Editorial Al Aire Libro encontró la fórmula para combatir el coronavirus
Fundada un año antes del 27/F, en Tomé, el sello literario ha sabido hacerle frente a las adversidades apuntando a títulos que aporten al desarrollo cultural en todas sus dimensiones.
Mientras habla, Darwin Rodríguez se queda en pausa al otro lado de la línea. "Estábamos con varios proyectos normales de edición", dice quien fundó la editorial Al Aire Libro hace 12 años.
Un tiempo donde, efectivamente todo parecía normal, ajustado a los designios del mercado, la literatura y el lanzamiento de algún nuevo título.
Todo hasta el 15 de marzo pasado, apunta el literato con residencia en Tomé, también base del sello, que dirige y que hasta la fecha suma más de 200 títulos lanzados.
Efectivamente, reconoce, la impresión iba en marcha. "Incluso, algunos (libros) convenidos preliminarmente con entidades públicas como municipios y centros culturales. Algunos estaban en ejecución y los entregamos durante el mes de abril", indica Rodríguez, sobre un momento en que ya estaba consciente que Al Aire tenía que buscar otras formas.
Y no solo para mantener Al Aire Libros, también a sus ochos colaboradores de planta. El primer paso concreto, frente a la emergencia sanitaria ya declarada lo dieron en mayo. "Literalmente, parimos un nuevo modelo que lanzamos a las redes y a los más de 200 autores que veníamos publicando desde 2009", explica.
Después de culminar el proceso de la primera versión del concurso "Alfonso Alcalde", que "se tradujo en la participación de 150 creadores/as de 15 países"; la editorial lanzó un nuevo modelo para armar textos: "5 x 20".
En simple la apuesta se explica por que se hacen cargo del diseño y edición de cinco libros por $20 mil.
ADECUARSE A LOS TIEMPOS
Para Rodríguez se hizo evidente que, a raíz del covid-19, la situación estaba cambiando. "Activamos un plan pertinente", alude.
- ¿En qué sentido apuntan a esa pertinencia?
-Enviamos a los/as autores/as las portadas afiches promocionales, que les permitía ofrecer online la venta de ejemplares de su obra a sus redes, como nosotros a las nuestras. Calculamos que en el plazo de un año tendrán circulando 200 ejemplares de su obra (sobre los cuales consideran los costos de producción). Así publican su libro, muchas veces postergado, con $ 20.000, que recuperan inmediatamente, pues hacen la venta en verde.
- ¿Sobre la base de qué hacen la proyección?
-La reciente experiencia nos indica que el promedio de ventas que tienen nuestros autores es de 50 ejemplares mensuales. Este mecanismo tiene una segunda ventaja, que diversificará las posibilidades de lecturas, "redistribuyendo el ingreso poético, literario y científico".
-Han podido editar textos en papel, pero ¿de cuántos títulos hablamos en modo covid-19?
-La convocatoria la hicimos a comienzos de mayo. Hemos publicado 10 títulos desde entonces; y estamos trabajando en los siguientes 10, mientras siguen llegando nuevos trabajos.
-En tiempos de globalización, las redes sociales resultan claves.
-Ha sido el medio a través del cual hemos operado, como todos, en estos meses. Evidentemente ha servido el prestigio y reconocimiento que hemos construido en estos años, a lo cual se suma la contribución de los medios, que empezó con la primera publicación post-terremoto de una nota en El Sur. Quiero decir con esto que las redes son una extensión del papel, de la prensa, del soporte "sentipensante".
Con solicitudes de autores de Concepción, Tomé, Valdivia, Santiago y Temuco, desde Al Aire Libro esperan seguir durante este año, de manera digital, lanzando nuevos libros poesía, ensayo, cuentos, política e investigación.