Alan Robinson suma dos hitos en su carrera: "Llacolén" y "Marvel Comics"
Mientras elaboraba proyecto educativo en San Pedro de la Paz, casa editorial norteamericana lo llamó para ofrecerle un desafío creativo.
En febrero pasado, la Corporación Cultural de San Pedro de la Paz, comuna en la que Alan Robinson vive desde 2014, le encargó un proyecto que, de inmediato, captó la atención del dibujante de 43 años.
El desafío, llevar al cómic "Llacolén la leyenda", tal como se llama esta obra de cuatro caras, cuyo lanzamiento está programado para hoy, al mediodía, a través de la redes sociales de la entidad cultural. Coincide con el inicio de las actividades del Día del Patrimonio en la comuna.
"Realmente resultó algo muy entretenido, porque hace tiempo tenía ganas de hacer un proyecto relacionado con nuestro país. Siempre he sabido que las historias de los pueblos originarios son súper atractivas, y cuando me invitaron hacer lo de Llacolén me puse contento por lo mismo, pues quería hacer algo con ello", reconoce el ilustrador, cuya carrera se ha relacionado preferentemente con el mercado norteamericano. Ello desde 2003, cuando publica "Lost Squad", para la editorial Digital Webbing.
En formato digital, el proyecto se enmarca en el programa Corredor Biobío, el que permitirá difundir la leyenda local entre niños, estudiantes y público en general.
También contempla un micro taller de tres sesiones con estudiantes de educación media del sector, en torno al cómics como herramienta educativa; además de la impresión en paneles para exhibir en la Casa de la Cultura y en otros lugares de la comuna.
Adaptación del relato de Oreste Plath (1973), la adaptación a la viñeta implicó una investigación por parte del autor lo cual, dice, fue gratificante en todo sentido.
"Muy rico, porque me tuve que adentrar en la historia de Llacolén y aprender, pues no la conocía mucho. Por lo mismo fue todo un desafío comunicar lo que iba aprendiendo de esta leyenda, que es una suerte de Pocahontas chilena", ilustra Robinson, quien también debió dejar algunos aspectos de la historia fuera por espacio que contaba.
Sobre los cursos, coordinados con la Daem sampedrina , estarán orientados a establecimientos educacionales de la comuna, tras lo cual los profesores incentivarán a sus alumnos a crear su propio cómic, ya sea de forma individual como en trabajo en grupo.
"Es enseñarles a los chicos de manera rápida y demostrarla que se puede hacer uno. El cómics como tal es muy atractivo, en ese sentido, por lo que debiera tener más presencia en el sistema educacional", señaló, destacando iniciativas como el Fondo del Libro para narrativa gráfica.
"Pero debiera haber más, aunque es harto (en Chile). El tema es que no se le da el valor a los narradores gráficos como debiera ser por lo que implica su realización, como cualquier otro trabajo", enfatiza el dibujante nacido en Coronel y chillanejo por adopción.
EL VUELO ES A MARVEL
Un año inolvidable será éste para Alan Robinson. Y más que por la pandemia, que marcará la historia global; sumado al desarrollo de una propuesta como Llacolén, el artista se mostró feliz por ser parte de Marvel Comics. La firma lo contactó en abril, para desarrollar una propuesta de la que no puede adelantar detalles todavía.
"No puedo decir nada, pero me tiene muy feliz. De alguna manera, es un sueño cumplido, porque desde chico quise trabajar con ellos (…) Siempre apunté a las dos grandes: Marvel y DC", señala.
-Y llegaste Marvel.
-Desde siempre he sido fanático de ellos, sobre todo del cómics de superhéroes. De hecho Spiderman es mi persona favorito.
Contó que hace unos 10 años que mandaba portafolios a la entidad norteamericana, hasta que llegó su momento. "Estaban buscando un proyecto que se adaptara a mi estilo y me llamaron para ver si quería participar", contó, relación que hasta ahora ha funcionado bien. "Han hecho correcciones de la historia, no del estilo lo cual me pone contento", agrega sobre una labor que por ahora lo tiene con tiempo completo.