Secciones

  • Portada
  • Opinión
  • Actualidad
  • Nacional
  • Economía y empresas
  • Tendencias
  • Deportes
  • Página del lector
  • Clasificados
  • Defunciones
Secretario regional ministerial de Salud de Biobío, Héctor Muñoz:

"Mi idea es terminar de seremi junto al mandato del Presidente; las otras proyecciones no son tema"

El titular de la Autoridad Sanitaria dijo que ahora está concentrado en el combate del covid-19 en la Región. Afirmó que tiene una buena relación con el ministro Enrique Paris, aunque reconoció que fue el intendente y no él quien le manifestó al secretario de Estado el rechazo local al plan "Fondéate en tu casa", que en un inicio permitía reuniones en comunas en cuarentena durante las Fiestas Patrias. Agregó que no se ha sentido discriminado por ser evangélico y tampoco por ser químico farmacéutico y no médico.
E-mail Compartir

Por Alma Canales Silva

Cuando asumió como seremi de Salud, el 14 de diciembre de 2018, Héctor Muñoz Uribe dijo que su modelo a seguir era el de Rosa Oyarce, en ese entonces secretaria regional ministerial de la Región Metropolitana. Ella era una autoridad fiscalizadora y eso era lo que quería aplicar el químico farmacéutico de la Universidad de Concepción. Cuando dijo eso, claro, no pensó que esa fiscalización iba a incluir el uso de mascarillas, la distancia física en las filas, la implementación de protocolos de seguridad para prevenir el coronavirus en las empresas o que las personas con la enfermedad se mantengan en sus casas durante los 15 días que son considerados como casos activos. "Toda la Seremi se volcó a hacer fiscalizaciones por covid-19", reconoció.

La exposición que le ha dado la enfermedad al militante de Renovación Nacional ha hecho que la gente lo reconozca en la calle o en el supermercado, al que va con su respectivo permiso y siempre usando mascarilla, aclaró. "La gente te reconoce más por la exposición mediática, y hay personas que se nos acercan a hacer recomendaciones, que se fiscalice algún lugar. Nos hacen muchas preguntas, sobre todo cuándo se va a terminar esto", detalló.

Eso sí, Muñoz recalcó que su objetivo es visibilizar el trabajo de su cartera, en general. No quiere que se personalicen los logros y por eso siempre se hacen actividades y vocerías con los jefes de departamentos.

Al momento de esta entrevista, el seremi se preparaba para los controles por Fiestas Patrias. Dijo que esperaba que las personas respetaran las medidas restrictivas para así levantar las cuarentenas en algunas de las 13 comunas de la Región que ahora están con esa medida restrictiva, propia de la fase 1 del plan Paso a Paso. Sin embargo, sólo el viernes se iniciaron 14 sumarios sanitarios a familias que viajaban a su segunda vivienda.

"Lo que más nos ha costado en época de pandemia es hacer entender a la ciudadanía que tiene que generar un hábito de prevención contra el coronavirus. No tenemos fiscalizadores ni carabineros por cada habitante. Somos la región que tiene más detenidos en el país en cuarentenas y horario de toque de queda. Es la cifra que sacamos con el intendente, en proporción a la cantidad de habitantes", mencionó.

-¿Qué cree que explica esto? ¿Puede ser que la Región estuvo bien durante muchos meses y ahora se relajó?

-Durante cuatro meses y medio estuvimos en una situación relativamente controlada, recibiendo cerca de 100 pacientes de la Región Metropolitana y de otras regiones. Después de tanto tiempo sin medidas de confinamiento -de hecho, las únicas medidas que tuvimos fueron en San Pedro y Hualpén al inicio de la pandemia-, lo que percibimos como autoridad sanitaria es que la ciudadanía le perdió miedo al virus. Esperamos que con todo lo que está pasando, con 13 comunas en cuarentena, la ciudadanía entienda y siga las recomendaciones de las autoridades. En una pandemia, donde el virus es muy transmisible, lo único que puede frenar la enfermedad es el autocuidado.

-Las cuarentenas muy largas pierden efecto. La gente después empieza a salir y hace otras actividades. Si la cuarentena es en invierno, no es tan complicado porque hace frío y llueve, pero ahora empieza a salir el sol, hace calor, tenemos hartas playas. ¿Han evaluado ese escenario?

-Las comunas que tuvieron en invierno más casos fueron las del norte del país, donde no había lluvia ni frío. Ahora empezamos a aumentar los casos. Sabemos que las personas quieren salir, como ahora en las Fiestas Patrias, quieren estar al aire libre, hacer deporte y esa es una complicación mayor.

En Argentina partieron con pocos contagios, hicieron una cuarentena muy estricta al inicio (que fue hasta comienzos de agosto) y ahora empezaron a aumentar los casos. Ellos ya superaron los casos de fallecidos del país y de contagios. Cuando la cuarentena es muy anticipada, prolongada, o ambas, como pasó en Argentina, la gente después no la cumple y cuando se necesita esa herramienta, no está disponible, o si se decreta, la ciudadanía tiene otros problemas, de salud mental, las personas mayores tienen atrofia muscular y necesitan desconfinarse casi por una necesidad. No podemos estar un año en cuarentena, las medidas de confinamiento no pueden ser indefinidas, porque se generan efectos, y además la gente no cumple las cuarentenas cuando son muy largas.

-Hay distintas opiniones sobre la implementación de cuarentenas...

-Sé que hay muchas opiniones, pero creemos que esta es una medida que no puede adoptarse muy anticipadamente. En San Pedro y Hualpén al inicio se implementaron cuarentenas cortas y los casos bajaron. En Penco, a un mes de las cuarentenas, o en Tomé, vemos también que los casos están bajando. Eso pasa en general en las comunas en cuarentena. Los casos se estabilizan y después empiezan a bajar en esas comunas, no como en otras regiones del país, donde a pesar de las cuarentenas los casos iban subiendo. Queremos tener cuarentenas cortas, pero eso lo vamos a evaluar después de las Fiestas Patrias. Queremos ver el comportamiento de la ciudadanía. Si se comporta, la tendencia a la baja va a seguir. Si hace reuniones familiares o con amigos para Fiestas Patrias, que están prohibidas en cuarentena, nuestra proyección va a ser distinta.

El polémico "fondéate en tu casa"

-¿Su relación con el ministro como es? El intendente contó que tenía una relación bien cercana con él. ¿Usted también?

-Con el ministro y la subsecretaria de Salud Pública la relación es súper fluida. Ellos nos orientan en los temas nacionales y nosotros hacemos la implementación de los temas locales. El ministro contesta de inmediato el teléfono y si no contesta, devuelve el llamado. La subsecretaria hace videoconferencias permanentemente. Nosotros llamamos bastante por teléfono.

-¿Cómo vivió este conflicto que se produjo entre el ministro Paris y el intendente por el plan "Fondéate en tu casa" porque se iba a permitir salir a la gente aunque estamos en cuarentena?

-La Región del Biobío tuvo una sola voz. Señalamos a nivel interno, como debe ser desde el punto de vista sanitario, que la Región iba subiendo los casos. Lo dije en las conferencias de prensa: lo más recomendable era que la gente no se juntara con amigos o familia que no fueran de su casa. Lo de las cinco personas en comunas en cuarentena no era recomendable y es lo que señalamos. Ante toda la discusión que se dio la ciudadanía entendió el mensaje y esperamos que sea así, que lo que la ciudadanía tanto aplaudió, que no se visitaran las familias en comunas en cuarentena, se respete. El equipo regional ha estado súper unido en las decisiones y el intendente, en su decisión personal, lo quiso hacer público. Nosotros lo hicimos de forma privada en el equipo. La forma fue distinta, pero estábamos todos en el mismo sentir a nivel nacional y por eso la medida se cambió.

-Primero hicieron un anuncio, después otro, después tuvieron que precisar la cantidad de personas que se podían juntar. ¿Hubo un problema de comunicación?

-Más que cómo se entendió al inicio, de verdad se anunció que en las comunas de cuarentena se podía invitar a cinco personas. Así se diseñó el plan. A la gran mayoría de los intendentes no les pareció, sobre todo los de regiones en cuarentena, que hicieron sus observaciones a la medida. Se hizo de forma interna, aunque el intendente Giacaman lo hizo público. Era bien complejo en comunas de cuarentena instalar esas reuniones, porque es difícil fiscalizar. Y después de todos los análisis, el ministro dijo que estaban dispuestos a corregir y se revirtió la medida.

-¿Y habló de eso con el ministro? ¿Le comentó lo que opinaba?

-En este caso lo hizo el intendente, pero en el equipo regional teníamos todos la misma opinión. Nos podía traer un rebrote en Fiestas Patrias, sobre todo en las comunas con más positividad, tasa de incidencias, circulación viral, que son las comunas en cuarentena. El gobierno escuchó, analizó y nos encontró la razón.

Figuración pública

-Su cargo es bien técnico, pero también es político. ¿Cómo cree que la pandemia ha influido en su imagen pública?

-Lo que veo en la calle es que la gente te reconoce más por la exposición mediática.

-En una entrevista se le preguntó si pensaba ser candidato y dijo que sí. ¿Eso todavía sigue siendo una posibilidad?

-No veo posibilidad de eso. Esta pandemia va a durar por lo menos un año más. Yo dependo del Presidente, el ministro de Salud, el intendente y ellos me dan la confianza para seguir, pero mi pretensión es terminar este trabajo de la pandemia. Mi idea es terminar de seremi junto al mandato del Presidente Sebastián Piñera. Las otras proyecciones no son tema ahora y las posibilidades de otras expectativas son nulas. No es el momento y no corresponde que la visibilidad de la autoridad sanitaria se use con fines electorales.

-Los brotes partieron en las iglesias evangélicas. Aparte de ser seremi, usted es parte de esas iglesias. ¿Cómo ha vivido esto?

-Fue palos porque boga y porque no boga. Unas iglesias se enojaron conmigo porque hicimos una restricción. Fuimos la región más restrictiva con las actividades religiosas, porque uno de los primeros brotes se generó en una iglesia en San Pedro. Fue porque la situación así lo ameritaba. Cuando esto dejó de ser un brote activo, ahí nos criticaron por levantar la restricción que nosotros mismos habíamos dado. Las decisiones que tomamos fueron desde el punto de vista epidemiológico. Mi religión no tuvo nada que ver con las decisiones que se tomaron sobre las iglesias.

-¿Cree que existe alguna discriminación porque es evangélico, o algún prejuicio?

-Espero que no. Estoy tranquilo porque todas las decisiones se han tomado por el equipo de forma técnica. Las campañas de educación sexual, fomentar el uso del preservativo, las hicimos desde el punto de vista de salud pública. Uno asume un rol como autoridad sanitaria y tiene que cumplirlo con las reglas del juego. Si hubiese puesto primero otros intereses que no fuera el interés general de la población no habría asumido y así lo hemos demostrado con todas las campañas. Creo que a veces hay críticas injustas, porque cuando uno entra al gobierno tiene que trabajar bajo las normas del Ministerio de Salud, los planes y programas y hay metas que cumplir y eso no tiene nada que ver con lo que uno piense o crea. No sé si hay cierto grado de prejuicio, pero se ha ido acabando. No me he sentido discriminado.

-¿Y en cuanto a su profesión? Hasta hace un tiempo atrás la mayoría de los seremis eran médicos y ellos son un gremio bien celoso con su profesión. ¿No ser médico le ha generado algún impacto?

-La malla curricular de los químico farmacéuticos abarca toda el área de salud, además de la fiscalización. Con Germán Acuña, presidente del Colegio Médico, tenemos una relación fluida y muy buena. Todas las profesiones de salud se respetan entre ellas. Por ser químico no he tenido ningún inconveniente. El respeto con los médicos ha sido de igual a igual y eso se agradece.

"No hay ninguna posibilidad de que no haya plebiscito"

E-mail Compartir

-¿Cómo vislumbra el plebiscito? Se llegó a decir incluso que lo que quería el gobierno con los permisos en Fiestas Patrias era que se diera un peak de la enfermedad, para que luego no hubiera votación. ¿Cree que están las condiciones para hacer un plebiscito como estamos en cuarentena?

-Hay teorías conspirativas, pero no las comparto. Acá se va a hacer el plebiscito sí o sí y esa es una indicación. Junto al Servel y las Fuerzas Armadas tenemos que hacer que las medidas de seguridad se cumplan en todos los locales de votación. Cada votante va a tener que llevar su lápiz, no va a estar la cortina de la cámara secreta, se va a sanitizar después del paso de cada votante. La única restricción es que las personas que son positivas (al covid-19) no van a poder votar para evitar un riesgo de contagio. No van a poder hacer una fila muy extensa. No va a poder haber aglomeraciones en la mesa de votación. Eso lo estamos coordinando. No hay ninguna posibilidad de que no haya plebiscito, a menos que haya otra decisión nacional.

-Pero desde el punto de vista sanitario, ¿cree que puede ser un foco de contagio?

-Ese día la gran mayoría del comercio va a estar cerrado. En los días de votación no hay tanta aglomeración en la locomoción colectiva. Va a haber un horario protegido para las personas mayores. El riesgo se está reduciendo al mínimo, independiente de la fase en la que estemos de la enfermedad.