Por EFE/Redacción

El Festival de Cine de Mujeres (Femcine) de Chile comenzó este martes su décima edición con una diversidad de inquietudes artísticas en la mirada de las cineastas que participan y una programación que aborda temáticas contingentes que tienen relación con la mujer.

El evento ofrecerá hasta el próximo domingo una amplia mirada al cine hecho por mujeres en el mundo.

La versión vía streaming de Femcine tiene acceso liberado y se pueden ver las películas a través de su página web femcine.cl, donde está también toda la información de la muestra.

Durante esos cinco días se podrán no solo conmemorar los 10 años del nacimiento de un festival que busca visibilizar a las mujeres frente y tras de cámara, sino también dialogar en los espacios de cine foro y revivir las historias encarnadas por "divas" chilenas.

"Creo que una cosa muy bonita que tiene esta edición del festival es que tenemos un diálogo entre el presente del cine hecho por mujeres y su pasado", contó la directora de Femcine, Antonella Estévez.

"Se hizo un esfuerzo para tener en este festival varios hitos que permitieran reconocer la participación de mujeres en distintos momentos del cine", ahondó.

Una década de cambios

Eran finales del año 2010, en el marco de la realización de otro festival, Chile Reality, cuando Sandrine Crisostomo, la directora de ese festival, se acercó a una de las mesas donde se encontraba Estévez junto a otras futuras fundadoras de Femcine y les planteó la idea: hacer un festival de cine de mujeres en Chile. "A ninguna de nosotras se nos habría ocurrido en ese momento", contó la directora del certamen.

"Cada una de las siete mujeres que originalmente partimos haciendo este festival teníamos dos valores fundamentales: celebrar y difundir el cine hecho por mujeres", agregó, para luego plantear que ha habido cambios en el contexto: "Probablemente lo que ha cambiado es el contexto y un mundo donde el movimiento feminista ha adquirido cada vez más presencia y más voz".

Películas de la muestra

Tras el inicio ayer con la proyección de "Be Natural: The Untold Story of Alice Guy-Blaché", de Pamela B. Green, en la muestra se emitirán seis filmes en la competencia internacional de largometrajes, 12 películas en la competencia internacional de cortometrajes, 11 piezas en la competencia nacional de cortometrajes, cinco en la sección Panorama Internacional y otras dos en la sección Ellas por ellos.

A eso se suma una categoría especial de tres filmes clásicos chilenos dedicados a las "Divas: Actrices chilenas trascendentales": "La casa en que vivimos" (1970) con Carmen Barros, "La casa está vacía" (1945) con Chela Bon y "La dama de las camelias" (1946) con Ana González.

La historia es contada por Jordi évole, periodista amigo del cantante de Jarabe de Palo, fallecido el 9 de junio pasado: "20 días antes de morir, me llamó Pau Donés: 'Me quedan muy poquitos días de vida y quiero pasarlos en mi casa de la Vall d'Aran. Me gustaría que subieses y pudiésemos grabar una charla'. El resultado es este documental".

El camino de Donés había sido duro desde que en 2014 le diagnosticaron cáncer de colon. Ya había luchado bastante y decidió disfrutar tranquilo sus últimos días cuando sintió que el final se acercaba.

Entonces llamó a Évole, quien con esa larga conversación que tuvieron cuando la muerte rondaba, produjo "Eso que tú me das", el documental que se estrenará el 26 de agosto en el Festival de cine de Málaga, España.

La muerte de Donés fue un golpe duro para la música española, pues su carrera como cantante, guitarrista y líder de Jarabe de Palo marcó el pop de ese país con canciones tan populares como "Depende", Bonito" y "La flaca". Ese era uno de sus sellos: canciones tituladas con una palabra que lo dijera todo.

Según la descripción de la película, se trata de "un registro único de una persona que supo vivir y morir apreciando la vida en su totalidad, de alguien que, llegado el momento de la verdad, no quiso irse sin dejarnos a todos el testimonio de su agradecimiento".

El documental "Eso que tú me das" está dirigido por el propio periodista Jordi Évole y Ramón Lara. El guion fue escrito por Màrius Sánchez y Silvia Merino y la producción estuvo a cargo de Atresmedia y Producciones del barrio.