Yvinn, Carota, Carpentier y Arola: los cuatro cocineros de "Oye al chef"
El programa trata de enseñar preparaciones básicas y de alta gama a personas inexpertas.
Los jueves por la noche la cocina y el humor se apoderan de las pantallas de Chilevisión con "Oye al chef", la apuesta que pone a personajes conocidos bajo el mando a distancia de este team gastronómico para acometer diversas preparaciones, desde sopaipletos hasta tortellinis de centolla.
Hasta el momento han desfilado por la pantalla Pamela Díaz y Sigrid Alegría, Leo Rey y Benni. En el último capítulo hubo un duelo de actores: Eyal Meyer y Cristián Riquelme, guiados por Sergi Arola y Christopher Carpentier.
DIALECTO COCINERO
"De nuevo en estas tierras latinas" dice que está el chef Yann Yvin desde Santiago, luego de haber estado unos meses en Canadá y en Francia. "Fue muy grato poder regresar al equipo de siempre y empezar a grabar bajo severos protocolos de sanidad que nos dan mucha tranquilidad", explica.
-¿Qué te parece la experiencia?
-Es frustrante para un chef, tenemos que utilizar palabras no tan profesionales y estar muy atentos a si nuestra manera de explicar es la correcta. Entre cocineros tenemos un dialecto, pero con ellos hay que ser bien profe y enseñar. Ahí te das cuenta de lo difícil que es enseñar con palabras sencillas, y en mi caso alguna vez me enredo con el español y se me sale cualquier cosa.
Yvin, además, destaca el feedback de la gente: "Me gusta mucho cuando me escriben diciendo 'me lo reí todo, me duele la mandíbula y la guata, me hice pis encima de tanto reír, cuando recibo eso es el mejor de los regalos. Más en estos momentos difíciles que hay la necesidad de dar un respiro".
Corriendo en su cocina de Santiago, el chef italiano Ennio Carota agradece que hayan proyectos como los de "Oye al chef", donde "estamos encerrados, no hay mucho contacto ni gente. Dentro del formato además hay una cuota de humor, un poco de risa en este contexto, que lo pasemos bien durante una hora".
-¿Cómo es enseñar a inexpertos?
-Una es la parte divertida y otra es la parte que me frustra, porque tengo que lidiar con gente que no sabe hacer ni un huevo. Me dan ganas de ir a meter las manos, decirles allí mismo cómo es la forma correcta. Pero hay algo estimulante en ver cómo alguien inepto consigue preparar algo que se vea y sepa bien. Es lindo ver cómo alguien, que ni siquiera sabía hervir el agua, descubre un lado artístico, un talento oculto que lo hace decirse que no es tan malo para la cocina.
Por su lado, el español Sergi Arola cuenta que llegó a Chile el 11 de septiembre y estuvo en cuarentena hasta el 25. Sobre estar en un set de televisión bajo medidas sanitarias dice que ya lo vivió en España, con el programa "La última cena" por Telecinco.
"Acá cada uno jugamos un rol, cada uno tiene una manera de ser muy especial y al final, parafraseando con el fútbol, a mí me toca ser un poco el cruce entre el Loco Bielsa y Diego Simeone, soy el temperamental y apasionado. Evidentemente las recetas y la cocina son muy importantes pero lo más importante es la entretención".
Por su parte, Christopher Carpentier considera crucial el que sepan usar la tecnología de la que disponen: "Enseñarles cómo se ocupa el horno, a usar la batidora, la juguera, el vaso de inmersión, la procesadora; tratar de hacer una clase express mediante la receta que toca hacer".
FUTURO DEL RUBRO
Sobre el futuro del rubro gastronómico los chefs muestran diversas reflexiones. Para Carota, vivimos una etapa de transición y no se atreve hacer ninguna proyección de aquí a un año: "Llevamos la cosa en la medida que se nos presenta, nuestro restorán está funcionando en la terraza y vamos evaluando en la medida que pasan los días. Igual nos proyectamos a lo positivo, hay que seguir adelante y ver cuáles son las nuevas condiciones, acomodándonos a los que nos toca vivir".
Ariola agrega que "creo que nadie estaba preparado para lo que ha sucedido. Se va a ver muy a las claras qué tipo de sociedad somos y cuál queremos ser a futuro. El vector turístico es irrenunciable y debieran ponerse planes para proteger al sector. Pero también tengo la esperanza de que los que nos dedicamos a este rubro estamos muy vinculados a él, es muy vocacional y pasional y confío en lo que va a venir".
Yvin es tajante al decir que hay que ir en ayuda de las pymes, porque solas no van a sobrevivir. "Estoy muy cerca de la escuela hotelera donde los que estudian se preguntan si su carrera les servirá de algo, y yo les digo que sí, que les va a servir, solamente que van a tener que sobresalir, la palabra es excelencia, calidad, no la cosa a medias, no hay tiempo para lo mediocre, va a surgir la calidad".