Gobernador Díaz asume con promesa de acortar brechas y no financiar proyectos ministeriales
"Por largos años, las personas de las regiones queremos tener decisiones respecto de nuestros intereses a tiempo y de manera pertinente a las características de cada territorio", reseñó la nueva máxima autoridad en el Biobío.
Rodrigo Díaz Worner (54) asumió de manera oficial este miércoles como el primer gobernador de la Región del Biobío, tras ser electo en las urnas, en una emotiva ceremonia marcada por varios simbolismos, un aforo reducido y un mandato ciudadano de cambios que buscó reflejar en cada una de sus intervenciones como la primera autoridad regional.
Luego de jurar en el cargo -además de asumir la presidencia del Consejo Regional- el exintendente de la Región por el periodo 2014-2018- marcó la hoja de ruta de su labor por los próximos cuatro años en una intervención de exactos 30 minutos, con énfasis en reactivar el trabajo en base a la Estrategia de Desarrollo Regional (ERD), incorporar mecanismos de participación clara, y un llamado a los consejeros.
"Les quiero decir con honestidad que no voy a llevar a decisión de ustedes iniciativas o materias en que los ministerios nacionales nos pidan que complementemos y cofinanciemos las tareas que les corresponden a ellos. Espero la mayor dignidad, y decirles que financien ellos los computadores o materiales que necesitan, pero si voy a llevar la idea de generar cierres de brechas que existen y se sufren, pero de Santiago no se ven", comentó.
Tras la ceremonia, profundizó en los mecanismos con que se priorizarán proyectos, y mostró su preocupación por la baja ejecución del FNDR, que alcanza el 26%. "Faltan más atribuciones para quienes nos desempeñaremos como gobernadores, es una responsabilidad histórica el profundizar la toma de decisiones en el territorio y limitar el centralismo (...) Si un ministerio nos pide que le financiemos los computadores para sus funcionarios necesitan, el Gobierno Regional no está llamado a costear gastos operacionales u otras secretarías. Pero en aquellas materias en que haya un acuerdo entre el Gobierno Regional y central de que se deben llevar adelante, las dos partes podemos cofinanciarlos".
HOJA DE RUTA
En su primer discurso, Rodrigo Díaz planteó que "la tarea del Gobierno Regional es hacernos cargo de las inequidades en cada uno de los territorios, y para eso se necesita trabajar como cuerpo, como equipo. Primero nosotros, el Gobierno Regional, y para mí es la suma de voluntades del gobernador y los consejeros regionales".
"Contaremos con una serie de funcionarios mandatados a trabajar con ustedes, con los parlamentarios y alcaldes, con los que debemos materializar los acuerdos que logremos, para construir el bien común, en sencillo que los hombres y mujeres de esta tierra se sientan atendidos por su gobierno para ser más felices. El fin de la política es construir bien común, no lo olvido por un segundo", añadió.
Para ello, adelantó que su labor central estará enfocada en cuatro ejes -buen gobierno, reactivación, cohesión social y mejor calidad de vida- y que creará cuatro unidades: equidad de género, pueblos originarios, medio ambiente y participación ciudadana.
Sobre el proceso de descentralización que desembocó en su llegada al cargo, tras ser electo con más de 127 mil votos, el primer gobernador del Biobío añadió que "por largos años, las personas de las regiones queremos tener decisiones respecto de nuestros intereses a tiempo y de manera pertinente a las características de cada territorio. En este proceso especial, que se desencadena con el acuerdo en febrero de 2018 en el parlamento de crear gobiernos regionales autónomos, tenemos un inicio a un proceso. No hemos llegado por término, porque esta arquitectura aún se está construyendo".
"Podría haber estado más avanzadas, no lo está y tenemos dos opciones: lloramos, o agudizamos nuestra inteligencia para seguir avanzando. Yo opto por el segundo camino", añadió con un evidente tono de crítica y adelantó que trabajará junto a los demás gobernadores del país para avanzar en traspasos de competencias y recursos.
LAS SEÑALES
A la ceremonia que contó con un aforo reducido de 75 personas por la pandemia, arribaron sólo los consejeros regionales, y algunos invitados especiales, entre ellos el exsenador Hossain Sabag (DC), el exdiputado Marcelo Chávez (DC), los presidentes del Colmed Concepción Germán Acuña y de la Confusam Gabriela Flores, y el diputado PS -con aspiraciones senatoriales- Manuel Monsalve, entre otros cercanos a Díaz, mientras que alcaldes y parlamentarios siguieron la asunción de forma telemática.
La ceremonia comenzó con un discurso del intendente saliente, y designado delegado presidencial regional Patricio Kuhn, quien se mostró confiado de lograr un trabajo mancomunado con su compañero de oficinas.
"Este es un muy buen paso, la división del trabajo de la Región por un lado con el Gobierno Regional y por otro con el Gobierno central, y trabajando de manera coordinada es la manera de ir teniendo más atribuciones las regiones para ir autodeterminando su camino", expresó, quien apenas concluido su discurso abandonara el Salón Mural para arribar a su oficina habitual en el ala sur del cuarto piso.
Tras la ceremonia, Rodrigo Díaz compartió con sus jefes de división y cercanos, para luego acompañado de su esposa conocer la que finalmente será su oficina en el ala norte del edificio del Gobierno Regional, habilitada completamente para sus equipos de trabajo. "Esta foto se la tienen que llevar", mencionó sobre un retrato del Presidente Sebastián Piñera que aún colgaba en su oficina, que hasta el martes era ocupada por la Seremi de Gobierno Francesca Parodi.
Durante la tarde, visitó a vecinos de Carriel Norte para abordar soluciones viales y para esta semana tiene agendado reunirse con los alcaldes de las provincias de Arauco y Biobío, en sus primeros días como el gobernador del Biobío.