la población sufren vulneraciones y en el caso de las personas mayores hay cifras preocupantes. Esta realidad debe inquietarnos ya que una de las pocas cosas que trasciende el nivel educacional, económico y político es la irreversibilidad del envejecimiento. Datos del Servicio Nacional del Adulto Mayor informan que el 2020 las consultas por situaciones de vulneración aumentaron un 366% en personas mayores. Maltrato a las personas mayores es cualquier acción u omisión que produce daño y vulnera el respeto a su dignidad y el ejercicio de sus derechos.

Camilo Vargas

Presos políticos

La condición de presos políticos de quienes permanecen privados de libertad a raíz del estallido social, no deriva de su actuar, sino del tratamiento sesgado, cruel y discriminatorio que han recibido del sistema penal. Sin duda, no es función de la Convención Constitucional resolver este asunto y quienes se muestren intransigentes y taimados al respecto, sólo lograrán el descrédito ante sus pares y ante la ciudadanía, la que votó abrumadoramente por el fin de la Constitución de 1980, entregándole el mandato de redactar una nueva y no otra tarea, a la Convención Constitucional.

Rafael Cárdenas

Incitación

Fabiola Campillay, llamó e incitó a la violencia y la destrucción, señalando que se quemara y destruyera todo. Así ocurrió en el Barrio Lastarria, en Santiago, donde cáfilas de delincuentes destruyeron todo a su paso. La justicia debió actuar de oficio y disponer la detención y junto con ello comerciantes y propietarios de los locales y viviendas afectadas entablar querella por daños e incitación a la violencia en contra de todos aquellos que resulten responsables.

CLAUDIO VALDÉS MUÑOZ

Emergencia en salud

El próximo gobierno será de emergencia en salud. Cerca de dos millones de personas están esperando por una consulta de especialidad. Una lista de espera quirúrgica jamás vista, en que el tiempo promedio para acceder a una cirugía está ya casi en los dos años. Innumerables casos de cáncer diagnosticados en etapa tardía, así como una cantidad inédita de garantías GES retrasadas. Incontables personas con padecimientos crónicos descompensados. Un impacto aún no debidamente mensurado en salud mental y en requerimientos de rehabilitación post pandemia. Esa es la realidad que deberá responder de manera urgente quien quiera liderar Chile en los años que siguen. El próximo Gobierno se encontrará también con grandes deudas, agravadas por la pandemia, en el ámbito de las determinantes sociales de la salud y de las inequidades, lo que obligará a hacer efectivo en el más breve período que la "salud esté en todas las políticas", de modo que pueda asegurarse de manera intersectorial condiciones sociales que posibiliten el acceso pleno a una alimentación y a ambientes saludables, y donde sea cada vez más costoso acceder al tabaco, al alcohol y a contaminar. Asimismo, el próximo Gobierno tendrá que promover una legislación que materialice un nuevo marco constitucional. Dadas las correlaciones políticas, seguramente la nueva Carta Magna propondrá una comprensión distinta de la salud a la vigente en la Constitución del 80 y exigirá la generación de leyes que posibiliten un sistema de salud universal y equitativo.

Osvaldo Artaza

Tenencia de armas

Los ciudadanos tienen el derecho a poseer y utilizar armas de fuego para poder defenderse de agresiones que pongan en peligro su vida, la de su familia o su propiedad; cumpliendo ciertos requisitos legales que sean razonables pero que no afecten este derecho en su esencia. Hay personas que piensan, de buena fe, que mientras menos acceso tenga la población a armas es mejor. Otras piensan así en conformidad con el postulado 10 del "Decálogo de Lenin" -conocido como "Manual para tomar el control de una sociedad": "Registre a todos aquellos que posean armas de fuego, para que sean confiscadas en el momento oportuno, haciendo imposible cualquier resistencia a la causa".

Adolfo Paúl Latorre

Violencia I

A raíz de una pregunta sobre la posibilidad de intervención estatal en la Araucanía producto del terrorismo allí existente, la presidenta de la convención, Elisa Loncón, tuvo la desafortunada iniciativa de mencionar a Nelson Mandela para referirse a que no posee sus estándares para pedir que se bajen las armas. Esta clase de comentarios dejan en clara evidencia a ciertos grupos, a los cuales les pesan más sus instintos dictatoriales junto a su ideología que sus reconocidos estudios internacionales y sus credenciales democráticas. El auge de la violencia es una realidad que viven miles de chilenos y la sociedad debe condenarla y entender que relativizarla o entenderla como un medio para cierto fin solo es el camino seguro a la destrucción institucional.

Pilar Lorenzoni

Violencia II

Clara está la magnitud del constante conflicto que ha permanecido durante los últimos años en la Región de la Araucanía, que pareciera no solucionarse. Durante este año, los actos de violencia han incrementado en un 94% con respecto al 2020, siendo evidente que las cosas no hacen nada más que empeorar. A su vez, la gente ya no se siente segura ni protegida. Yo no soy experto en el tema, sin embargo, me planteo la siguiente pregunta: ¿Cuál será el rol del Estado para solucionar este conflicto, siendo que hasta el momento todas las acciones que han tomado solo han agravado la situación?

Tomás Aguirre Ibáñez

La gran escasez de pollos faenados que afecta no sólo a Concepción sino a todo el país, es benéfica para algunas personas de campo que encontraron la oportunidad de llegar a la ciudad a vender sus gallinas y pollos.

Desde la zona rural de la provincia, en especial desde Santa Juana y Florida, están llegando personas con sus atuendos típicos, que recorren las calles ofreciendo su apreciada mercadería. La demanda es grande, de manera que a poco caminar la clientela abunda y muy luego se realizan las transacciones de las aves vivas.

Un plan de movilidad que desarrolla el Ministerio de Transportes incluirá más vías peatonales y mayor circulación de buses, a medida en que se vaya normalizando lentamente la situación de la pandemia de covid 18 y se levanten las cuarentenas. La primera etapa de programa incluye la conexión del sistema de ciclovías y la ampliación de zonas para caminar en el centro penquista. La ejecución será financiada con fondos del Programa de Mejoramiento Urbano de la Subsecretaría de Desarrollo Regional.

Se gestionará un aumento de las frecuencias de los microbuses, para evitar las aglomeraciones en los paraderos. Las autoridades señalaron que eso se complementará con la definición de horarios diferidos para reforzar los horarios en que las personas acuden a sus trabajos o a clases presenciales.