Australia seguirá confinada aunque vacune a todo el país
Solo tiene 923 muertos en toda la pandemia. La policía de Sydney, ciudad en cuarentena por un brote, pidió apoyo militar para hacer cumplir las restricciones.
Australia, uno de los países con menos contagios de covid-19 en el mundo, prevé mantener su política de estrictos confinamientos incluso cuando tenga a toda la población vacunada, según dijo el primer ministro, Scott Morrison, mientras que las autoridades regionales de Sydney endurecieron las restricciones por un brote.
Si bien Australia no supera las 34.000 infecciones y solo reporta 923 decesos desde el inicio de la pandemia, las autoridades regionales han mantenido la estrategia de decretar confinamiento tras detectar un mínimo brote, aunque los casos se cuenten con los dedos.
En el caso de Melbourne, vivió un confinamiento de 112 días por un brote de covid-19 detectado a mediados de año, que causó la mayor parte de muertes en Australia, mientras que la irrupción de la variante delta hace seis semanas en Sydney mantiene a unos 6 millones de habitantes confinados desde el 26 de junio hasta al menos el 27 de agosto.
A raíz de este brote, que acumula desde entonces unas 2.600 infecciones y 13 fallecidos, las autoridades regionales endurecieron aún más las medidas en Sydney, tras reportar 239 casos y dos muertes.
El gobierno de Nueva Gales del Sur le dio a la policía local poderes para cerrar negocios, obras de construcción y otros establecimientos si no cumplen con las medidas sanitarias. En este contexto, la policía del estado solicitó ayuda del Ejército para vigilar el cumplimiento de las medidas impuestas en Sydney.
El comisionado, Mick Fuller, informó que pidió al Ejecutivo de Camberra el despliegue de 300 soldados para "reforzar su presencia operativa" en la capital estatal y las comunidades aledañas, en donde habita casi un 25% de los habitantes del país oceánico.
En paralelo, el gobierno estatal también impuso el uso obligatorio de mascarillas al aire libre y redujo de 10 a 5 kilómetros, el radio de desplazamiento permitido en ocho municipios del oeste y suroeste de Sydney, que es el actual epicentro de los contagios.
VACUNA Y CONFINAMIENTO
En medio de la crisis, el Ejecutivo reforzó el plan de vacunación, que acumula dos meses de retraso y que espera completar para Navidad, poniendo énfasis en la inoculación de dosis Pfizer y de AstraZeneca en las zonas críticas de Sydney, a pesar de que la vacuna anglosueca solo está recomendada en el país para los mayores de 60 años.
"Ciertamente las vacunas ayudarán en los esfuerzos para contener la propagación de la variante delta durante el confinamiento. Pero por sí solas no detendrán los confinamientos", aseguró Morrison. Hasta ahora, 16% de la población mayor de 16 años está completamente vacunada.
"No puedo garantizar que no haya otros confinamientos", advirtió y dijo que aprendió la lección de ir "rápido y temprano" ante la virulencia de la variante delta.
El país mantiene sus fronteras cerradas desde marzo de 2020, al igual que Nueva Zelanda, y prevé abrirlas progresivamente para mediados de 2022.
En este ambiente, activistas antivacunas podrían salir nuevamente a manifestarse mañana después de su protesta del fin de semana pasado, donde algunos llegaron incluso a enfrentarse con la policía.
DISNEY PIDE MASCARILLA
En paralelo, y también producto de la variante delta que se expande rápidamente por el estado de Florida (EE.UU.), Disney anunció que desde hoy es obligatorio el uso de mascarillas en los medios de transporte y lugares cerrados de sus parques en Orlando, incluso para las personas vacunadas y trabajadores de los parques.
REINO UNIDO QUITA CUARENTENA A VIAJEROS VACUNADOS
El Gobierno británico anunció que eliminará a partir del 2 de agosto la cuarentena para los viajeros llegados a Inglaterra desde Estados Unidos y la Unión Europea (UE) , a excepción de Francia, que hayan recibido la pauta completa de vacunación en sus propios países. No obstante, al margen de dónde se haya obtenido la vacuna, todavía tendrán que hacer cuarentena los viajeros procedentes de zonas riesgo epidemiológico, según Reino Unido, como Francia, y países de América Latina.