Avances de la vacunación contra la influenza
El Ministerio de Salud inició el 5 de abril el plan de vacunación contra la influenza, que se extenderá hasta el 6 de junio, de acuerdo con un calendario de atenciones que rige para todo el país. Este año, se realiza en forma paralela al proceso de inmunización contra el covid-19.
La vacuna es gratuita para 8,4 millones de personas que están dentro de la población con más riesgo de sufrir complicaciones severas en el caso de contagiarse, es decir, los trabajadores de la salud, las personas de 65 años y más, los enfermos crónicos, los niños entre los 6 meses hasta quinto básico y las embarazadas. En nuestra Región del Biobío, se espera inocular a más de 700 mil personas durante esta campaña y a poco más de un mes de su desarrollo, se ha informado que la cobertura en la región llegó la semana pasada a 340 mil personas, el 46% del público objetivo.
El programa de vacunación del año pasado tuvo una gran cobertura y se alcanzaron cifras históricas, debido a que la población comprendió que la gripe podría significar que las personas quedarían más expuestas a contraer el coronavirus. Quienes se encuentran entre los grupos objetivos a los cuales está dirigido este programa han comprendido la necesidad de estar inmunizados para evitar que se potencien la influenza con la pandemia de covid 19, lo que agravaría aún más la emergencia sanitaria.
La gripe es una enfermedad contagiosa causada por el virus influenza, que se transmite desde una persona enferma al toser, estornudar o mediante las secreciones nasales. El virus causa infecciones respiratorias severas, hasta con complicaciones de gravedad, que pueden llevar a la hospitalización e incluso provocar la muerte. Ejemplos de complicaciones graves son la neumonía y la bronquitis severa. Asimismo, la influenza también puede ser causa de complicaciones de ciertas enfermedades como la diabetes, el asma y las enfermedades cardíacas o pulmonares.
La vacunación es la forma más efectiva de prevenir la infección y en especial en la población en situación más riesgosa, ya que son los que tienen mayor predisposición a contraer la influenza y presentar complicaciones. Esta vacuna es gratuita para las personas que están consideradas en el plan y no requiere orden médica, de manera que está disponible en todos los centros de atención primaria, de acuerdo con el calendario de atenciones, y en los centros de vacunación privados que tengan convenio con el Ministerio de Salud. Sin embargo, las personas que no están consideradas entre los grupos objetivos de riesgo, pueden adquirirla e inmunizarse en las farmacias, como ha ocurrido desde hace años.
En el año 2017 fallecieron por influenza 18 personas en la Región del Biobío, y que en 2018 hubo 8 víctimas fatales. La mayoría de los pacientes que murieron o que tuvieron que ser hospitalizados, pertenecían a grupos de riesgo y no se habían inmunizado, pese a los persistentes llamados que se hicieron y a que se extendió el plazo. Incluso en 2016 la enfermedad atacó con tal fuerza a adultos mayores y niños que no se habían protegido, que el Ministerio de Salud tuvo que declarar la alerta sanitaria en las regiones Metropolitana, de Valparaíso y del Biobío. Por ello, las medidas preventivas que se adopten ahora serán fundamentales para aminorar los efectos de estos virus.
El secretario regional ministerial de Salud del Biobío, Héctor Muñoz, ha señalado que en lo que va de la campaña se destacan altos porcentajes de inmunización del personal de salud privado y público, así como de adultos mayores de 65 años y de quienes conforman el grupo otras prioridades, en coherencia con el calendario de vacunación. Hay que prepararse para un escenario que podría ser muy complejo este otoño-invierno si no se toman y acatan las medidas de emergencia que se han dispuesto, entre ellas el llamado a inmunizarse contra la influenza, para evitar que los grupos de mayor riesgo pudiesen ser atacados por ambos virus, lo que agravaría los cuadros.
Hay que prepararse para un escenario que puede ser complejo este otoño-invierno si no se acatan las medidas de emergencia que se han dispuesto, entre ellas el llamado a inmunizarse contra la influenza, para evitar que los grupos de mayor riesgo pudiesen ser atacados por ambos virus.