Por Marcelo Soto Villegas

El fútbol no sabe de justicia y Fernández Vial es un ejemplo. El Almirante hizo casi todo bien está temporada para lograr el ascenso, sin embargo, al frente se encontró con un inspirado Lautaro de Buin que fue mejor y se quedó con el sueño.

Ayer el Almirante se despidió del ascenso con un empate 1-1 ante Deportes Colina, un marcador de sabor amargo, de esos resultados que se quieren olvidar con el tiempo.

Fernández Vial jugó a dos bandas ayer: con la mirada puesta en el estadio Ester Roa y en el estadio El Teniente de Rancagua. Allí Lautaro de Buin recibía a General Velásquez con dos puntos de ventaja en la tabla.

Vial comenzó ansioso, con la presión de los tres puntos, una que aumentó con los tantos del "Toqui" que obligaban a un triunfo.

El Almirante recién encontró algo de tranquilidad en el complemento. Buena jugada de Luis Felipe Pinilla por la banda, centro hacia atrás y Andrés Segovia anotó (68') el 1-0 y el de la esperanza. Con ese resultado todo se definía en la última fecha, no obstante, llegó el minuto 88 y todo se derrumbó. Gerson Martínez marcó para la visita el 1-1 en el final. En ese minuto toda atención se enfocó en Rancagua con un 2-1 del "Toqui" a favor. Pitazo final y Lautaro de Buin campeón.

LAMENTO VIALINO

"Desde el fondo de mi corazón les pido disculpas. No me gusta perder. Teníamos una tremenda responsabilidad. Nosotros nos ilusionamos, pero no basta con ser segundo, uno tiene que jugar para ser campeón, jugar para escribir la historia. Disfrutamos el camino, pero no cumplimos. Si nos toca estar acá la próxima temporada tenemos que ir por todo de cara al campeonato", indicó Claudio Rojas tras el encuentro.

El estratega vialino lamentó el resultado, uno que para él pasó por la ansiedad. "Hay tristeza. Llegamos hasta acá con una ilusión muy arriba. Siento que en el trámite del juego eso mismo nos llevó a ser muy ansioso en el juego, demasiado imprecisos. Aun así fuimos capaces de lograr dos situaciones clarísimas de gol. En el segundo tiempo pudimos generar un poco más de espacios desde las bandas hacia adentro, fue así como salió el gol. De ahí en adelante nos vimos consumidos por un estado ansiedad, de no tener la capacidad mental de jugar el partido sin la pelota", culminó.

Fernández Vial ahora enfrentará en la última fecha del torneo a Colchagua en calidad de forastero.

46 puntos alcanzó Lautaro de Buin a falta de una fecha. El Almirante tiene 42 positivos a lo largo del torneo.

Un rápido regreso a la competencia tuvo la Universidad de Concepción, después de su periplo por Buenos Aires, la semana pasada, donde disputó la primera burbuja de la Champions League Americas 2020-21. Un feliz retorno para los estudiantiles, quienes superaron, en la Casa del Deporte, a Municipal Español de Talca por 69-60, en un encuentro que se disputó el pasado domingo y estaba pendiente de la primera fecha de la Copa Chile.

"El balance es positivo, veníamos con un desgaste bastante intenso, tras haber jugado en Buenos Aires, debido al viaje, a los partidos y a todo el aparataje que hay de los protocolos, lo que agota demasiado y genera un estrés. Los partidos, además, fueron duros y volver sin descansar a las prácticas y asumir el partido del domingo, fue agotador", explicó el coach universitario, Cipriano Núñez.

El entrenador, además, comentó "el partido ante Español de Talca se dio muy bien en la apertura, a diferencia de los partidos anteriores en Copa Chile. Sin embargo, tuvimos una sequía en el porcentaje de concreción. Dentro de lo positivo, defendimos bien, duros, con buenos ajustes y leímos bien las situaciones perimetrales de ellos y controlamos".

El plantel, luego de la victoria, descansó ayer y hoy volverá a los entrenamientos, con el fin de alistar los duelos ante AB Temuco-Ufro y CD Valdivia, en condición de forasteros, duelos que se disputarán este jueves y viernes, respectivamente, a las 19 horas.

Con una victoria, el "Campanil" asegura su paso al Final Four, que se disputará en sede y fecha por definir. La única duda para ambos encuentros es Carlos Milano, quien sufrió un esguince grado 1 en el tobillo derecho. Estos días serán claves para determinar si el venezolano podrá jugar los últimos partidos de la zona B.

Huachipato ha tenido una temporada ingrata e impredecible en los resultados y también en la forma de jugar de manera colectiva. El partido del domingo, en la noche, frente a Cobresal fue un claro ejemplo, donde en El Salvador cayeron por 2-1, pese a tener dos triunfos seguidos en el campeonato nacional.

Una derrota que hace que el elenco chorero baje a la novena ubicación, salga de los puestos de clasificación a Copa Sudamericana y, a falta de dos jornadas para que termine el torneo, no dependa de sí mismo para obtener un boleto a copas internacionales. "No nos podemos hacer cargo de lo que pasó antes", manifestó Osvaldo Catalán, ayudante técnico del elenco siderúrgico.

"El grupo está dolido por el resultado y por la forma en que se perdió, pero tenemos la convicción para conseguir el objetivo, que es clasificar a Copa Sudamericana. El equipo está muy comprometido con nuestra forma de jugar", destacó Catalán, quien tuvo que hablar en conferencia de prensa, reemplazando al técnico Juan José Luvera, quien fue expulsado, finalizado el encuentro ante los mineros.

Este jueves, los de la usina buscarán quedarse con los tres puntos, unidades valiosas para cumplir con el objetivo de la temporada, frente a un rival siempre complicado y que viene en crecimiento, que es Palestino de José Luis Sierra. El cuadro árabe marcha cuarto con 50 unidades, con siete positivos más que los choreros. El encuentro se jugará a las 21 horas en el Estadio Huachipato CAP-Acero.