Que se revise la pertinencia de contar con un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) para el proyecto inmobiliario Plaza Los Canelos, que se ubicará en Michimalonco con Los Canelos, fue la solicitud que realizó el municipio de San Pedro de la Paz a la constructora Aitue.
Esto se hace en medio del proceso que sigue la empresa para obtener el permiso de edificación en la comuna, el que se ha ajustado a la normativa vigente según ha expresado la inmobiliaria en varias ocasiones.
El oficio que emitió el municipio obliga ahora a la constructora a ponerse en contacto con el Servicio de Impacto Ambiental (SEA) para que este organismo determine si se requiere una evaluación técnica de las implicancias sociales y ambientales del proyecto.
El alcalde Audito Retamal explicó que "para nosotros resulta fundamental tener la visión técnica y normativa del Servicio de Evaluación Ambiental respecto de este proyecto inmobiliario, porque claramente se trata de una edificación que es de una envergadura muy mayor respecto de lo que tradicionalmente se ha levantado en esta parte de la ciudad".
Los estudios de impacto son solicitados, de acuerdo a la normativa ambiental, en seis situaciones. La que podría aplicarse en este caso es la número tres, y que se refiere a "reasentamiento de comunidades humanas, o alteración significativa de los sistemas de vida y costumbres de los grupos humanos".
PROYECTO POLÉMICO
El proyecto de Aitue considera la construcción de una torre de 45 metros de alto, con capacidad para 294 departamentos de entre 37 y 94 metros cuadrados, distribuidos en un edificio de 18 pisos, además de un área destinada a comercio y servicios. La estructura estaría ubicada en la Av. Los Canelos, en el mismo lugar donde antes funcionaban las oficinas de la Forestal Mininco.
Además, desde Aitue informaron que la iniciativa se proyecta en la parte frontal de un predio de 8.500 metros cuadrados, por lo que tiene un distanciamiento superior al habitual respecto a las viviendas colindantes y una densidad constructiva menor a la que el terreno permite.
El proyecto habitacional todavía se encuentra en el proceso de obtener el permiso de edificación; sin embargo, desde ya ha generado inquietud en los vecinos del sector por los impactos que podría tener la edificación de 45 metros. Lo anterior, porque en ese sector no existe otra construcción de igual envergadura y la Villa San Pedro se ha caracterizado por ser una zona de edificios bajos.
Sin embargo, la preocupación de los vecinos no se refleja en el Plan Regulador Comunal, ya que el instrumento de planificación territorial permite que en ese sector se levanten construcciones de hasta 18 pisos, tal y como propone la inmobiliaria Aitue.
Respecto de la consideración que solicitó el municipio a la empresa, a través de una comunicación de prensa esta informó que "al diseñar el proyecto se analizaron los requerimientos normativos y dada sus características, se determinó que no es necesaria una evaluación por parte del Servicio de Evaluación Ambiental".
Pese a ello, indicaron que "la empresa acogerá lo señalado por la municipalidad e ingresará a la brevedad la consulta de pertinencia, para que la Autoridad Ambiental se pronuncie".
ANÁLISIS DEL CONCEJO
El concejal Mauricio Bastías (RN), quien además es presidente de la comisión de Obras del órgano colegiado, contó que la decisión de solicitar el informe al SEA fue uno de los temas que se discutió en una de las sesiones que sostuvieron a fines de febrero.
"Nosotros reaccionamos a las inquietudes y la preocupación que los vecinos manifestaron por esta construcción. Ellos no objetan el proyecto a priori, sino las alturas que están en juego; y además el riesgo que ellos observan en que al haber movimiento de tierra, eso podría repercutir en sus propias viviendas y es en función de eso que se está solicitando este pertinencia de informe de impacto ambiental", indicó.